viernes, 31 de diciembre de 2021

Adiós, Año Viejo, ¡feliz Año Nuevo!

Viñeta de El Roto (30/12/2021)
De vuelta del hospital...¡ya en casa!
Feliz año a todos. Por lo menos... que 2022 sea un poco mejor que este 2021 que acaba.

martes, 14 de diciembre de 2021

Entrañable encuentro entre el Papa y Yolanda

La visita de Yolanda Díaz, vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo, al papa Francisco en el Vaticano ha suscitado cierto debate político. En su programa de La Sexta, la presentadora Nuria Roca se preguntaba el otro día por qué se ha producido el encuentro con una vicepresidenta de gobierno si lo habitual es que estas recepciones tengan lugar entre el sumo pontífice y el jefe de Estado.

Quizá la respuesta más curiosa la ha dado en el plató un sujeto llamado Ramón Espinar: "A lo mejor ha tenido una revelación y sabe que lo va a ser". "Es que no estamos hablando de cualquiera, es que a lo mejor el papa tiene una información privilegiada. Habla con instancias que van mucho más allá de la información que tenemos los periodistas aquí", ha bromeado el político podemita.

Pues... si es así, que se vaya dando por enterado el doctor Sánchez, a ver qué se le ocurre para desacreditarla un poco, no vaya a ser que le birle la poltrona.


Tan grande ha sido la sintonía entre el papa y nuestra sonriente vicepresidenta, que ésta le ha obsequiado con un documento (que lleva su propio autógrafo) acerca de la vida y milagros de la santa luxemburguesa Yolanda Von Vianden, de la que ese dice que es muy devota, aunque ignoramos la veracidad o no de tal rumor; se trata de una monja que falleció en 1283, tras ejercer con mano firme de prioresa del monasterio de Marienthal durante muchos años.

[Composición infográfica: @xCAJALx / granuribe50 (de la imagen de Yolanda Von Vianden]
La emoción ha sido tal que, al final de la audiencia han decidido intercambiar sus vestiduras, en un entrañable gesto que puede inducirnos a predecir que muy pronto Yolanda puede llegar a ejercer de presidenta del gobierno de España.
[Composición infográfica: @MortaSiciliana]


«Yolanda Díaz parecía ante el papa Francisco una niña de escolanía, con esa blusa de gran lazo que era casi un escapulario. Delante de los dioses y de sus ministros es mejor taparse con escayola hasta el cuello, escayola de fresco de bóveda, no importa lo progresista que seas. El lazo le ponía a la vicepresidenta una especie de cornete de monja con cornete. [...] De la mujer empoderada y juramentada contra el patriarcado en fiestas de pijamas y de tocador, lo que quedaba era una especie de azafata del día de la Biblia que hasta decía “Santo Padre” como Paloma Gómez Borrero. Yo creo que esta magia con Díaz sólo puede hacerla Iván Redondo, que es el Juan Tamariz de los golpes de efecto con pelucas, dedales en los bolsillos y air violin».[...]



En efecto, es una señora muy sonriente la tal Yolanda Díaz. Pero para sonrisas... nos quedaremos siempre con esta otra:
Viñeta de JM Nieto (14/12/2021)
[Y con los ojos]

domingo, 12 de diciembre de 2021

Tranquilidad en... el "Laberint d´Horta"

La facultativa cirujana le ha dicho a G.U. que estos días tiene que caminar mucho y comer proteínas por un tubo. Y en esas estamos, no parece una mala pauta. Y para los nervios, una visita al Laberinto de Horta tranquiliza a cualquiera. Olvidarse, pues, de los tranquimacines y otras pócimas. Jardines, plantas, el dulce piar de algunas aves, estanques, cuevas, templetes, desgastadas esculturas, riachuelos con peces, laberintos donde perderse un rato... Mano de santo.
[Fotografías de granuribe50; clic para ampliar un poco]

sábado, 11 de diciembre de 2021

Talibanes sin turbante

Viñeta de El Roto (13/11/2021)



«Me apunto a apedrear la casa de este niño. Que se vayan fuera de Cataluña. No queremos supremacistas castellanos que nos odian»
[Jaume Fàbrega, exprofesor de Enología en la Universitat Autònoma de Barcelona]
«Que impongan el 25 % de castellano porque la familia de un niño lo ha pedido, es una verdadera vergüenza y una irresponsabilidad»
[L'Àvia Maria: "Antifeixista y Working Class"]





Esto dice Jaume Reixach, un tuitero al que sigue G.U. Y otra tuitera a la que también sigue (@bballestin) remacha: "De los barracones, de los recortes brutales en las escuelas públicas, de la financiación descarada en las privadas, del deterioro de la Sanidad pública, de la imposibilidad de acceder a una vivienda digna sin venderse un riñón... De eso nunca interesa hablar".

«Hace falta ser muy miserable (y muy fanático) para presentarse en un pueblo en el que una familia está siendo acosada por reivindicar un derecho constitucional y solidarizarse no con ella, sino con sus verdugos. Eso es lo que ha hecho recientemente el consejero de educación de la Generalitat, Josep González Cambray [...]

El acoso a la familia de Canet de Mar que pedía que su hijo recibiera más clases en castellano en la escuela ha representado, hasta el momento, la evidencia más palmaria de que algo huele a podrido en la Cataluña procesista. El régimen en pleno ha mentido al respecto, acusando a los padres de Canet de querer impedir a su hijo que aprendiera catalán, cuando lo único que pedían era que TAMBIÉN aprendiera castellano.[...]

Aquí se han retratado todos, y el cuadro resultante no resulta muy favorecedor: puede que haya un antes y después en el chulesco inframundo indepe, pues esta vez se han ganado las acusaciones de racismo, xenofobia y matonismo a pulso».
Ramón de España, Miserable no, lo siguiente

viernes, 10 de diciembre de 2021

Un día dedicado a "asuntos médicos"

Que G.U. no está pasando un buen momento empieza a ser "un secreto a voces" (pocas). Debe ser sometido en breve a una "intervención" no demasiado agradable y, hipocondríaco que es uno (de pruebas de ello está suficientemente surtido el blog), la cosa no está como para "lanzar cohetes". Para pensar en otros asuntos, a veces (pocas) escribe y hace cosas para sus "lectores" (pocos). 

Les explica: en concreto, trajina estos días con autorizaciones varias, llamadas telefónicas fallidas, intentos vanos de solucionar ciertas cosas por Internet y todo eso. Ya saben. Y, faltaría más, visitas previas "presenciales" (como se dice ahora) diversas. Por suerte para él, salvo la prueba PCR que tiene que hacerse bastante lejos, todo lo demás le cae muy próximo a su casa. Y, como para estos asuntos no suele llevar la cámara encima, bueno es el móvil para ir retratando lo que ve. "Quien tuvo, retuvo", se dice a sí mismo. El caso es que suele salir poco de casa; con frecuencia es en dirección a algún centro médico. Y lo primero que ha visto de buena mañana es que, entre otras sorpresas, la figura de Puigdemont adorna aún los balcones de gente normal, y eso lo sume en una grandísima perplejidad. Pero... ¿cómo es posible, Dios, que sigamos así?



Sigamos. Esta tarde tocaba una prueba para determinar a qué grupo sanguíneo pertenece G.U. Recuerda que se lo encontraron en la mili y que figuraba en lo que llamaban "la Blanca". Era una especie de carnet del soldadito, de tapas blancas, de ahí su apelativo, en el que figuraban datos de este estilo, bastante interesantes de conocer en caso de conflagración armada, nada descartable en aquella época (1976). Pero ese documento, a pesar de haber movido cielo y tierra y de orar repetidas veces a San Antonio —un especialista en estos asuntos—, no ha aparecido por ninguna parte. 

Ha habido pues que irse, al caer la tarde, al lugar donde permanecerá internado unos días (el edificio de la izquierda), para obtener ese dato de cara a que proporcionen una "reserva de sangre". Por suerte, el lugar le cae cerca, le basta con cruzar la Diagonal. Y, telefonillo en mano, ha tomado esas instantáneas, que mirará con mejores ojos cuando salga.
La Diagonal a esas horas bulle de tráfico, en especial de entrada a la ciudad, con muchos oficinistas que regresan de sus diversas ocupaciones. Hay que decir que esa calle está especialmente atractiva a esas horas, con el sol poniente.
Una vez cruzado el semáforo, empiezan los problemas, porque suelen abundar los tipos resoplantes haciendo footing, los ciclistas, los skaters, los patinadores y... los usuarios de patinete eléctrico, los más peligrosos sin duda, porque circulan muy tiesecitos a toda leche y la mar de silenciosos. Cualquiera de esos tipos te puede llevar al otro barrio en un plis plas. Por fortuna, esta tarde no había casi ninguno de todos estos especímenes citados. Solo nos faltaba eso.
Y por fin, la vista del hospital que será nuestra casa en los próximos días. Un lugar que G.U, conoce bien, porque su madre estuvo internada allí unas trece veces y, por tanto, uno ha estado prácticamente en casi todas las habitaciones del ala este, la más habitual en nuestro caso, las que están iluminadas en la foto y las que no. Casi todas, en fin.
Y todo para acabar sumergiéndonos en las fauces de ese lugar que recordamos como si fuera ahora y al que no habíamos vuelto desde que nuestra madre se nos fue. Los mismos controles, los mismos guardias de seguridad, los mismos colores o su ausencia. Ha sido como meterse en el túnel del tiempo. Pero... ¡suele verse la luz al final del túnel!

[Fotografías: granuribe50 (10/12/2021)]

jueves, 9 de diciembre de 2021

Las fotografías escondidas de Antoni Campañà

La caja roja [xatacafoto.com / granuribe50]
Antoni Campañà no era un fotógrafo de guerra, es la guerra la que fue hacia él; retrataba todo lo que se le ponía por delante siempre que tuviera interés. Luego, al acabar la guerra civil, se dedicó a hacer fotos para postales y de temas futbolísticos. Murió en 1989. Treinta años después, la familia decidió vender su casa en Sant Cugat, lugar al que se había retirado. Uno de sus nietos inspecciona el garaje y descubre, escondidas allí, unas cajas rojas con negativos y muchas ampliaciones, 5.000 fotos de la Guerra Civil española, que Campañà no quiso mostrar en vida; le dolían y no quería líos.

Se trata de un tesoro que está bien conservado, un fondo tan interesante como los de Centelles o Branguli. Fue objeto de una exposición en el MNAC, titulada La guerra infinita, a la que G.U. no pudo acudir por encontrarse lejos de Barcelona, y también de un buen reportaje de RTVE en Imprescindibles, que quizá vieran ustedes en su día. 

Presentamos algunas de ellas (pocas, por cuestión de espacio):
Antoni Campañà; barricadita c/ Diputación, detrás de la Universidad (julio 1936)
Antoni Campañà; barricadas en el Eixample (julio 1936)
Antoni Campañà; plaza de Cataluña, antiguo hotel Colón
Antoni Campañà; campamento en la plaza de Cataluña
Antoni Campañà; plaza de Cataluña, salida hacia el frente (28/(/1936)
Antoni Campañà; 1) Miliciana en Ramblas-calle Hospital 25/7/1936; 2) Un "señorito" rechaza una insignia republicana. Las Ramblas (julio 1936)
Antoni Campañà; Convento de las Salesas. Paseo de Sant Joan, Barcelona, julio de 1936.
Antoni Campañà; 1) Miliciana en el cuartel del Bruch; 2) Esperando un desfile de la FAI (actual plaza Francesc Macià, verano 1936)
Antoni Campañà; dos mujeres, después de un bombardeo de la Barceloneta (1937)
Antoni Campañà; Un soldado de la IV División Navarra, en Cerbère (marzo de 1939)


miércoles, 8 de diciembre de 2021

Celebrando la Inmaculada y el "#OrgulloBarroco"

Vamos a celebrar este día en el blog con un poco de arte del bueno, a cargo de algunos de los pintores más importantes del barroco español, aprovechando que lo conmemoran hoy en Twitter, bajo el hashtag  #OrgulloBarroco, con muchas aportaciones fotográficas espontáneas. Bueno, a Rubens lo podemos considerar también "de casa" y, en cuanto a Goya, nada tiene que ver ya con el barroco pero le pagarían bien por ese trabajo (bastante flojo, en nuestra opinión).

Es un tema que no a todo el mundo agrada. Lo hacemos hoy —porque nos gusta y nos da la gana— con estas pinturas dedicadas a la Inmaculada, muchas de las cuales forman parte de la crónica visual de la infancia de G.U. ¿Por qué? Porque solían figurar (sobre todo las que pintó Murillo), en muchas estampitas de esas que se ponían en aquellos misales que usábamos en los oficios religiosos y que se regalaban a modo de recordatorio del día de la primera comunión. Aclaremos que quien esto escribe estudió en un colegio de curas de los de antes, como saben los seguidores más fieles.

1) Murillo (Museo del Prado); 2) Velázquez (Museo del Prado); 3) Ribera (Agustinas Recoletas, Salamanca); Zurbarán (Museo del Prado)
Para quien no lo sepa —no habrá muchos, porque esto solo lo sigue gente "enterada"— digamos que el dogma de la Inmaculada Concepción es una creencia del catolicismo que sostiene que la Virgen María, madre de Jesús, a diferencia de todos los demás seres humanos, no fue alcanzada por el pecado original sino que desde el primer instante de su concepción estuvo inmaculadamente "limpia de todo pecado". Una suerte.
1) Rubens (Museo del Prado); 2) Valdés Real (Museo del Prado); 3) El Greco (Museo Nacional Thyssen-Bornemisza); 4) Goya (Museo del Prado)
Aquí, en España, fue un motivo iconográfico recurrente a lo largo de los siglos y muy especialmente durante el barroco, en el siglo XVII. Sin duda debía de tratarse de un encargo muy habitual también para los pintores más conocidos, porque todo dios, empezando por los reyes, continuando por los prebostes de la Iglesia —que eran los que cortaban el bacalao— hasta acabar por el último pelafustán con pasta, estaba abducido por este mito, que acabaría siendo declarado dogma de fe por el papa Pío IX mucho después (en 1854). Y "qui paga, mana", como dicen por estos lares, no sin razón.

martes, 7 de diciembre de 2021

El día del "cumple" mirando fotos antiguas

G.U. está nostálgico en el día de su "cumple", mirando y remirando fotos antiguas. Se ha pensado mucho si colgar estas, porque es cierto que le gusta poco (muy poco) fardar, sí, y tampoco apabullar con nuestra "la gran belleza" de entonces. Aquí estamos todos, padres ("Tirano" y "Patiña") y hermanos (Nvts —"Petiteta", Carolo —"El Tapir"— y "G.U."). 

1) En el bar del rompeolas, cuando quien esto escribe no estaba ni en proyecto, con nuestra madre tan ufana con su sombrero cordobés y nuestro padre, feliz con ella y con su hija, tomando el aperitivo; nunca faltaba el sifón en esos menesteres. 2) En la segunda, en nuestros veraneos, primero en Hostalrich y más tarde en Hostalets de Balenyà. 3) Y, ya bastantes años después, una tarde de domingo en el Tibidabo junto al mítico avión (que ahora han pintado de rojo, por desgracia), una foto clásica de la época, con el peinado tipo "beehive" de Nvts, propio de los primeros sesenta... 

Qué pocas fotos nuestras tenemos de aquellos años; por desgracia en ninguna estamos los cinco juntos, y las pocas que conservamos lo hacemos como si fuera oro en paño. En aquel entonces apenas les concedíamos importancia, estaban guardadas en cajones y en cajas de cartón a las que ni siquiera teníamos curiosidad alguna para asomarnos. 

Y qué decir de las historias que nos contaban nuestros padres cuando éramos pequeños. Bostezábamos y nos íbamos a jugar. Ahora G.U. las echa en falta para componer el puzle familiar, tantas cosas que no sabe de ellos...