martes, 10 de mayo de 2016

Tardà y Rufián lo pasan "de puta madre" en Madrit

Rufián y Tardà en Madrit, con su bocata de calamares y su cervecita
Madrid es una ciudad estupenda, sobre todo para los que van por allí de visita (cultural y/o tabernaria). Tiene sus luces y sus sombras (según y cómo es un coñazo), pero el ambiente para los que vienen de Barcelona es bastante oxigenante, ya que lo de por aquí se ha vuelto un pelín provinciano últimamente, en opinión de Gran Uribe. Pues sí, le gusta Madrit, ciudad a la que, a poco que puede (y puede más bien poco), se escapa raudo a tomar aire, arte y perspectiva (y algún 'bocata calamares').

A un servidor le agrada aquello, pero parece ser que también a Tardà y a su discípulo Rufián, que lo están pasando "de puta madre", como se suele decir. Un buen sueldo sin pegar ni sello, buenas tascas, buenas cervecitas (que se lo pregunten a Pablo Iglesias y al pobre Alberto Garzón), buenos bocatas de calamares y... a vivir, que son dos días. Tardà es un histórico y tiene plaza asegurada para el 26J, pero Rufián está luchando a brazo (o puñetazo) partido para seguir de número uno.

Y no es para menos. Aquello es una verdadera bicoca, la verdad sea dicha: si dices cuatro merluzadas en el Congreso, explicas que tus abuelos eran de Jaén, que llegaron con lo puesto a Barcelona y añades, acto seguido, que en tus tardes libres lees a Galeano, a Oscar Wilde, a Borges o alguien así, aquello es un bombazo, porque —entre otras cosas— nadie (la ESO pura y dura) sabe allí quién es esa gente a la que cita Rufián (tampoco él) y se arma un revuelo de mucho cuidado: "¿de qué habla ese tío?". Pero cuando, además, proclamas que Ciudadanos es "El Hacendado" del PP, aquello ya es el despiporre general porque, ahí sí, todos saben que esa es la marca blanca de Mercadona. Y en seguida las redes sociales echan humo y no se habla de otra cosa. En resumen, es un crack ese Gabriel Rufián y tiene que revalidar poltrona; la nueva legislatura en el 'Congreso de las Diputadas y de los Diputados' no merece  otra cosa.

Esperemos que a ese sujeto pueda sumarse en breve Artur El Astut, un alma en pena que, a día de hoy, solo aspira a recalar en esos mares, tripular una barquita en el estanque del Retiro y luego recogerse en la suite del Palace que ocupó hasta hace poco Durán y Lérida. El Congreso se lo merece, sí, pero también El blog del Gran Uribe, hasta el punto de que sería muy capaz de instalar allí su oficina (no en el Palace) para seguir de cerca a su ídolo.


3 comentarios:

  1. ¡Alegre un poco esa cara! ¿Os que para usted no hay bocata, Uribe?

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    1. Pues sí, por la cara que pone Gran Uribe, parece como si Tardà (o Rufián) se hubieran comido su bocata de calamares. ¡Y con las cosas de comer (y del querer) no se juega!
      El Tapir

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  2. Mire que está a la vista. Pues he tenido que mirar varias veces la foto. Buscaba al otro. MJ

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