sábado, 30 de marzo de 2019

Dedicado a María Moliner

Hoy Google le dedica el Doodle del día a María Moliner (Zaragoza, 1900 — Madrid, 1981), cosa de la que se alegra mucho Gran Uribe, porque hay veces en que esos dibujitos que hay encima del buscador los dedican a una gente conocida en su casa a las horas de comer. No es que María sea muy popular, de hecho hay quien la confunde con la graciosilla quemaconstituciones Empar Moliner —mucho más popular, al menos en Cataluña—, pero todavía hay clases...


María Moliner, con su diccionario
[Fotografía de autor desconocido]
Por eso, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, vamos a hablar un poco de ella. En los primeros cincuenta comenzó María a componer en su casa, en horas libres, «un pequeño diccionario en dos añitos», una obra que viniera a cubrir las insuficiencias del de la RAE; pero era una mujer tesonera y los dos añitos acabaron convirtiéndose en quince, para desesperación de los linotipistas, a los que volvió locos con sus continuas rectificaciones.

El resultado es un diccionario que soluciona todas las dudas. Cuando uno se adentra en él, aparte de encontrar siempre lo que busca, le queda explicado todo con meridiana claridad, aportando definiciones, ejemplos, sinónimos, expresiones y frases hechas, y relacionando familias de palabras. Por tanto, no es raro que los traductores afirmen siempre que es el diccionario que más utilizan. En esta casa, también, junto con el Casares y el de la RAE, por supuesto.


En 1972, avalado por Dámaso Alonso, Rafael Lapesa y Pedro Laín Entralgo, se propuso su entrada en la Real Academia, pero el sillón lo acabó ocupando Alarcos (con todo merecimiento también). Pero es que... ni entonces ni nunca. Era mujer, trabajó para la República, era bibliotecaria y nadie la consideraba lingüista; además, su diccionario cuestionaba en cierto modo al de la RAE. Quizá por todo ello, nunca llegó a ocupar un sillón allí, pese a sus grandes merecimientos.

Ella lo acogió con filosofía: «Sí, mi biografía es muy escueta en cuanto a que mi único mérito es mi diccionario. Es decir, yo no tengo ninguna obra que se pueda añadir a esa para hacer una larga lista que contribuya a acreditar mi entrada en la Academia. Mi obra es limpiamente el diccionario, pero si ese diccionario lo hubiera escrito un hombre, yo diría: "¡Pero, y ese hombre, cómo no está en la Academia!"».

Al final, la primera mujer académica fue Carmen Conde, pero ¡ojo al dato!, lo fue en 1979, una vez instaurada la democracia, en un momento en que María Moliner tenía ya una enfermedad que le hubiera impedido optar a ese sillón.

Fragmento en horizontal de una página al azar del  Diccionario de uso del español, de María Moliner (las dos columnas son independientes)

viernes, 29 de marzo de 2019

Las cigüeñas de Alcalá de Henares (y las folías)

Un año más, los entusiastas aficionados a las aves de SEO/BirdLife (entidad de la que G.U. es socio 'pagano', pero tirando a poco practicante) nos ofrecen en directo la vida de las cigüeñas, que han vuelto un año más a ocupar la torre del Ay Untamiento de Alcalá de Henares, en la plaza de Cervantes. Desde allí, las susodichas cigüeñas pueden ver la Torre de Santa María y, un poco más lejos, el convento de Clarisas de San Diego. Por tanto, no tienen malas vistas...


La webcam emite en directo las 24 horas del día. Pero, por si les aburre un poco [como Sleep (El sueño), aquella mítica película del año 1963 de Andy Warhol, que consistía en una larga secuencia de un amiguete suyo durmiendo durante cinco horas y pico], o les pilla de noche y "no se ve un pijo", les mostramos el momento estelar en que las cigüeñas cuidan de cinco huevos, que pronto traerán importantes novedades a la webcam... Y aquí estaremos para contarlo.




Bien, ya que estamos hoy en Alcalá de Henares, una ciudad preciosa, les ofrecemos un complemento musical que haga honor a ese lugar. Les cuento: Antonio Martín y Coll (Reus, 1660 - Madrid 1734) fue un fraile franciscano, organista y compositor de música barroca. Ingresó de joven, en su condición de organista, en el citado monasterio de Clarisas de San Diego, en Alcalá de Henares, una actividad que siguió desempeñando después en Madrid, donde falleció.


Una de sus obras más conocidas es Diferencias sobre las folías (unas variaciones sobre las folías, uno de los temas musicales europeos más recurrentes en el XVI y XVII). Aquí nos las ofrece Jordi Savall a la viola de gamba, acompañado al arpa por Arianna Savall (hija de Jordi y de la malograda Montserrat Figueras, de la que hablábamos el lunes pasado), Rolf Lislevand, guitarra barroca, Pedro Estevan, percusión y Adela González-Campa, castañuelas. Que lo disfruten.

jueves, 28 de marzo de 2019

La dedicatoria de esta novela es llamativa

Llibreria Ona (Barcelona) / (27/3/2019)
Les cuento. Por motivos que no vienen al caso, Gran Uribe acudió ayer a la Llibreria Ona, en el barrio de Gracia, muy cerca de la casa Vicens, de Gaudí. Ramón Solsona, un escritor que empieza a estar bastante bien valorado (y más que lo estará en el futuro, ni que decir tiene), presentaba allí su novela Disset pianos.

La dedicatoria de la novela le llamó poderosamente la atención a quien esto escribe y, quizá por ello, procedió a su adquisición in situ (19,50€). Acudan pronto a la librería, que se agotan. Además, allí encontrarán todo tipo de abalorios relativos al procés: lacitos, bufandas amarillas, libretitas, puntos de libro con la imagen de los presos, etc., pero ni un solo libro escrito en castellano, faltaría más. Bueno, si no pueden ir allí, esperen a una segunda edición para Sant Jordi y se estalviarán casi dos euros. Esto es lo que hay por estos lares. La cosa no da más de sí.

Ramón Solsona, Disset pianos,Ed. Proa, 2019
[A los prisioneros políticos, a los exiliados, a los heridos, al millar de encausados e investigados, a los más de doscientos cargos destituidos, a los organismos intervenidos, a las entidades registradas, a los medios amenazados, a los profesionales censurados, a los despedidos y vetados por las empresas periodísticas, a los maestros y profesores denunciados, a los activistas perseguidos y a todas las víctimas de la represión ejercida por el estado español contra Cataluña durante los meses que duró la redacción de esta novela].


Sobre el "Manifiesto Koiné"

El Manifiesto Koiné surgió en 2016, cuando ya se estaban preparando las Estructures d´Estat de cara a las jornadas de septiembre y octubre de 2017, de infausto recuerdo, y que están sometidas a juicio en el Supremo, como ya saben.

Lluís Bosch lo comenta una vez más en su entrada de hoy, titulada Koiné o la irresponsabilidad. G.U. está de acuerdo al cien por cien con lo que dice Lluís, "como no podía ser de otra manera". El manifiesto, que reproducimos más abajo traducido al castellano (para los que nos siguen "allende nuestras fronteras" —catalanas—), puede servir de aviso a los navegantes de lo que tiene pensado hacer el procesismo en materia lingüística una vez implementada la republiqueta.

[...] «Solo hace falta leer el manifiesto Koiné o las continuas algaradas de uno de sus más furiosos redactores, el traductor Pau Vidal, un traductor que anda siempre enfurruñado, cabreado con el bilingüismo y contra los que hablan castellano en Cataluña. A mi me duele esa actitud, que me parece poco realista pero sobretodo injusta. 

Por no hablar de que es una actitud que parte de la superioridad de una comunidad lingüística, superioridad y legitimidad y no sé cuantas prerrogativas más. Vidal y los suyos quieren eliminar el idioma castellano de Cataluña en nombre de unos argumentos que prescinden de la historia, de la verdad, de la ciencia. Que se remiten al esencialismo, al supremacismo, a la exclusión. 

Vidal y los de Koiné viven obsesionados con la desaparición de la lengua catalana, en un estado de cabreo permanente. No se acuerdan de que la lengua catalana es la lengua de las escuelas catalanas, que jamás esa lengua dispuso de tanta protección legal e institucional, de tantas prerrogativas. De que es la lengua de la administración del estado en Cataluña (es decir, la autonomía), que dispone del canal de televisión público más caro de España, de que las editoriales reciben subvenciones por publicar en catalán (pregúntenle al señor Torra, que algo de eso sabe). En toda la historia de la región catalana, jamás la lengua catalana había sido tan cuidada, tan sufragada, tan promovida por el aparato estatal y sus leyes». [...]


MANIFIESTO KOINÉ

POR UN VERDADERO PROCESO DE NORMALIZACIÓN LINGÜÍSTICA EN LA CATALUÑA INDEPENDIENTE

Los abajo firmantes, estudiosos de la lengua, filólogos, lingüistas, docentes, escritores, traductores, juristas y profesionales de ámbitos afines, considerando la situación real de la lengua catalana y en la perspectiva del proceso constituyente que bien pronto comenzará en Cataluña, por el mandato democrático expresado este 27 de septiembre pasado, se creen en el deber ciudadano de exponer a la opinión pública lo que sigue:

1. Que la lengua catalana es la lengua de Cataluña, en el sentido que es la lengua endógena del territorio de Cataluña, donde se ha formado y ha evolucionado históricamente, y desde donde se extendió en los territorios contiguos del País Valenciano y las Islas Baleares. Es la lengua en que siempre ha hablado el pueblo catalán.
2. Que la lengua catalana no está «aun así» en la situación normal de una lengua territorial en el propio territorio; porque, a causa de la anexión del Principado de Cataluña al Reino de Castilla desde el 1714, el castellano, como lengua de dominación, le disputa coercitivamente este estatus de lengua territorial y ha intentado y continúa intentando represivamente de desplazarla de los ámbitos de uso lingüístico general. Igualmente acontece en el País Valenciano desde el 1707, en Mallorca e Ibiza desde el 1715 y en Menorca desde el 1802. Del mismo modo, se ha ido imponiendo el francés a los condados del norte (ahora conocidos como Cataluña del Norte), a partir de la anexión de esta parte del Principado el 1659 al Reino de Francia.
3. Constatamos también que, como suele ser típico de los procesos de dominación política lingüística, el mecanismo para conseguir la implantación del castellano en Cataluña fue y continúa siendo la bilingüización forzosa de la población. Un proceso que costó siglos y que hasta el 1939 todavía era bastante precario en cuanto a la mayor parte de las clases populares. El régimen dictatorial del general Franco completó aun así en dos generaciones este proceso de bilingüización forzosa mediante la represión politicojurídica del uso del catalán, la enseñanza obligatoria y la extensión de los nuevos medios de comunicación, los dos absolutamente en castellano, y la utilización de una inmigración llegada de territorios castellanohablantes como instrumento involuntario de colonización lingüística.
4. Constatamos que el régimen constitucional del 1978 ha arreciado la continuidad de la imposición politicojurídica del castellano en Cataluña. La legislación de la Generalitat restablecida y la política lingüística consiguiente han servido para superar en ciertos ámbitos y bastante precariamente la minorización total sufrida por el catalán en manos del franquismo, pero no para revertir la norma social de uso subordinado del catalán al castellano que condiciona el uso lingüístico cotidiano de la inmensa mayoría de los hablantes y que lleva a una indefectible sustitución de la lengua del país por la lengua impuesta por el Estado.
5. Constatamos que este proceso de sustitución se ha ido acelerando, de forma que la situación actual de la lengua catalana en la mayoría de ámbitos de uso general es extremamente crítica, hasta el punto que el catalán no es a estas alturas, en Cataluña, la lengua no marcada, aquella que espontáneamente cualquier habitante emplea para dirigirse a un desconocido. Tampoco es la lengua predominante entre las generaciones de la llamada «inmersión»: en las zonas más pobladas la conocen pero la usan mínimamente. Y, en paralelo al arrinconamiento social, la degradación cualitativa, estructural, de la lengua no ha parado de crecer y va camino de convertirse en un tipo de dialecto del castellano.

DENUNCIAMOS:

1. La profunda anormalidad que significa que en Cataluña (y en todos los otros países de lengua catalana), la realidad lingüística normal en un país con inmigración aparezca en cierto modo cambiada: la lengua de la inmigración (pero solo la española) toma a todos los efectos el rol de lengua por defecto, de lengua del país, de lengua nacional, y, contrariamente, la lengua del país se va convirtiendo en privativa de una comunidad cerrada, una lengua que se va reduciendo y acabará desapareciendo, como suele pasar con las lenguas de inmigración. Esta anormalidad queda distorsionada por la mayor parte de las encuestas lingüísticas que se promueven.
2. Denunciamos la ideología política del llamado «bilingüismo», que se ha ido inoculando desde las esferas de poder a toda la población catalana desde 1978 para justificar el régimen jurídico establecido por la Constitución y el Estatuto de autonomía haciendo creer que la coexistencia de dos lenguas en Cataluña, las dos con un supuesto mismo estatus de oficialidad e igualdad de derechos, es un hecho natural, positivo, enriquecedor y democrático. En realidad, esta ideología bilingüista no es nada más que una forma de encubrir y legitimar la subordinación de una lengua a la otra y el consiguiente proceso de sustitución lingüística que sufre la sociedad catalana. La lentitud de este proceso fomenta entre la población el espejismo de que el bilingüismo social puede permitir el triunfo de la lengua minorizada y una situación de equilibrio permanente entre la lengua endógena y la exógena.
3. Denunciamos las manifestaciones de algunos grupos políticos que, bajo la capa de la ideología bilingüista, proponen para la futura República Catalana que la anormalidad lingüística actual continúe siendo garantizada y acontezca la falsa normalidad de la república.

MANIFESTAMOS:

1. La urgencia de una toma de conciencia del problema social que constituye para la sociedad catalana el desguace lingüístico creado por la dominación española, una conciencia que ahora falta en la mayoría de los ciudadanos y en muchos dirigentes políticos. Hace falta que todo el mundo entienda que uno de los grandes problemas de estado de la nueva república, quizás el más importante, será el problema lingüístico, porque afecta la base misma de la cohesión social.
2. Manifestamos la necesidad que esta conciencia lingüística informe el debate ciudadano del proceso constituyente y el consenso constitucional, si no se quiere que la nueva constitución sea una forma de cerrar en falso el problema lingüístico y dificulte o incluso imposibilite empezar a solucionarlo por las únicas vías posibles: a) la restitución al catalán del estatus de lengua territorial de Cataluña (e igualmente para el occitano en la Valle de Aran), b) la reversión de la práctica de la subordinación sistemática y generalizada del uso del catalán (o del occitano) al uso del castellano, y c) la recuperación progresiva de la genuinidad de la lengua.
3. Manifestamos finalmente la necesidad, como fruto de la toma de conciencia lingüística, de la creación de un amplio movimiento ciudadano para la normalización lingüística que reúna cada vez más voluntades comprometidas en una conducta superadora de la subordinación lingüística; un movimiento en que hace falta que vaya confluyendo todo el mundo, sea cual sea su origen y sea cual sea su lengua inicial.
4. Manifestamos la necesidad, en definitiva, de que se incorpore al proceso constituyente la voluntad de articular la lengua catalana como eje integrador de nuestra ciudadanía en un marco de asunción pública del multilingüismo como riqueza individual y social, con todas las medidas necesarias para garantizar que todo el mundo se sienta reconocido e incluido en la construcción de un país normal, también en cuanto a la lengua.


Paraninfo de la Universitat de Barcelona, 31 de marzo de 2016
Lo firman 170 sujetos (Premis d´Honor de les Lletres Catalanes, profesores, escritores, políticos procesistas y chuponcetes diversos).

miércoles, 27 de marzo de 2019

Google Fotos se equivoca

G.U. acaba de recibir un atento mensaje de Google Fotos, adjuntándole una especie de collage —no solicitado— con fragmentos de fotos, realizado por ellos; unas fotografías que, según afirman, fueron hechas tal día como hoy hace ya ¡cuatro años! A ver si va a ser verdad eso de que el tiempo vuela... De todas manersas, se agradece el entrañable recuerdo de una Semana Santa mucho más temprana que la de ahora, que pasamos en aquellos hermosos lugares de Zamora (tal como quedó constancia en este blog), pero hay que matizar que contiene un pequeño error.


Es cierto que la fotografía vespertina de la catedral de Zamora (arriba a la izquierda) se hizo el 27 de marzo de 2015, durante el llamado «Viernes de Dolores». Pero la de la colegiata de Toro y la de la niña, fueron tomadas dos días después, el 29 de marzo, «Domingo de Ramos». ¡Ay Google, Google!, esos servicios de información te están fallando...

martes, 26 de marzo de 2019

El juicio del "procés" en TV3

Mónica Terribas
[granuribe50]
¡Cómo está el patio! El Estado español está hecho unos zorros, de tal manera que "si monta un circo le crecen los enanos". En efecto, ahora además le empiezan a llover severas condenas por parte de politiquillos y demagogos de ambas orillas del charco por lo de la conquista de Méjico a cargo de Hernán Cortés en el S. XVI, ya que el rey Felipe no le pide mil perdones a un sujeto llamado López Obrador por aquel asunto. A lo que se replica desde el otro bando, que aprovecha la jugada para "hacer patria".

Por no hablar de lo del procés, con la eminente Corte de Monaguillos de la cadena pública TV3, una secta que está comandada por la torquemadiana Monicuatrocientosmil Terribas (ese apodo hace referencia a los euros que se dice que le pagamos entre todos para que nos adoctrine bien en el catecismo procesista y nos amoneste si es preciso). Esa gente condena diariamente en TV3 al Estado por su vil actuación contra los desamparados paisanos de G.U., de tal modo que no sería raro que le cayeran de ocho a diez años. Como dice Albert Soler: «Terribas es el mejor ejemplo de cómo han degenerado en Cataluña los medios públicos, capaces ya únicamente de hacer de altavoz del dueño a cambio de un buen sueldo».

Enlace al artículo de Albert Soler titulado Terribas la servil




Sigamos. Decía anteayer Ferran Monegal, acerca de la entrevista de Évole a cinco periodistas (entre ellos la propia Terribas) en una columna titulada Hacer periodismo o hacer de monaguillos: «A mí me gustó cuando Évole lanzó: "¿Hemos hecho más de políticos que de periodistas?". Maticemos la pregunta. Hacer de políticos, no; pero de monaguillos, en Sant Joan Despí, y en Diagonal/Beethoven, continuamente».


Y ayer, refiriéndose al juicio y TV3, añadía Monegal en Juicio paralelo: el 'chute' dopante de TV-3

«En el periodismo clásico siempre se ha abominado de los juicios paralelos que se puedan practicar en la tele. Recuerdo que en TV-3 estimables periodistas y estrellas de la casa tenían como norma, como libro de estilo, como práctica de periodismo honesto, no interferir nunca en la labor de los jueces que estaban juzgando algún caso en una Corte de Justicia.  ¡Ah! Siempre lo aplaudí y me alineé con ellos. TV-3 nunca intentó suplantar la labor de la Justicia jugando a ser jueces desde un programa de televisión, y mucho menos intentar que la audiencia, desde casa, dictásemos cada noche una sentencia. ¡Ah! Pero con  el juicio al procés que se viene celebrando en el Tribunal Supremo, ahora a TV-3 la han transformado en una Corte de Justicia paralela. Los cheerleaders hacen cada día de jueces.[...]

Este pío-pío en forma de "meme" es trending topic en la red social Twitter 
»Al rebaño hay que darle de comer pienso preparado. Hay que evitar que se alimente solo, por el campo, libremente. Por eso la cadena se transforma cada día, desde primera hora de la tarde, hasta la madrugada, en una colosal trinchera. Predicadores, sacerdotisas, monaguillos y acólitos nos hacen un digest a su gusto de lo ocurrido en el Supremo. Es fundamental la virtuosa labor de editaje y manipulación sobre tal o cual declaración, pregunta o momento. Se resalta el pasaje que interesa, y se corta y se silencia lo que no conviene. Los programas de humor de la cadena, con su sarcasmo unidireccional, son la guinda del pastel. Y TV-3 acaba la jornada habiendo cocinado su particular versión del juicio, una papilla que nos inyecta directamente en vena, y que actúa como colosal chute dopante de la audiencia.

El otro día me pasaron este meme que circula por la red. Letras blancas, fondo rojo y este texto: «Viendo el juicio en TV-3, yo creo que al Estado español le caerán de ocho a diez años». Descripción perfecta».


lunes, 25 de marzo de 2019

Un día melancólico con recuerdos musicales

Gran Uribe les va a contar algo personal (lo hace a veces, sobre todo cuando anda algo mustio y con la guardia baja). Su última visita al lugar de trabajo de veintisiete años (un instituto de secundaria en el extrarradio de Barcelona, en el que ya no daba clases desde finales el junio anterior) se produjo el 23 de noviembre de 2011. Fue con ocasión de ir a buscar un décimo de lotería que le tenían reservado. Ya saben, una visita a los antiguos compañeros se suele hacer con cierta ilusión al principio. Pero uno intuía que no volvería por allí; ya a casi nadie importas un pepino, y esa premonición le llenaba de melancolía, sentimental que es uno, a pesar de que lo que vivió en ese lugar no siempre fue agradable.

Volviendo a casa en el coche ese día de 2011, se enteró por la radio de que había fallecido de cáncer Montserrat Figueras (la esposa de Jordi Savall), una mujer que cantaba como los mismísimos ángeles y a la que G.U. apreciaba mucho. Y va y no se les ocurre otra cosa que programar Folle è ben che si crede, de Tarquinio Merula, una canción que no conocía entonces, interpretado por ella y el grupito de Jordi Savall.

Tarquinio Merula, Folle è ben que si crede; Jordi Savall y Montserrat Figueras
 (del CD Arie e Capricci a voce sola, Venetia 1633

Y, no se lo pierdan, lo hacía tan puñeteramente bien Montserrat Figueras, que G.U. se puso a llorar como un zagal, como no lo hacía desde que falleció Patiña, ya saben de quién hablamos. Con decirles que un poco más y se estampa contra el pretil de la autopista... Ciertas músicas es lo que tienen, y cada una tiene sus momentos de gloria (o de miseria).



Bueno, no inquietarse, G.U. no se estrelló; no tenemos aquí la dulce imagen de Montserrat Figueras, pero sí a Jennifer Ellis Kampani y Voices of Music, que lo hacen maravillosamente, aunque con otro registro muy diferente. Hoy, a G.U. le ha apetecido escuchar todo eso de nuevo, y no se arrepiente.

Jennifer Ellis Kampani y Voices of Music interpretan Folle è ben che si crede, de Tarquinio Merula

Loco es aquel que crea / que con dulces promesas de amor / o feroces y terribles amenazas / consiga alejarme de mi bello ídolo, / que cambie de opinión / quien espere que mi corazón prisionero / goce de libertad./ Que hable quien quiera, que hable quien sepa.

Que otros por celos,/ lancen impías llamas de su pecho / y la furia Megera vierta su veneno / para que quiebre la fe en mi amada./ Aunque la muerte me arrebate la vida / nunca será verdad que se disuelva / ese preciado lazo que me ha hecho preso. / Que hable quien quiera, que hable quien sepa.

Ya tendré momento y lugar / para desahogar mis penas de amor / y clamar, de mi amado bien / y de mi ardiente corazón, el fuego oculto./ Y entre las sombras y el misterio / de los esplendores nocturnos / mi preciado secreto se esconderá. / Que hable quien quiera, que hable quien sepa.

[Tarquinio Merula (1595-1665), por cierto, es un músico fascinante del primer barroco italiano (hay muchos otros), a pesar de que tenía un carácter hosco y resultaba ser un sujeto intratable. Con él sucede algo que no sería ni la primera ni la última vez que se da en la historia del arte: alguien que con un carácter total y absolutamente miserable, refleja en sus obras, sin embargo, un cierto grado de sensibilidad].



Cambio de tercio. Ojo, no nos referimos a las acuarelas (casi todas falsas) de ese siniestro sujeto, el Fürher , que salen de debajo de las piedras y se están vendiendo casi como si fueran ¡de Van Gogh! Vivir para ver; cosas del mundo del arte y de la especulación. Y si no, lean el artículo de ayer en EL PAÍS, titulado Demasiados 'hitlers'a subasta.


sábado, 23 de marzo de 2019

La Guardia Civil y las novelas de Lorenzo Silva

Esta novela, El lejano país de los estanques, la escribió Lorenzo Silva en 1995, durante un mes febril en que dio forma novelesca al sargento de la guardia civil Rubén Bevilacqua y a la guardia Virginia Chamorro. Diez novelas más han continuado la serie, desde la maravillosa El alquimista impaciente (quizá la mejor) o La Niebla y la doncella (muy buena) hasta la última, Lejos del corazón. Todas ellas se las ha zampado Gran Uribe en un plis plas.

En estos días en que el testimonio de los guardias en el juicio del procés ha despertado un cierto clima de comprensión hacia el denostado cuerpo de la Guardia Civil y también desagradables risotadas (entre algunos procesados, sus pelotillas y los tertulianos de TV3, encabezados por la quemaconstituciones Empar Moliner, por no hablar de abertzales diversos y ¡Rufián!), no le ha parecido mala idea a G.U. hacer una mención a esa serie de novelas de Lorenzo Silva, la mar de bien escritas todas ellas. No se piensen ustedes que sea fácil narrar así de bien...


Suponemos que a estas alturas ya saben que a G.U. le hubiera gustado ser detective (o criminólogo, como se dice ahora), tal como ya hemos comentado en alguna ocasión. En su defecto (en aquella época no se llevaba eso), estudió arquitectura y luego se hizo profesor de dibujo, pero sigue siendo proclive a leer muchas de esas cosas.

En la novela de la que hablamos ahora, la primera de la serie de Lorenzo Silva, se nos presenta por primera vez a los dos personajes principales. La guardia Chamorro estudia Ciencias Exactas porque tiene mucha afición a las matemáticas, le gusta la astronomía y contemplar las estrellas. Pero es difícil trabajar de astrónoma y hay que comer cada día. Por ello se mete a guardia civil, esperando acabar aquella carrera algún día. En cuanto a Bevilacqua, era un licenciado en Psicología en paro cuando decidió emprender a los veinticinco años el mismo camino y hacerse picoleto. Tomó esa determinación una tarde, mientras intentaba deglutir la Psicopatología de la vida cotidiana, de Freud, ahí es nada.

Pero dejemos que nos lo cuente Lorenzo Silva, en boca de Bevilacqua respondiendo a una pregunta de Chamorro:

Lorenzo Silva, El lejano país de los estanques, Colección Booket, 2006 (1998, Ed. Destino), págs. 82-83

viernes, 22 de marzo de 2019

Algunas frases de la semana

G. U. es solo un español de "notable". Por tanto, no podrá disponer de rifle, de pistola, de cimitarra, ni tan siquiera de puñal en su casa
Un reclamo incontestable de cara a los próximos comicios del 28A

jueves, 21 de marzo de 2019

Salvador Oliva se lo dedica a Elsa Artadi

«Somos diferentes del resto de España. Este diferentes, naturalmente, quiere decir mejores».

Salvador Oliva, Nacionalismo y 'nazionalismo'; Provocacions, QUADERNS (21/3/2019)
«No sé si la gente joven de hoy en día sabe que los muertos en la Segunda Guerra Mundial, sólo en Europa, ascienden a unos cuarenta millones, y que seis de estos fueron víctimas de "la solución final", que consistía en la tortura y la eliminación, fríamente organizada, sobre todo de la raza judía, pero también de gitanos, homosexuales y disidentes. Para hacernos cargo, recomiendo a todo el mundo visualizar los horripilantes detalles de máxima crueldad que los documentales de Netflix nos ofrecen sobre el tema.

Para llevar a cabo esta barbarie se necesitaron sólo dos hechos. Primero: un aparato de propaganda, creado por Goebbels, capaz de halagar el egoísmo colectivo de los alemanes, con la ideología nacionalista y un tono de voz fanático, que consistía en hacer creer que eran superiores a los otros. Y segundo: culpar a estos otros de todos los males que afectaban a Alemania. Después de esto, sólo era necesario que surgiera un líder enloquecido, como Hitler, capaz de convencer a los suyos de que la culpa es de los otros, que no son personas, sino bestias. Y finalmente había que tener y dominar un ejército obediente dispuesto a cumplir las órdenes. Pues bien, todo esto no es más que el nacionalismo llevado a las últimas consecuencias. Y con todo, no debemos pensar que los nacionalistas fueran monstruos. ¡De ninguna manera! A los nazis les encantaba el arte y la música clásica. Eran gente cultivada, es decir: buena gente

Aquí, en Cataluña, tenemos ya a casi la mitad de la población halagada con el egoísmo colectivo, tenemos unos aparatos de propaganda y unos medios de comunicación que no paran de adoctrinar. Hemos escuchado más de un discurso, como, por ejemplo, el de Marcel Mauri el pasado día 16 en Madrid, con un tono intensamente fanático. Tenemos el enemigo a quien culpar de todos nuestros males, que es España. Y tenemos también un convencimiento bastante extendido que nos dice que somos diferentes del resto de España. Este diferentes, naturalmente, quiere decir mejores

Por suerte, no tenemos ejército, ni líderes tan locos ni tan crueles como Hitler. Pero últimamente los hemos tenido, como Pujol y Mas, que aún proclaman satisfechos y con orgullo que son nacionalistas. El desequilibrado Puigdemont es aún peor. Y Torra los ha superado a todos ellos diciendo, entre otras barbaridades, que ¡los castellanos que viven aquí y no hablan catalán no son personas, sino bestias! No dijo que había que exterminarlos, pero repite a menudo que nuestro objetivo es atacar a España, nuestro enemigo, porque nos oprime. No pocos también añaden que, si queremos la independencia, debe haber muertos. Me pregunto a quién matarán primero. 

 Y para terminar, me gustaría pensar que si Elsa Artadi (que ha cometido la indecencia de comparar a Anna Frank con los lacistas) lee este artículo, que le dedico, quizá sea capaz de hacer comparaciones menos inmorales. Esto en el caso, naturalmente, de que su cabeza le sirva para algo más que para teñirse el pelo».

[A unos ufanos procesistas de la concentración del otro día en Madrid, un periodista de TV les hacía notar que los trenes en Extremadura eran un auténtico cascajo y también se estropeaban cada dos por tres, a lo que le respondieron con suficiencia: «Mire, no siga por ahí, no nos compare, nosotros somos otra cosa, somos diferentes de los extremeños».

Pues en eso siguen los más cazurros de los paisanos de G.U., que son bastantes. Supremacistas a tope, por usar un vocablo a punto de ser admitido por la RAE y con razón, ya que es muy necesario con los tiempos que corren.]

miércoles, 20 de marzo de 2019

Primavera y Día Mundial del Gorrión


Joan Manuel Serrat, Como un gorrión (del LP Mi niñez, 1970)

¡Qué gran disco Mi niñez, con el Serrat de 1970 en plena forma. Con ese tema (Mi niñez), al que siguen Señora, Cuando me vaya, Muchacha típica, Como un gorrión, ... de cartón piedra, Los debutantes, Fiesta, Si la muerte pisa mi huerto y Amigo mío. Casi nada. 

Celebremos con el gorrión su gran día y también la entrada de la primavera, que empieza justamente ahora, las 22:58.

Fotografía: José Ramón García Moreno
Gran Uribe nunca ha logrado que un gorrión se posara de este modo en un libro que estuviera leyendo, en este caso en la terraza de un bar, aunque lo ha intentado en diferentes ocasiones. La fotografía la tomó el autor de ese libro, quien sin duda lo estaba hojeando para ver como había salido de la imprenta y qué gazapos se habían colado. En cambio, uno ha conseguido sin problema que acudiera a su mesa a zamparse los restos de patatas chips, esas que suele tomar junto a la cervecita de rigor casi cada mediodía. En esos momentos, casi nunca faltan a la cita.

20 de marzo, Día Mundial del Gorrión
Campaña «Reinventa la ciudad» / (Imagen: SEO BirdLife)
En España, el gorrión común no parece atravesar una situación diferente a la de otros países, o sea, crítica, por no decir absolutamente nefasta. Gracias al programa de Seguimiento de Aves Comunes en Primavera (Sacre) de SEO/BirdLife se sabe que desde 2008 hasta 2018 la especie ha sufrido en nuestro país un descenso de población del 21%, lo que implica que en tan sólo una década podría haber 30 millones de gorriones menos.

«Este declive es alarmante, pues de no cambiar esta tendencia podríamos encontrarnos muy pronto con unas ciudades sin gorriones; pero también resulta inquietante, porque es posible que los factores que causantes del declive puedan afectar también al resto de habitantes de las zonas urbanas», ha asegurado hoy Beatriz Sánchez, coordinadora de la campaña Aves de Barrio de SEO/BirdLife.

lunes, 18 de marzo de 2019

La manifestación y el Estado dictatorial


Este infame Estado fascista y represor, que les permite manifestarse en la capital reclamando la ruptura con el susodicho Estado, es algo que resulta bastante insólito en otros Estados dictatoriales. Probablemente España sea, en efecto, la dictadura más peculiar del mundo. Y, por si fuera poco, no han detenido a nadie por sus ideas, para decepción de algunos de los viajeros y de los divertidos humoristas y tertulianos de TV3.

Y hablando de ideas, definitivamente, no parece haber sido una gran idea el viaje de esa gente —los autocares, los AVES, los bocadillos— visto que no se les ha hecho ningún caso. Allí, además, quizás hayan podido constatar que el Estado opresor no se parece al suyo, ni en su estado actual, ni en el que preparan, con una futura Constitución catalana que da miedo. Un gran error mediático, en fin, algo que no es habitual en ellos.

Por eso, los procesistas más despiertos, que se han dado cuenta, ya se han quejado de la indiferencia de los madrileños ante sus banderas, sus pancartas, sus discursos y sus cancioncitas de Lluís Llach. Y eso es lo que tienen los que solo se miran su propio ombligo: que piensan que los otros también se pasan el día admirándolos a ellos (el món ens mira!).

Pero al menos habrán podido visitar el Prado, rendir pleitesía a la Cibeles, pasear por el Barrio de las Letras y comer chocolate con churros en la cafetería del Círculo de Bellas Artes (el bocata de calamares en la plaza Mayor les caía un poco más lejos, pero podían haber ido a El Brillante, en Atocha, el mejor de toda la capital, como suele afirmar R. de E.). Y es que... Madrit bien vale una misa.

Madrid, 17 de marzo de 2019

En efecto, parece como si estuvieran deseando encontrar allí a alguien que los insultara, para así poder lamerse las heridas, aunque no haya aparecido ese alguien. Muchos paisanos de Gran Uribe comparten esta psicología tan especial.

domingo, 17 de marzo de 2019

Algo acerca de «Últimas tardes con Teresa»

Tomamos prestadas unas líneas de Tot Barcelona en su entrada La gran olvidada del Bocaccio, que hoy le ha pisado a la que pensaba hacer Gran Uribe. Cosas que pasan entre colegas blogueros...

«Esta semana pasada falleció Susan Holmquist, la modelo danesa asidua de Bocaccio, que protagonizó la tan recordada foto de la portada de Marsé, "Últimas tardes con Teresa". Susan Holmquist fue quizá la menos renombrada de todos los de "posibles" que hacían posible los llenos cotidianos de la noche. Bocaccio representaba la otra Barcelona. Pocos, por no decir nadie de los barrios obreros (Ribera, Gótic, Raval, Sta. Caterina, Carmel o Nou Barris, se podían dar el lujo de acercarse a los precios de aquellos bares, rebautizados pomposamente con el nombre de "boites". Aquello estaba acotado a la burguesía barcelonesa. Maspons, Miserachs, Regás, Bofill, Rexach, Moix, Moura, Gimpera, Vergano, Senillosa y cantantes de cierto renombre, ocupaban siempre las primeras líneas de la barra. Eran la "gauche divine", o sea la "creme de la creme". De una belleza sin par, Susan Holmquist fue aquella rubia nórdica con la que soñábamos todos los "aprendices" de la época. Descanse en paz».

Poco que añadir a lo que dicen Miquel Cartisano y los diferentes comentaristas de ese post. Quizá solo la fotografía original que tomó el gran Oriol Maspons desde uno de los apartamentos de las buhardillas de la Pedrera, donde vivían los padres de la modelo Susan Holmquist (que habían sido diseñados primorosamente por el arquitecto Barba Corsini), y algunas fotografías de aquella obra, desaparecida tras la adquisición del edificio por Caixa Catalunya en 1996.

Oriol Maspons; fotografía original para la portada de Últimas tardes con Teresa, tomada desde los apartamentos de la Pedrera
Imágenes de los apartamentos de la Pedrera; enlace: Barba Corsini en la Casa Milà
Bueno, y para completar el asunto, la portada de la novela —en la edición de Seix Barral que obra en casa (de 1975)— y las primeras líneas de la maravillosa obra de Juan Marsé, en las que nos empieza a hablar de Pijoaparte.

Juan Marsé, Últimas tardes con Teresa; Ed. Seix Barral, 1975 (1967); portada y primeros párrafos del capítulo 1

viernes, 15 de marzo de 2019

Ahora le toca a los jesuitas de Sarriá

«Cura que en la vecindad
Vive con desenvoltura,
¿Para qué le llaman cura,
Si es la misma enfermedad?»



Eso escribió Góngora en su poema Cura que en la vecindad, unos versos que se ha dicho a veces que iban dedicados a Lope de Vega, un tipo de «polaina ligera» (en palabras del padre de G.U), por su disoluta y promiscua vida, llena de amantes, casas e hijos (tuvo diecisiete, de madres diversas). Así le puso música Mateo Romero a principios del S. XVII:

Mateo Romero, Cura que en la vecindad (Luis de Góngora) / CAMERATA IBERIA

Pero aquí no vamos a hablar de eso, sino de la pederastia de los curas, un tema delicado que abordaremos de puntillas. En opinión de R. de E., el celibato de esa gente «se impuso por motivos económicos, para que las posibles riquezas de los curas no fuesen a parar a sus viudas e hijos sino a la santa madre iglesia. A partir de entonces, tuvieron que optar entre adaptarse a la norma o dedicarse al sexo clandestino». Fuera con mujeres, o entre ellos mismos, o... manoseando a menores, y esto último, lo de los niños, es lo que nos ocupa y preocupa, porque lo demás... ¡allá películas!



Sea como fuere, ya lo adivinábamos desde estas páginas hace unos meses. A lo de los maristas de Barcelona, de los jesuitas de Gijón o Bilbao y de los monjes de Montserrat (ya hablaremos de éstos), seguiría pronto algo referido a los jesuitas de Sarriá, en Barcelona. Y ¡bingo! El vaticinio tenía cierta lógica, ya que, si había pasado en otros lugares... ¿por qué no allí? Y, en efecto, ya van cayendo los casos como fruta madura, tal como nos contaba ayer El Periódico.

Fachada del colegio de San Ignacio, de los jesuitas de Sarriá (Barcelona)
Como quizá sepan algunos de ustedes, porque lo hemos comentado en otras ocasiones, G.U. estudió en ese colegio de jesuitas durante nueve años, desde lo que llamaban "Preparatoria" al "Preu".

Hace unas semanas eran dos curas de ese centro, de los que no guardamos mucha memoria, y anteayer surgió el tercer caso, y más que irán saliendo. En esta ocasión se trata de un personaje bastante significado en el colegio de San Ignacio de aquella época: nada menos que el padre prefecto, una especie de jefe de estudios, un tipo —según palabras de El Tapir, que también lo conoció— «un poco gris, de suaves mejillas sonrosadas y mirada tímida». Uno lo recuerda cuando nos venía a cantar públicamente las notas mensuales, provisto con una especie de enorme libro apaisado, lanzando pomposamente las loas y admoniciones correspondientes, según fuera el resultado obtenido por cada zagal.

Pero, a decir verdad, G.U. nunca recibió ningún otro recadito de ese sujeto, al margen de la advertencia correspondiente cuando las notas no eran buenas, o sea, pocas veces. Tampoco de ningún otro jesuita, aunque sí sintió algunos indicios extraños en momentos diversos, especialmente en el confesionario o durante los llamados «Ejercicios Espirituales». La lejana percepción que uno pueda tener a esas edades tan lejanas hace difícil discernir, pero si a uno le toca un cura los huevecillos o le da por la retaguardia es como para recordarlo...

Colegio de San Ignacio, de los jesuitas de Sarriá (Barcelona) / Patio, capilla, salón de actos y entrada a la capilla
Lo que sí recuerda perfectamente Gran Uribe, aunque en blanco y negro, es aquel enorme colegio. Con sus pasillos interminables y un poco lúgubres, como de sanatorio o de correccional, que recorríamos en perfecta formación en dos columnas a ambos lados (ventanales y pared), encabezadas por los "jefes de fila"; con su iglesia de tipo neogótico, en la que hacía un frio del carajo y a la que íbamos cada día a misa; y con el pomposo salón de actos, donde se celebraba trimestralmente la solemne "promulgación de dignidades" a la que nos hemos referido en estas páginas alguna vez.

jueves, 14 de marzo de 2019

¿Colau ministra de Vivienda?

¡Madre del amor hermoso! El plan tendría una ventaja: quitárnosla de encima como alcaldesa...

[CG / granuribe50]
Enlace

miércoles, 13 de marzo de 2019

martes, 12 de marzo de 2019

En recuerdo de Martín Chirino

El escultor Martín Chirino ha fallecido en Madrid a los 94 años. Otro grande que se nos va. Gran Uribe conoció algo de su obra a principios de los años setenta, gracias la revista Nueva Forma y también gracias al Museo de Escultura al Aire Libre de la Castellana, en Madrid, donde tiene expuesta una de sus Mediterránea.

Martín Chirino, Mediterránea / Eduardo Chillida, Lugar de encuentros III o La Sirena Varada, recién izada
[Museo de Escultura al Aire Libre, Paseo de la Castellana (Madrid)]
[Allí precisamente está colgada, bajo el paso elevado que cruza la Castellana, la escultura de Chillida La sirena varada (1972), que fue rebautizada de esta manera cuando el alcalde de Madrid, a la sazón Arias Navarro (Carnicerito de Málaga), prohibió que se situara en ese lugar, pendida del puente. Existía, según se dijo, la incertidumbre de si el paso elevado soportaría las seis toneladas de peso, y quedó allí varada una buena temporada. La decisión de Arias provocó un considerable cabreo en la progresía de entonces —la revista TRIUNFO no hablaba de otra cosa— y se convocaron tímidas concentraciones en ese lugar, reclamando que se izara al sitio previsto, pero no tuvieron ningún éxito: aún vivía Franco.

Luego empezó un largo peregrinaje, a lo largo del cual pasó un tiempo en Barcelona, por cierto en un buen lugar (la Fundació Joan Miró, que estaba recién inaugurada). Con la llegada de la democracia, el nuevo alcalde de Madrid solicitó un informe de los ingenieros que habían diseñado el paso elevado, en el que se avalara (de nuevo) que la estructura resistiría, como así fue. El día de 1978 en el que se colgó hubo un gran jolgorio bajo el puente que cruza la Castellana. Fue una cita espontánea: decenas de personas se reunieron para brindar por la muerte de la arbitrariedad de Carnicerito. (Hay que matizar que el susodicho había pedido también en su momento un dictamen, que fue positivo, pero lo debió de tirar a la basura, quizá porque a ese escultor vasco y a esa escultura... no los podía ver ni en pintura)].




Bien, no nos despistemos; hecho este inciso, sigamos con Martín Chirino. Leemos en El Mundo:

Martín Chirino (1925-2019)
Fotografía: José Aymá
«Venía de la reja y del arado. Tenía las manos rotundas de golpear el martillo sobre el yunque, hechas de calor y carbón de hulla. Manos de arcador que dotaban al hierro de un alma nueva, de una realidad inmediata. Martín Chirino pasó 70 años trabajando el hierro, dibujando el viento, pensando espirales que son horizonte de salida y de llegada.

Es uno de los nombres clave del arte contemporáneo español y uno de los principales escultores de lo que se denomina la tradición del metal. Chirino, miembro fundacional del Grupo El Paso en 1957 (que fijó en Cuenca su estafeta de cosas nuevas), nació en Las Palmas de Gran Canaria en 1925 (undécimo de 12 hermanos). De la cultura guanche extrajo parte de su poética plástica, convirtiendo el viento en símbolo, la espiral en materia, el misterio en uno de los motivos de su trabajo.

Chirino irrumpió en el panorama del arte contemporáneo a finales de los años 40, en la misma escudería de Manuel Millares, Antonio Saura, Luis Feito, Rafael Canogar, Pablo Serrano y Manuel Rivera, entre otros. Eran los jóvenes osados dispuestos a voltear la estética academicista y el canon acorazado del arte español. Y lo hicieron. Chirino trabajó con el espacio, pero no desde la densidad que asumieron Oteiza o Chillida, sino en la senda aérea de Julio González.


Manifiesto del grupo "El Paso" (Madrid, 1957) / Fuente: martinchirino.com
»Si Martín Chirino lleva tanto tiempo insistiendo en la espiral es porque ésta no se agota nunca. "No sabes dónde empieza y dónde acaba", dice. Una espiral rota en sí misma es un misterio. Tiene algo de hipótesis y de realidad. Sucede con ella como con los sueños, que lo que queda cuando despiertas no es lo que sentiste, sino su rumor».



Años después de lo que explicábamos al principio, G.U. vio alguna otra obra suya en en el Museo de Arte Abstracto Español, en las Casas Colgadas de Cuenca, un museo estupendo con preciosas vistas a la hoz del Huécar, en el que están representados todos los artistas del grupo "El Paso" que salen en la foto superior y otros muchos (Zóbel, Rueda, Torner, Sempere, Guerrero, Palazuelo, Tàpies, Mompó, Oteiza, Chillida, etc.). Se lo recomendamos muy vivamente, aunque no entiendan ni jota de arte abstracto. Allí, Chirino tiene expuestas algunas espirales dedicadas al viento, aunque su obra está repartida por plazas, museos y colecciones privadas de todo el mundo.

Fue a partir de entonces, de esa visita al museo de Cuenca, que este modesto bloguero se hizo fan suyo para siempre. Un tipo que, como dice hoy Juan Cruz, «se hizo contemplando las volutas que el viento hacía en la playa de las Canteras de su infancia, cuando iba a ver cómo su padre arreglaba el esqueleto de los barcos. Hasta el final conservó la ilusión de la forja, y ante el rojo intenso de los hierros adquiría, a edad ya muy avanzada, el alimento de su amor por la vida y por el arte». Pues eso, ¿qué mas decir? EPD, Martín Chirino.

Martín Chirino en 2014 (Fotografía de archivo) / El Viento, 1963 (Museo de Arte Abstracto de Cuenca)


lunes, 11 de marzo de 2019

Jueves, 11 de marzo de 2004

Una canción que sigue emocionando a muchos adolescentes, aún cuando casi todos ellos ignoren de qué trata...


La Oreja de Van Gogh, Jueves (del CD A las cinco en el Astoria)2008


sábado, 2 de marzo de 2019

Recuerdos desde la isla desierta

Hemos sustituído el vermut y las anchoas por champán (francés, naturalmente). Aquí no alcanzan los puñales.

Playa de Cala Bassa (Ibiza)  [Fotografía: CBbC / granuribe50]

viernes, 1 de marzo de 2019

La carta del loro del barrio

Doña Perpetua (Ana) escribía muchas cartas a finales de los años noventa a su sobrino Fernandito, un zagal muy curioso y amante de las historias. El tal Fernandito, que ya es casi un señor, está pasando ahora su año iniciático en Australia.

Su madre, que está haciendo una limpieza radical en su casa, aprovechando que se está reformando la cocina, se ha topado con un sobre donde se guardaban, felizmente, esas cartas, y nos lo ha hecho llegar. Nos han emocionado tanto que, después de llorar a moco tendido, pasamos al blog una de ellas, la del loro del barrio, para compartir con ustedes una brizna de aquellos tiempos que nunca volverán.

La carta del loro. Todo lo que se dice en ella responde a la realidad

Por cierto, Fernando (Fernandito) ha resultado ser un buen lector...