domingo, 15 de febrero de 2015

Un partido sin rumbo y dividido

Y ya que hablamos de Sánchez y Gómez vamos a continuar con ese tema. La cosa no es baladí porque va a haber en los próximos meses elecciones a punta pala y como esa gente no espabile se puede producir un vuelco de padre y muy señor mío, nadie sabe si para bien o para mal.
Santos Juliá, que parece ser que vuelve a frecuentar las páginas de EL PAÍS, publica hoy un artículo en el que disecciona con su habitual lucidez los antecedentes del momento en que se encuentra el PSOE. Seleccionamos tres párrafos en los que se refiere a la desdichada etapa del vilipendiado Zapatero, pero el resto del artículo es también revelador.

Santos Juliá[...]«Militantes y electores habían quedado hartos de luchas intestinas y era preciso marcar un nuevo comienzo, esa tentación adánica que impide alimentar sólidas tradiciones ante la expectativa de amaneceres que cantan. Zapatero lo intentó desde su irrupción en escena y lo confirmó cuando, por un nuevo azar y sin necesidad de convocar elecciones primarias, el gobierno vino a sus manos. ¿Para continuar una política socialdemócrata? Quia; él poseía dotes de fundador y de la misma manera que puso fin a la lucha de facciones saltando por encima de ellas, pretendía superar los referentes socialdemócratas de los finiquitados treinta años gloriosos, inaugurando un republicanismo de ciudadanos que convertiría al PSOE en "vanguardia de la modernidad".

Zapatero con "los de la ceja"Desde una estricta paridad de género en el gobierno, pasando por la mujer embarazada revisando tropas en formación y el matrimonio entre homosexuales, hasta las conversaciones para alcanzar la paz con la organización terrorista ETA o enviar "Nación" al magma de los conceptos discutibles, de las palabras sin peso, todo era y tenía que sonar a nuevo, todo era inaugural. España, sociedad moderna, pletórica de juventud y energía, era también plural y, para colmo, rica, más que Italia, como Francia, a punto de superar a Alemania. ¿La prueba? En España, además de nuevos estatutos, de cheques bebé y de deducción de 400 euros en el IRPF, se edificaban cada año tantas viviendas como en esos tres países juntos.

Se pincha la burbujaY así cabalgamos durante varios años sobre la burbuja inmobiliaria.[...] Él tampoco hizo nada y la burbuja no se disolvió, estalló, como suele ocurrir con las burbujas cuando se sopla con fuerza para que sigan hinchándose. Y con el estallido desapareció la modernidad y se esfumó el republicanismo.
 Zapatero enmudeció: su discurso ante el Congreso mostró, para desconcierto de sus seguidores
—entre ellos un buen número de escritores y artistas que le habían bailado las aguas en plataformas y demás jolgorios teatrales— y desesperación de sus leales, que el fundador del nuevo socialismo se había convertido en mero transmisor de la política dictada desde Bruselas. Otra vez el PSOE sin rumbo, pero ahora, más que dividido, fragmentado, roto en pedazos».

3 comentarios:

  1. A mí lo que de verdad me acongoja es que vuelva a ganar el PP allí y ERC aquí. Creo que los últimos pasos desacertados del PSOE y de otros partidos de izquierda, les van a conducir directamente, como dice Manuel Vicent, al desolladero.

    ResponderEliminar
  2. Y Junqueras, sin despeinarse, a verlas venir... Vaya panorama!

    ResponderEliminar
  3. A mí tambiém me acongoja el panorama... Votar se va a convertir en una verdadera tortura, aquí y allí.

    ResponderEliminar