Todos en campaña, de un modo o de otro. Por las calles haciendo el tontaina, en el Congreso, por televisión, en la prensa, las pancartas en las farolas, no nos queda resquicio alguno. La impresentable Esperanza Aguirre y su "enemigo Rajoy", el capullo Wert, el gaznápiro Tardà, la zafia Villalobos, en fin, para qué seguir.
Y por si fuera poco... otra vez la lengua como arma electoral utilizada a diestro y siniestro. Es un poco cansino, la verdad.
Pues sí, un verdadero suplicio, la verdad. Una se pregunta si lo que se plantea son distintos modelos sociales, o al menos una confrontación de ideas y programas, o se trata sólo de mera competencia comercial, porque el estilo es el mismo. Propaganda y más propaganda, y un verdadero derroche de dinero y de idioteces. Un poco más seriedad, y de sobriedad, no nos vendría nada mal.
Pues sí, un verdadero suplicio, la verdad. Una se pregunta si lo que se plantea son distintos modelos sociales, o al menos una confrontación de ideas y programas, o se trata sólo de mera competencia comercial, porque el estilo es el mismo. Propaganda y más propaganda, y un verdadero derroche de dinero y de idioteces. Un poco más seriedad, y de sobriedad, no nos vendría nada mal.
ResponderEliminarYa falta menos. Aunque aquí luego viene la segunda parte. Sin más comentarios. MJ
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