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| Fotografía de Carlos Rosillo |
La presencia de Rajoy, sea en un aniversario o en un funeral, saca de quicio a Aznar, pues le recuerda que él prefería a Rato. Hay muchas fotos que dan muestra de ese disgusto, pero hemos elegido la obtenida durante las jornadas de celebración del 80º cumpleaños de Vargas Llosa. Observen la violencia con la que el colérico expresidente pasa frente al gallego Rajoy, que baja la mirada no tanto en gesto de sumisión como de paciencia.
Lo cierto es que a Aznar siempre lo pillamos cabreado, cuando no es por fas es por nefas, signifiquen lo que signifiquen una cosa y la otra. Si lo piensas, no le faltan razones: la de haberse aliado con Bush para bombardear a la población civil de Bagdad, lo que provocó un número considerable de mutilados y de muertos, además de desestabilizar Irak y alrededores para los restos. La de haber casado a su hija en El Escorial, con un desfile de invitados que ahora hacen cola frente a las cárceles y los juzgados de media España. La de haberse dejado regalar un caballo blanco por Gadafi. La de haber adquirido en el rancho de Bush un acento absurdo. La de haberse visto obligado a hablar catalán en la intimidad. La de haber llevado durante años el pelo engominado. La de haber regalado a su esposa, vía Gallardón, la alcaldía de Madrid como el que regala un fin de semana en Portugal. La de haber tenido “diferencias de criterio” con Hacienda. La de que sus libros de memorias sean un coñazo...
Le sobran razones para estar a disgusto consigo mismo y con el mundo. Pero cuando se cruza con Rajoy, habiendo preferido a Rato, le llevan los diablos.
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| Momentos estelares del caballerete Aznar: En el Escorial / Con Rato / Caballo de Gadafi / Universidad de Oviedo / Rancho de Bush / En las Azores |
Es cierto, este caballerete, como le llamaba Fidel Castro, siempre está enfadado, enfadado con el mundo en general. ¡Qué tiempos aquellos, en que ponía los pies encima de la mesa de su amigo George, o en que éste le pasaba cariñosamente el brazo por encima del hombro y Él sonreía extasiado o reía a mandíbula batiente! ¡Pues que le dén mucho por el saco, que caralho!
ResponderEliminarEl Tapir
Ese rancio ridículo ramplón que destaca en las fotos como la figura del que se pone en evidencia continuamente. Personaje que se rodea o que rodea a chulitos indeseables entre los que destaca por su memez extrema. Políglota donde los haya, que hablaba catalán en la intimidad, español con acento tejano y el resto (inglés) chapurreado. Presidente de un gobierno al que llegó inexplicablemente. Suscribo la última frase del Tapir. MJ
ResponderEliminarLa galería de fotos se las trae, pobre tipo. El país le resulta ahora francamente incómodo, con tantísimo testigo de su pasado esplendor, hoy muy declinante, muerto o entre rejas. Esa carcajada horrible, junto a Bush, me ha producido un impacto tremendo. Me gustaría ver el álbum completo de la boda de la niña con Agag, sospecho que otro pájaro de cuenta.
ResponderEliminarnvts
Efectivamente, la galería de fotos se las trae. Y, en caso de que quisiera volver al poder (y creo sinceramente que le gustaría mucho), su publicación sería un elemento disuasorio de primer orden, capaz de arruinar cualquier campaña electoral. Bastaría con que los presuntos electores abrieran esta página de Gran Uribe para echar por tierra todo atisbo de ilusión (si es que todavía queda alguien capaz de ilusionarse con semejante baranda). ¡Es la Historia!
EliminarEl Tapir
¿A que impresiona verlas todas juntas? Hay otras más muy notables, toda una fototeca (vestido de Cid Campeador, por ejemplo), pero no era cuestión de cansar al personal. Quizá haya una segunda entrega, cuando ese sujeto vuelva a aparecer por allí (no tardará).
EliminarUna galería de fotos para no olvidar, y no olvidamos. Un personaje que me levanta el estomago, sin más. Yo, como MJ, también suscribo la última frase del Tapir
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