lunes, 31 de agosto de 2020

Sobre el faro de Ajo, Revilla y Okuda

Faro del cabo de Ajo, solo ante el mar y los acantilados de Cantabria
A G.U. le encanta la arquitectura de estos faros, por su sencillez, por la potencia de sus formas, sobre todo cuando son cilíndricas, y por su impacto visual. Tiene varios libros sobre ellos, que guarda con cariño, con fotos, planos, historia, etc.

No le resulta fácil expresarlo en pocas palabras: le sugieren quietud y serenidad, pero también la emoción de pavorosas tempestades batiendo el acantilado y, cuando gira el rayo de luz del faro en la noche, lejanía y añoranza de unas travesías por mar que nunca hizo... En concreto, le encantaba este de Ajo, situado en el cabo del mismo nombre, en Cantabria (antes, provincia de Santander a secas, una parte de "Castilla la Vieja"), un lugar que visitó un par de veces. De momento, no piensa volver por allí hasta que lo repinten de blanco, que es lo suyo.

Faro de Ajo al atardecer
Pero se ve que al señor Revilla, presidente de esa comunidad, no le producía tales sensaciones; le gusta salir en los papeles y, como se preocupa de la economía de su tierra, regala anchoas por doquier y quiere que vaya más turismo. Seguramente por eso, encomendó a un artista plástico santanderino —Okuda— que lo decorara, y éste así lo ha hecho encantado de la vida, porque a nadie le amarga un dulce expresar "el arte que lleva dentro" y ganarse 60.000 monises.

Faro de Ajo, el año pasado; Okuda, "el de las anchoas" y algunos polícos más posan ufanos ante una simulación del proyecto
Como es habitual en estos casos, ya han empezado las peregrinaciones al lugar, que antes era más bien solitario. Y si no fuera porque esos terrenos están catalogados como de  "Zona de Especial Protección para las Aves" (ZEPA), no sería raro que empezaran los trámites para montar por allí una urbanización de lujo, con faro y campo de golf incorporados.

G.U. no va a entrar a comentar la pintura en sí ("sobre gustos y colores no hay nada escrito"), no le merece la pena, pero su impresión es la de que le quita todo el misterio al lugar y destroza la sencillez de formas del faro, usándolo como soporte de un collage de motivos decorativos geométricos que le parecen bastante banales. En fin, un desastre.

 Okuda, "el de las anchoas" y diversos polícos posan ufanos ante el resultado de la actuación sobre el faro de Ajo
Por otra parte, le asombra que ni los Colegios de Arquitectos (está incluido en el catálogo del Patrimonio Arquitectónico y Arqueológico del Ayuntamiento de 2015 con una protección integral) ni la "crítica especializada" de este país hayan dicho ni mu. Se ve que van de "modelnos", porque ese señor Okuda está de moda (y a la moda está, véanse si no sus gafas).




"Como no podía ser de otra manera", hay opiniones para todos los gustos. Pero, como señala un tuitero arquitecto al que G.U. tiene aprecio; «Hay algo por encima de las opiniones. Las opiniones no bastan. Usted tiene la obligación de preservar el patrimonio que le ha sido legado por las generaciones anteriores. El año que viene encárguele que retoque y alegre los bisontes de Altamira. 

Por cierto, ¿cómo se ha producido ese encargo de intervención sobre el faro? ¿Ha habido un concurso con un jurado experto o ha sido el gusto del presidente lo determinante?»

G.U. le contesta: ha sido nombrado digitalmente; o sea, a dedo por parte de Revilla para "beneficiar a su pueblo" trayendo turistas. Vaya en su descargo que dentro de cuatro años se revisará el asunto: si se repinta tal cual o lo vuelven a su estado original. Entre tanto, ya veremos cómo se van desaturando los colorines y pierde agresividad.

Pero, siguiendo el rastro del asunto en twitter, al señor que regala con tanta facilidad anchoas que no son suyas le dicen de todo menos bonito. No reproducimos aquí los improperios que ha recibido, aunque sí un par de cuchufletas gráficas:


sábado, 29 de agosto de 2020

¡Peligro con el comienzo de curso!

"La situación empieza a ser preocupante, pero mucho menos que en marzo"; "se está trabajando para que el regreso a los colegios sea seguro y saludable, y crearemos un paquete de 29 medidas para garantizarlo". Etc.

Y aquí empezamos a tener el paquete: "recomendamos a los padres llevar a sus hijos al colegio en bicicleta"; "apelamos a la responsabilidad de padres y alumnos"; "los alumnos se lavarán las manos cinco veces al día"; "los profesores deberán abrir las ventanas del aula" (G.U. siempre ha visto esas ventanas abiertas por los zagales, porque para ellos siempre hace calor y la calefacción les agobia); "crearemos grupos burbuja de no más de 20 alumnos sin contacto con otros grupos"; "cada centro tendrá un 'Equipo Covid-19'"; "cada día se recordarán las medidas básicas de higiene y prevención"; "en cuanto a la Educación Física, todas las actividades deportivas se realizarán sin público" (?).  Etc.


En fin, nos quejamos de que los políticos no hacen nada más que cobrar a fin de mes, pero casi es peor cuando se ponen "a trabajar", algo que no entraba en los planes de algunos de ellos cuando accedieron al cargo. G.U. comprende la dificultad del empeño (no hubiera sido capaz de hacer de director de un colegio o de jefe de estudios; a lo que más llegó fue a "jefe de seminario" de Dibujo, y pocas veces porque no le gustaba nada. Y no pueden imaginarse ustedes cuánto se alegra de no estar en activo en estos momentos de caos absoluto —lo dejó el 5 de julio de 2011—). Pero nadie les obligaba meterse en esto de la política para medrar, que no todo van a ser chollos y prebendas...

Despedida de G.U. del instituto de Ripollet
Se diría que no tienen ni puñetera idea de cómo funciona actualmente un instituto de Secundaria de la enseñanza pública  —quizá porque no lo han pisado nunca—; porque, si la tienen, ya deben de saber que muchas de esas medidas serán absolutamente papel mojado en cuanto entre el primer zagal por la puerta del colegio el primer día de curso. No solo es el aula con el metrito y medio y todos los alumnos sentaditos ¡sin levantarse durante toda la clase! Está el patio, los lavabos, el follón en los pasillos entre clase y clase, los empujones, las tonterías, las escaleras, la cantina, las clases de educación física, la salida y entrada en tromba en el instituto. Y eso sin contar con el asunto de las mascarillas requeteusadas puestas en el codo (o por sombrero) y el mobbing al empollón que no quiera quitársela. Se va a echar en falta ese sentido de la disciplina que desapareció hace décadas de nuestros institutos y, al parecer, de los padres.

Y cuando vayan cerrando las clases y los colegios uno por uno, ¿irán los padres a trabajar los días de cuarentena o no?: "Estamos trabajando en ello: crearemos un paquete de ayudas para los padres que no puedan ir a trabajar". Pero la culpa será en primer lugar de directores y profesores —que ejercerán de primer cortafuegos, claro— que no han sabido aplicar los protocolos establecidos por las autoridades educativas. Y, al final, el cierre total: "no queríamos, pero..."

Y si no, al tiempo. Ojalá nos equivoquemos.


jueves, 27 de agosto de 2020

Hoy nos ocupamos de la "okupación"

G.U. está bastante preocupado con el asunto de la "okupación". Se ha incrementado exponencialmente en los últimos tiempos con ocasión de la pandemia, en parte porque se ha hecho viral por las redes el bulo (por ahora lo es, más adelante ya veremos) de que el actual Gobierno (vía Podemos, claro) había dado el visto bueno para que los okupas pudiesen empadronarse en la misma vivienda que habían ocupado ilegalmente, para así poder cobrar la renta mínima.

Bien, el caso es que tenemos noticia de que ese fake ha cundido en Ibiza, sin ir más lejos, y nos hemos enterado de una oleada de okupaciones francamente inquietante. Al parecer, si esperas 48 horas para denunciar y que vaya la policía, lo tienes crudo. Una periodista de Telecinco, Susana Ramos, lo ha padecido recientemente, y las está pasando moradas para recuperar lo que es suyo, como se puede ver en el vídeo. Pero hay tropecientos mil casos similares (o peores).


Escribe al respecto Lorenzo Silva, en su sección "El blog del cartero" en XL Semanal:

«Sucede una y otra vez en la historia de los asuntos humanos. Alguien invoca una justa causa para tomar un atajo, este se generaliza y acaba sirviendo para provecho de quien carece de causa justa y perjuicio de quien no causó injusticia alguna. Que nuestra sociedad no tiene garantizado como debiera el derecho a la vivienda, que se ha favorecido una especulación irracional y antisocial con ella, son realidades que no podemos ignorar. Que la solución a ese problema sea facilitar el despojo de aquellos propietarios que no tengan recursos para vigilar y defender su propiedad es un argumento estrafalario que acaba una y otra vez en odioso atropello. La carta de la semana nos ofrece un ejemplo sangrante. Su autora acierta a transmitir en ella la desolación del okupado y avasallado. Tome nota quien corresponda». 

La carta, firmada por Silvia de la Torre Villegas, es la siguiente:

«Mi padre trabajó desde los 14, se casó, formó una familia. Emprendedor y trabajador, le fue bien. Mi madre, con la economía doméstica, y en unos años se compraron una casita en la sierra: pasábamos los fines de semana y las vacaciones. Con los años, y ahorros, la fuimos mejorando. 

Y llegó el maldito enero de 2020: unos jóvenes la vieron ideal para vivir a nuestra costa. Y llegó la primera factura de la luz: 114,29 euros, y recordé mi pijama bajo la almohada, porque mi casa no está abandonada ni es de un banco. Y la segunda factura: 275,26 euros. Y no puedes cortarles la luz: sería coacción (?). Y sientes que la ley no te protege. Y con el coronavirus se suspende la actividad judicial. Tú en casa teletrabajando, y otra factura: 307,01 euros. Y otra, 226,83 euros. Y tu madre, de 84 años, cuánto mejor estaría en la sierra. Y otra factura: 176,84 euros. Y llegará el verano y, por no viajar, te irías allí, pero no. Otra factura, 206,07 euros. 

Y el 25 de junio admiten por fin tu demanda de febrero, y te acuerdas de tu pequeña piscina, de los azulejos traídos de Lisboa, del derecho constitucional a la propiedad privada, del señor de Galapagar. Y te ves en Madrid, a 40 grados porque tu casa de la sierra ‘es’ de ellos, y vuelves a llorar, a no dormir, un día más, un mes más. Y otra factura: 209,56 euros». 

Silvia de la Torre Villegas, Madrid




En esta película, en la que sale la Melanie Grifith pre-Banderas, se ve que la "okupación" está muy protegida en EEUU.


miércoles, 26 de agosto de 2020

Messi no se escapará tan fácilmente

Titular de hoy de El Mundo Today
No se me inquiten ustedes: lo hemos leído en El Mundo Today:

«Nada más enterarse de la intención de Leo Messi de abandonar el Fútbol Club Barcelona, Quim Torra ha ordenado el confinamiento de toda Cataluña para impedir así que el argentino se vaya. En una precipitada y urgente rueda de prensa, el presidente de la Generalitat ha comunicado a la ciudadanía que se cierran las fronteras y que nadie podrá abandonar su domicilio hasta nuevo aviso.  

Torra ha decretado el estado de alarma aprovechando el ofrecimiento que ayer hizo Pedro Sánchez  a las Comunidades Autónomas. "Es cierto que esta posibilidad estaba relacionada con la pandemia, pero entendemos que la marcha de Messi es todavía más grave", ha declarado el presidente de Cataluña con el rostro pálido y con apenas un hilo de voz».

Torra entrega la Creu de Sant Jordi a Lionel Andrés Messi Cuccittini "por su honestidad y amor a Cataluña"
(16 de mayo de 2019)
[Fotografía: David Zorrakino (Europa Press) / granuribe50]
«Cataluña será siempre tu casa. Muchas gracias por todo este tiempo de felicidad y de un fútbol extraordinario. Hemos tenido la suerte de compartir unos años de nuestras vidas con el mejor jugador del mundo. Y un noble deportista. No te olvidaremos nunca. Leo Messi, Creu de Sant Jordi». Así se expresaba Torra en twitter nada más conocer la noticia de la intención de Messi de abandonar el club de sus amores.

Pero, al leer El Mundo Today de esta mañana, se dice que se dispone a cambiar de opinión y proceder como indica el citado medio digital—con cierta dosis de humor, no en vano es un diario satírico, aspecto que Torra ignoraba —. Además, podría proponer al Consell Executiu de del Govern de la Generalitat de Catalunya desposeer a ese futbolista de la Creu de Sant Jordi, que él mismo le entregó en mayo de 2019, en el hipotético caso de que ese sujeto consiguiera eludir el confinamiento, lo cual supondría una evidente falta de honestidad y un grave atentado contra Cataluña y los catalanes.



LA VOZ DEL EXPERTO

Hablemos de fúmbol. Se veía venir. G.U. se alegra por otros motivos, pero no por lo futbolístico, ya que el Barça sin él solo puede ir a mejor, si se ficha bien y el entrenador funciona. Veamos:

1) Messi ha tomado la decisión mejor para él. Estaba hasta el gorro del Barça y le han hecho "luz de gas", tanto los directivos como los nuevos técnicos, sacándose de encima a sus dos grandes amigos del vestuario: Arturo Vidal y, sobre todo, Luis Suárez.
2) Es lo mejor para el Barça (no en lo económico: se les va gratis), ya que empezar un proyecto nuevo que gire en torno a un prejubilado caprichoso no parece ser un buen asunto.
3) Es lo mejor para Ronald Koeman, el nuevo entrenador: tendría que fichar a los jugadores que le gusten a Messi y no al propio Koeman y adaptar todo el sistema para que un Messi en plena decadencia se luzca. Además, tendría que gestionar el año que viene lo de decir "no cuento con Messi! y, por consiguiente, sacárselo de encima, un asunto de mucho peligro.


Sigamos adelante. Koeman, de tonto solo tiene la cara. No sabemos qué tal entrenador es, pero seguro que se trata de un tipo autoritario y no parece que esté dispuesto a obedecer a nadie, y menos a un jugador concreto. Lo que pasa es que difícilmente podía proclamar que no quería a Messi, porque los culés se le echarían encima desde el minuto cero y no duraría en el cargo ni dos telediarios (en este caso dos Telenotícies de TV3). Ha mentido como un bellaco diciendo públicamente que contaba con él, aunque es de suponer que se lo ha comunicado en privado, al menos. Le crecerá la nariz en breve, pero no podía decir otra cosa si quería conservar la cabeza.

Solución: que se vaya Messi de motu propio. ¿Manera? Primero, decir que no cuenta con Vidal y Suárez (grandes amigos de Messi) y sí con Griezmann (gran enemigo de  Messi). Eso, de saque, y luego, seguramente, una batería de las cosas que más desagraden al jefe del gallinero (Messi), como fichar solo jugadores que no le gusten a la estrellita argentina.

Veremos quién paga los 700 millones, si es que se tienen que pagar, cosa que ignoramos, aunque no nos extrañaría que nadie (ni siquiera él, que debe de ser un rata), con lo cual Messi tendría que quedarse, le guste o no. Veamos:

1) El PSG (su presidente maneja pasta) y eso le permitiría al rosarino encontrarse con su buen amigo Neymar.
2) El Manchester City (allí también se maneja pasta y Guardiola estaría encantado de recibirle, no en vano ganó tantos títulos  gracias a Messi, y después... ni una Champions). Es el favorito. Herr Pep necesita ganar una Champions, sí o sí.
3) Un equipo árabe o japonés. Aunque todo llegará, no parece el momento. Él quiere jugar fútbol competitivo y ganar.



POSDATA

Parece ser que algún periodista, como Emilio Pérez de Rozas, tiene la misma opinión del asunto que G.U. ¿Será seguidor de su blog? Entre otras cosas, dice así en su artículo Que lo sepan, se llama Omertá:

[...] «Y, qué curioso. No hace mucho nos preguntábamos hasta dónde llegaba el amor, el cariño, de Messi por el Barça: pues hasta la derrota final, hasta el 2-8 del Bayern, hasta que Ronald Koeman le ha dicho que se acabaron los privilegios, que él jugará donde quiera pero que "los otros diez los escojo yo". Y, encima, ha osado decirle a su amigo del alma ¡por teléfono! (eso sí que ha sido feo, ‘Tintín’), que se busque equipo. Y Leo, allá en su casa de la Cerdanya, donde compartía tertulias con el inteligentísimo Alba y el goleador uruguayo, ha llamado a papá y le ha dicho: "Hable con el abogado y que le envíe un fax a estos boludos. ¡Me voy mañana!". 

 En la primavera del 2018, España goleó (6-1) en un amistoso a la Argentina de Messi y, dos días después, algunos periodistas argentinos escribieron que Leo era "nocivo" para la albiceleste "pues solo quiere que jueguen sus amigos". Una cosa está clara, volviendo a la 'omertá': no se puede presidir un club, dirigir una entidad y gobernar un vestuario teniéndole miedo a un futbolista». [...]

martes, 25 de agosto de 2020

Puigdemont y su vicario visitan Colliure

Como ya sabrán ustedes, gente asaz informada, Torra y Pugdemont se reunieron este sábado pasado en la localidad francesa de Colliure para, entre otros asuntos de alto nivel, visitar la tumba de Antonio Machado.

Puigdemont y Torra ante la tumba de Antonio Machado, en Colliure (22/8/2020) [Fotografía: @QUIMTORRAIPLA]
[¡Pobre Antonio Machado!: no contento con haber muerto lejos del hogar y de que le cubra el polvo de un país vecino, el otro día tuvo que aguantar la visita de esos dos sujetos, que decidieron acercarse por el cementerio de Colliure a presentarle sus respetos. ¿Intentarán apropiárselo también? O, viendo a Torra con una actitud poco respetuosa y un punto displicente, tal vez podría pensarse que fueron a recordarle que era un españolazo de mierda que no tuvo aprecio sino todo lo contrario a los que eran nacionalistas del estilo de ambos dos, y tuvo la poca vergonya de dejarlo escrito.

En fin, no sabemos. En ese extraño conciliábulo en Colliure ante la tumba ¿estarán diseñando tal vez la "confrontación inteligente con Madrit" que piensa emprender esa parejita este otoño, siguiendo los consejos de Pilar Rahola?]



Pedro Sánchez, trabajando en su despacho [Fotografía: Moncloa / @mescojono / granuribe50]
Cambiamos de escenario. Por otra parte, respiramos aliviados: el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que ya ha salvado unas 450.000 vidas, regresó también el sábado de sus merecidas vacaciones en Doñana y ya se encuentra en su despacho del Palacio de la Moncloa para seguir de cerca los preparativos del curso escolar y la agravada situación epidemiológica, ratificada este jueves por el doctor Fernando Simón cuando aseguró que "las cosas no van bien".

Con ese fin, se ha puesto en contacto telemático con los consejeros de Educación y con casi todos los presidentes autónomicos. También con los miembros del "comité de expertos de la pandemia", tal como hizo semanalmente desde marzo, un lugar donde escuchaba y aprendía (según él, porque parece ser que ese comité ni existe ahora ni ha existido nunca).


lunes, 24 de agosto de 2020

Irene Montero nos recibe en "su" Ministerio

[Ana Ruiz HEARST / @mescojono / granuribe50]
Aún estando ocupada como está, cerrando prostíbulos y organizando el grupo de trabajo que se dedicará a luchar contra el calentamiento global "con perspectiva de género", Irene Montero ha tenido el detalle de recibirnos en su despacho del ministerio de Igualdad, que pilota con mano firme, para aclararnos que no solo no está separada de Pablo Iglesias, como se había especulado tras lo de Asturias, sino que éste asume una parte de las tareas de la casa, igual que ella las suyas.

Y además nos ha confesado que sigue tan enamorada de Pablo como el primer día, a pesar de que se le haya vinculado sentimentalmente con Dina Bousselham —la del teléfono— y de que lo llamen #Chepas en las redes. También afirma que les ha dolido mucho la pintada en la carretera ("COLETAS RATA") que les ha obligado a acabar súbitamente sus vacaciones, ya que ellos, siendo de izquierdas, no se merecen para nada que se les suministre el "jarabe democrático".



Empieza la última semana de agosto

Amanecer con nubes cumulonimbus frente al litoral de Barcelona [Alfons Puertas (24/8/2020)]

domingo, 23 de agosto de 2020

Leyendo la autobiografía de Woody Allen

Ahora G.U. está con la autobiografía de Woody Allen, titulada A propósito de nada. Se trata de un libro con un exceso de nombres propios de gente del espectáculo, en especial de aquella con la que colaboró o a la que admira; gente que en general es totalmente desconocida para G.U. De todos se deshace en elogios, que a veces se nos antojan un poquillo desmesurados, salvo de Mia Farrow, claro. Es un libro bastante desordenado y un punto irregular, como su cine, pero interesante. Está muy bien escrito; se va por las ramas muchas veces, pero no pierde nunca el hilo y siempre acaba volviendo; parece él hablando en sus películas. Dedica quizá demasiadas páginas a su relación con Mia Farrow y Soon-Yi (muchos/as lo han leído para ver qué dice), pero se leen bien aunque a uno no le guste gacetear. Sigamos:

Le ha llamado la atención cuando narra cómo se aficionó al cine en su infancia, en aquellas sesiones dobles del barrio de Brooklyn. Es en esas páginas que Woody Allen nos cuenta que era un niño cuando, gracias a su prima Rita, cinco años mayor que él, empezó a ir al cine de forma regular. Ella le llevaba con sus amigos cada sábado al mediodía para ver la función doble en el Midwood, la sala del barrio de Brooklyn donde vivían. ¡Y vaya si le picó el gusanillo! Nos explica así aquellos días:

«Hollywood se me quedó fijado. Bogart, Cagney, Edward G. Robinson, Rita Hayworth... Lo que aprendí fue ese mundo de celuloide. Que era más grande que la vida real, superficial, falsamente glamuroso, pero no me arrepiento ni un fotograma. Cuando me preguntan cuál es el personaje de mis películas que más se parece a mi, solo tenéis que mirar a Cecilia en The Purple Rose of Cairo».



Nosotros, de pequeños también íbamos mucho a los cines del barrio, o más lejanos incluso. El Adriano, el Spring, el Bonanova, el Selecto, el Roxy, el Proyecciones, el Avenida de la Luz o también —en plan un poco más deprimente— el colegio de los jesuitas, donde "echaban", además, cortos de "el Gordo y el Flaco" o de Charlot el domingo por la tarde. Eso sí, el NODO no faltaba nunca y en él siempre caía un trocito de algún partido de fútbol, sobre todo si asistía Franco.

Barcelona, cine Adriano (1955)
Pero quizá lo que más recuerda G.U. son las tardes de jueves o de domingo en sesión continua en el susodicho cine Adriano. Allí no existía ese misterio que rodeaba a otras salas, que estaban más perfumadas y tenían moqueta y luces indirectas en los escalones, con el telón del escenario plegándose y desplegándose varias veces con gran pompa y ceremonia. En efecto, era todo un poco más cutrecillo en el Adriano; pero, aún así, los acomodadores parecían almirantes, con gorra de plato y un vistoso traje marrón con hombreras y solapas azules, botones dorados y otros aditamentos.

Allí vimos muchas veces películas como "20.000 leguas de viaje submarino" (el record está en ocho veces "Sueños de circo"), comedias, del oeste, de aventuras, de guerra y todo lo que nos echaran: películas del 1 ('todos los públicos'), del 2 ('jóvenes'), del 3 ('mayores'), del 3R ('mayores con reparos') o ¡del 4! ('gravemente peligrosa'), según la calificación del S.I.P.E., un boletín que publicaba la iglesia católica, siempre velando por nuestra salud espiritual. Allí nos instalábamos a pasar la tarde y, aunque no era fácil encontrar dónde sentarse, ya se ocupaba de ello una muchacha llamada Julia, enormemente diestra en el lanzamiento de abrigos a distancia desde el pasillo, para reservar cualquier butaca que quedara libre.

Luego, con el tiempo, derribaron el Adriano, la infancia se acabó y no la hemos recuperado. Levantaron en su lugar un anodino bloque de pisos. Con los otros cines fue pasando más o menos lo mismo. Punto y final.



Pero, a diferencia de Woody Allen, todas esas sobredosis de cine que nos pegábamos no derivaron en una vocación como la suya, tan fructífera (ha dirigido más de cincuenta películas). En otro momento del libro, nos describe algunas de las emociones que le provocaba entrar en aquel cine de su barrio, el Midwood. Dice así:


«La música pop de aquella época consistía en Cole Porter, Rodgers y Hart, Irving Berlin, Jerome Kern, George Gershwin, Benny Goodman, Billie Holiday, Artie Shaw, Tommy Dorsey. De modo que allí estaba yo, empapándome de aquella música tan hermosa y de películas. Primero, una función doble por semana; luego, a medida que pasaban los años, iba cada vez más a menudo. Era tan emocionante entrar en el Midwood los sábados por la mañana, con las luces de la sala todavía encendidas, mientras una pequeña multitud compraba golosinas y hacía cola y algún disco popular sonaba en el fondo para evitar que los asistentes se amotinaran hasta que bajaban las luces. I´ll Get By por Harry James.

Nueva York; Teatro Cine Midwood (barrio de Brooklyn, 1941) 

»Los apliques tenían pantallas rojas, las molduras eran de bronce dorado, las moquetas eran rojas. Por fin, se apagaban las luces, se abría el telón y la pantalla plateada se iluminaba con un logotipo que te hacía salivar el corazón, si se me permite mezclar las metáforas, con anticipación pavloviana. Yo las veía todas: cada comedia, cada película de vaqueros, cada historia de amor, cada película de piratas, cada filme de guerra.


Muchas décadas más tarde, mientras paseaba con Dick Cavett por una calle donde en otra época había una majestuosa sala de cine y en ese momento solo un espacio baldío, los dos nos quedamos contemplando aquel solar despojado y recordamos como, en otros tiempos, él y yo nos sentábamos en medio de aquel terreno y nos dejábamos transportar a ciudades extranjeras llenas de intriga, a desiertos rodeados de románticos beduinos, en barcos, en trincheras, a palacios y reservas indias. Pronto construirían allí un eificio de apartamentos, en el mismo sitio donde tiempo atrás habían demolido el Rick´s Café».

jueves, 20 de agosto de 2020

Leyendo un buen libro de cuentos

G.U. sigue un poco enclaustrado y sale poco. Está llevando una vida tranquila, viendo algún partido de fútbol, caminando por el pasillo o haciendo bicicleta estática. Hace labores, cocina, ejercita la "siesta de pijama y orinal", ve alguna película o serie y, sobre todo, se ha aficionado a leer en ese aparatejo llamado Kindle, que no le pesa, no le cansa la vista y no le ocupa espacio en casa. Las páginas fluyen casi sin sentirlo cuando el libro es bueno. Hasta hace unos meses éramos enémigos acerrimos de ese invento, pero las circunstancias nos han hecho cambiar. Lo sentimos por los libreros, pero...

El mismo sitio, las mismas cosas
(Portada)
A lo que vamos. A G.U. no le gusta nada recomendar libros, ya saben ustedes, "cada cual es cada cual" en esto de la lectura, pero cuando pilla alguno que le impacta especialmente no tiene reparo en decirlo aquí. El caso es que acaba de leer un libro de cuentos que le ha gustado mucho, por su originalidad, por su sencillez y por lo bien contadas que están las historias, con una escritura muy limpia y eficaz. Hablamos de El mismo sitio, las mismas cosas, de Tim Gautreaux (Ed. La Huerta Grande, 2018). Ya su novela El paso siguiente en el baile era muy buena, pero estos relatos están todavía mejor, en su modesta opinión.

Como en todo libro de cuentos, siempre hay alguno que flojea un poco ("El cielo en las Vegas"), pero la mayoría son estupendos, y no solo el que da nombre al libro. También "Esperando las noticias de la tarde", "Gente en la carretera vacía", "El fumigador", "Volver", entre otros. Las llanuras y las marismas del delta del Mississipi, las desvencijadas casas de madera sobre pilotes y con porche, las viejas furgonetas pick up y las barcas; los abuelos, la familia, la gente trabajadora y la solidaridad, los explotadores y los explotados, la sequía y la humedad, las maquinarias averiadas que siempre acaban teniendo quien las arregle...

[Pikist / granuribe50]
Pero dejemos explicarlo a José Mª Guelbenzu, un crítico literario al que G.U. tiene en gran estima, porque libro que recomienda él, libro que le agrada. Escribe lo siguiente en "Babelia", de EL PAÍS, en su comentario titulado Oro molido.

«Gautreaux suele comenzar sus relatos con un acontecimiento extraordinario, un golpe de efecto que atrae inmediatamente la atención del lector, a partir del cual va desarrollando con progresiva sencillez una historia sugerente de fondo moral en el terreno de las relaciones humanas, sea en el ámbito familiar o en el laboral y siempre en ese sur donde la gente se conoce y está al tanto de las vidas de sus vecinos. Gente de escasos medios, acostumbrada al esfuerzo y al sacrificio, pero con una conciencia de la hospitalidad o la vecindad muy acentuada, lo que hace que en sus historias la dureza vaya de la mano de lo humanitario.

El mundo de estos relatos es rudo y difícil, y sus personajes tienen ilusiones o metas que no son heroicas, sino más bien dramáticas, teñidas de un delicado sentido del humor que se desliza entre líneas, todo lo cual exhala una medida comprensión por parte del autor. Un autor que además tiene el don de concebir imágenes de expresiva belleza. [...] 

Sus personajes suelen estar contrastados: padres e hijos, abuelos y nietos, luchadores con experiencia y sentido común y gruñones o resentidos reconcomidos por un rencor de clase; los hay incapaces de vivir porque no entienden por qué las cosas no pueden ser como antes y los que poseen un instinto natural de adaptación. Y todos los relatos están impregnados de la atmósfera sureña que se corresponde con esos años sesenta. Por cierto que sus descripciones de toda clase de maquinaria como herramienta de trabajo son tan impresionantes como las mejores descripciones llenas de sensualidad que uno pueda encontrar de los campos y paisajes de Luisiana».


Aquí tenemos las primeras líneas de los dos primeros relatos, en imágenes tomadas del ebook:

Tim Gautreaux, "El mismo sitio, las mismas cosas", comienzo

Tim Gautreaux, "Esperando las noticias de la tarde", comienzo



Y, para cerrar el asunto, una música cajun que ilustraría bien el ambiente de la novela El paso siguiente en el baile.


lunes, 17 de agosto de 2020

Miguel Bosé fue el más listo

El caso es que Miguel Bosé no acudió a la manifestación de los antimascarillistas, negacionistas diversos y terraplanistas, manifestación que él mismo había convocado a través de las redes sociales con voz cavernosa. Como saben ustedes, se celebró ayer en Madrid con permiso de la autoridad competente —el delegado del Gobierno, José Manuel Franco Pardo, un sujeto que ahora está sorprendido de que la gente no llevara puesta la mascarilla reglamentaria—.  Las susodichas redes están que trinan por el plantón y se lo echan en cara sin misericordia alguna, llamándole de todo menos bonito.

Su ausencia es un misterio. Será que es el más listo de la clase y prefirió quedarse en casita reposando su voluminosa panza en una "siesta de pijama y orinal" (CJC dixit) o quizá afinando la voz, por si tiene que recibir a algunos infectados y cantarles "Amante bandido", como sugiere la divulgadora Rocío Vidal en un tuit que se ha hecho viral.




POSDATA 

El señor Bosé se ha dado de baja en Twitter y no se puede ver el enlace, porque ya no existe.

sábado, 15 de agosto de 2020

El Barça tendrá que «reinventarse»

G.U., como Arcadi Espada, se alegra siempre de que pierda el Barça, incluso ante un equipo alemán; es algo un poco vergonzante que solo confiesa en la intimidad, y en ella estamos, puesto que no le visita casi nadie. Espada estuvo más valiente: hace unos veinte años ¡lo dijo en TV3! No lo volvieron a llamar nunca más para ninguna tertulia, naturalmente.

Lionel Messi y Ted Stegen, abatidos, con un hincha; Lisboa; vestuario del Estadio da Luz; 23:03 h / [FCBN / @mescojono / granuribe50]
No, G.U. no estuvo en Lisboa, la imagen es un fake. La verdad es que uno no se acordaba de que se jugara ese partido de Copa de Europa (sale poco de casa), hasta que oyó algunas voces provenientes de la peña barsista de debajo de su piso, poco después de las nueve. Como eran grandes ovaciones y gritos entusiasmados, lo dejó correr por si las moscas. No se oyó nada más, hasta que hacia las once vio desde el balcón que salía tristemente el tipo de la barretina con otros dos sujetos (los demás quizá se fueron antes), uno de los cuales cerraba el local con llave y se despedía de los otros "fins l´any que ve" (—"hasta el año que viene—, un indicio, ya que quedan todavía dos partidos para acabar el torneo).

Fue entonces cuando enchufó la tele y se puso a "visionarlo" en diferido hasta el pitido final. El partido fue "bonito de ver", pero daba hasta pena, pobre Barça. Un edificio que se ha ido agrietando desde que se fueron Xavi e Iniesta, pero el derrumbe lo había pospuesto Messi con sus goles. Ahora tendrán que "reinventarse" —como dicen los amantes del diseño de las palabras— y es el momento para que el independentismo tome definitivamente las riendas (ya las tiene bastante, pero más), con un presidente puigdemonista (se llama Víctor Font) y Xavi de entrenador, todo ello con permiso del susodicho Messi, que es quien pincha y corta el bacalao. En fin, toda una travesía del desierto por delante...



Tot Barcelona le ha enviado a G.U. una fotografía de una fecha histórica que desconocía. Pues sí, la mayor goleada de la Primera División española resulta ser que tiene ya 89 años de edad. Tuvo lugar el 8 de febrero de 1931, un par de meses y ocho días antes de aquella fecha en que "España se acostó monárquica y le levantó republicana".


Y fue un 12-1 lo que le endosó el Athletic de Bilbao nada menos que al Barcelona: "Y no le marqué más porque vi la cara de su portero y me dio pena". Era una frase con la que Agustín Sauto, conocido en el mundo del fútbol como Bata, solía cerrar el recuerdo de aquel partido. Firmó siete de los 12 goles con los que los leones masacraron al Barça.

Como se ve, eso que tanto agrada decir a los barsistas de "hem fet història", obedece a la realidad: la han hecho ayer (8-2) y la hicieron hace 89 años (12-1). Está bien recordar este resultado ahora que faltan dos meses para que el Barça celebre precisamente su 121 aniversario. En fin, no todo van a ser las copas de Europa ganadas (pocas) y las goleadas endosadas al Madrit (también pocas) en eso que suelen recordar años y años como "nits màgiques".


martes, 4 de agosto de 2020

Y, entre tanto, Torra...

Felipe V, Pedro Sánchez y los presidentes autonómicos en el monasterio de San Millán de la Cogolla (Yuso) /  (31/7/2020)
Como es sabido, entre los mayores "logros" del oneroso Estado de las autonomías se cuentan los de fomentar el caciquismo, la "corrupción de proximidad", la insolidaridad interterritorial y el egoísmo. Y cada presidente regional compite con los demás intentando demostrar que él es, en efecto, más insolidario y egoísta que sus "homólogos".  Y es que todos han de vender en su región que han arañado a Madrid el oro y el moro, aunque sea a costa del otro.

Los hay, incluso, que se aseguran de que eso suceda antes de tomar el billete, como el lendakari Urkullu, que chantajeó con no presentarse al evento del otro día en San Milán de la Cogolla (de gran boato y surtido de banderas, "en un marco incomparable", a mayor gloria de Dr. Sánchez) si éste no le aumentaba previamente el techo de déficit por teléfono.

Torra, en una celebración con la colla de castellers de Sabadell / (twitter / granuribe50)
Como han informado los medios de comunicación, Torra no acudió a esa representación. Ha aducido que tenía que ocuparse del coronavirus (¡casi mejor que no lo haga, por Dios!), que no tenía por qué estar en un acto al que acuda Felipe VI ("En Cataluña no reconocemos la monarquía, no tenemos rey") y que él no estaba para hacerse fotografías inútiles (sin contenido). Se ve que sus fotos con la barra del pan pinchada en el paraguas, comiendo butifarra en la Garriga o chupando caracoles en Lérida sí que son útiles y tienen mucho contenido (el pa, la botifarra i els cargols).

Lo que no ha citado MHP Torra entre los motivos de su ausencia al evento es que por esos andurriales (en Suso) nació la lengua castellana; para más inri, en el monasterio donde se celebraba la convención tiene su sede, precisamente, el Centro internacional de Investigación de la Lengua Castellana. ¡Vade retro, Satanás!

Torra tomando un merecido y refrescante baño (twitter / granuribe50)
En cuanto al "qué hay de lo mío", afirma que lo resolverá en encuentros bilaterales al más alto nivel, de Estado a Estado. En fin... Pero reconozcamos que no se perdió gran cosa, aunque los empresarios catalanes se hayan enfadado mucho por su ausencia: un pomposo paripé en el cual el que manda se reúne con los pequeños virreyes para hacerles creer que son muy importantes, pues nunca se sabe cuándo los va a necesitar para conservar la poltrona. Pero, aún así, muchos somos los que creemos que su obligación era acudir al evento, para eso cobra (mucho), pero ese sujeto prefirió darse un refrescante baño; un chapuzón nunca viene mal en plena canícula y se lo merecía después de tanto currar ¡qué puñeta!

domingo, 2 de agosto de 2020

Ojo con las gráficas que elabora RTVE

RTVE ha colado estas gráficas en el telediario de Ana Blanco y en la web, acerca de la brusca caída del PIB en España, no se sabe si queriendo disimular el desplome producido o es que no tienen ni idea de hacer gráficos. En ese último caso, si este es el nivel, G.U. se ofrece a impartir un curset rápido de visualización de datos a los periodistas de RTVE.

Habría de ser, eso sí, con permiso de Iván Redondo, todo un experto en publicidad, propaganda y tejemanejes diversos, además de asesor, mano derecha y organizador de ovaciones espontáneas al Dr. Sánchez. Éste, por su parte, dice que lo peor ya ha pasado y que desde mayo hemos iniciado "una recuperación gradual". Ojalá sea así, Dios le oiga, pero la cosa recuerda un poco a los famosos "brotes verdes" de Zapatero...

En fin, lo sentimos por Ana Blanco, una buena periodista que le cae muy bien a G.U.; parece ser que era ajena a estas torpes manipulaciones de la información y dicen que ya se ha disculpado y corregido el "error" (entre comillas), tras ser pillados los de la cadena pública con el carrito de los helados y comprobar que las redes echaban humo.

Ana Blanco (TVE) y Vicente Vallés (Antena 3) presentan el gráfico de caída del PIB en España entre 2007 y 2020
En la primera imagen, Ana Blanco señala la gráfica elaborada por RTVE acerca de la caída del PIB de España a lo largo de los años, con la bajada del 2008 y la del 2020, de manera que, al cortar el descenso y no poner el eje vertical —de ordenadas— completo con los datos hasta el -20%, pueda parecer al lego en la materia que la caída es similar a la de 2008. Debajo, se aprecia la gráfica correctamente dibujada, tal como lo presentó Vicente Vallés en su telediario de A3.

(Ojo: las proporciones utilizadas en el eje horizontal —de abscisas— son diferentes en ambos casos, de ahí la diferente pronunciación de los picos del dibujo y que la caída quede todavía más disimulada).



Vamos con las siguiente gráfica objeto de polémica, elaborada por RTVE para su web (no sabemos si también para el telediario). A la derecha, el modo correcto de presentar gráficamente esos datos.

A la izquierda, la gráfica comparativa de RTVE; a la derecha, la gráfica correctamente dibujada
Aquí se puede apreciar la gráfica que publicó la web de RTVE, "comparando" la caída del PIB de España de los dos primeros trimestres con la de otros tres países de Europa, con el eje vertical del tanto por ciento de descenso graduado de manera distinta para cada país, con lo que a simple vista puede parecer que la caída del segundo trimestre es muy similar en los cuatro casos. A su lado lado, la gráfica con proporciones reales y el mismo eje vertical de tantos por ciento negativos para los cuatro países, tal como debe hacerse si se quieren comparar los datos y tal como la presentó Vicente Vallés en Antena 3, entre otros.

En fin, puede dar la impresión de que se trata de una minucia, pero la manipulación de la información se produce muchas veces a poquitos, cual lluvia fina que va calando. En una cadena pública no deberían ser admisibles estas cosas pero, por desgracia, se produce todos los días, en ésta y en otras, por ejemplo... TV3, sin ir más lejos, aunque en esta última de manera mucho más grosera.

sábado, 1 de agosto de 2020

«"C´est la vie", dicen los viejos»

Gracias al blog de mi amigo Miquel (Tot Barcelona), que la publica en su entrada No, no hay jazz...hay un tema que me atrapa. Buen sábado, G.U. ha vuelto a ver esa maravillosa escena de la película "Pulp Fiction", con un John Travolta y una Uma Thurman en buena forma, bailando el clásico del rock and roll de Chuk Berry, "You Never Can Tell".


Una canción que luego se reinterpretó en plan country por gente como Emmylou Harris, bajo el título «"C´est la vie" (dicen los viejos)», que es la muletilla con la que acaban todas las estrofas. ¡Cuántos recuerdos del festival de Riaza del año pasado con El Tapir!, en el que esta música sonaba a todas horas, en la versión de "La Rosa Negra Band".

[Valga el vídeo para endulzar un poco un aniversario (el 38º) que a G.U.y hermanos les resulta especialmente amargo]