El clan de los Romanones

Tres sacerdotes y un seglar, profesor de religión, fueron detenidos este lunes en Granada por orden del juez que investiga los supuestos abusos sexuales a menores. Los detenidos, miembros del clan conocido como "Los Romanones", permanecen incomunicados por orden judicial. También está investigando el juez la procedencia de 19 inmuebles propiedad del grupo.

En efecto, el juez que instruye el caso de los cuatro curas de Granada sospechosos de pederastia ha abierto una segunda línea de investigación para determinar la procedencia de los 19 inmuebles, chalés, pisos y locales que atesoran miembros del clan (formado por 10 sacerdotes y dos seglares) en Granada y su entorno. Algunos de estos inmuebles fueron utilizados para los abusos sexuales a los que supuestamente fue sometido, entre otros menores, el joven que, antes del pasado verano, escribió una carta de denuncia al papa Francisco. En ella le describía la tormentosa adolescencia, plagada de abusos sexuales, que vivió tras ser captado como monaguillo por este grupo de curitas.

El padre Román Martínez celebra su última misa antes de ser detenido

Uno de los chalets donde se cometían los abusos sexuales

Según fuentes de la investigación, gran parte de esos inmuebles proceden de una herencia que recibió un miembro destacado del clan. La herencia procedía de una farmacéutica de Órgiva (Granada) que le donó todas sus propiedades, tasadas en unos tres millones de euros. Ese cabecilla y otros miembros del clan, conocido en Granada como "Los Romanones" en alusión al nombre del líder —Román Martínez—, convencieron a la donante para que le legase todas sus pertenencias. Fue el propio denunciante quien alertó de la existencia de la amplia red de pisos de la que disponía este grupo de curitas para cometer supuestamente los abusos y las orgías que se organizaban allí periódicamente, amparados en el argumento de que “el amor es libre y eleva el espíritu”.

Lágrimas de cocodrilo: el arzobispo de Granada pide perdón  por los "escándalos"

Las detenciones de los que podrían ser los principales implicados en este caso de supuestos abusos a menores por parte de sacerdotes se produjeron un día después de que el arzobispo de Granada, Francisco Javier Martínez, se postrara ante el altar mayor de la Catedral para pedir perdón por los “escándalos” ante los fieles en la eucaristía del domingo. Se trata del mismo sujeto que se hizo el sueco, no informó a nadie de esos casos y sigue intentando camuflar un poco el asunto. Hasta el propio papa Francisco le ha tenido que estirar de las orejas para que haga algo. "La verdad es la verdad y no debemos esconderla", ha dicho. La respuesta es que en Granada ya se están montando actos de apoyo a la figura del arzobispo.
¡Qué país!

Esto es lo que hay, hermanos. Pocas bromas. Tal como lo ha leído os lo cuenta Gran Uribe. Ahora un pequeño video resumen:

Se resume bien el asunto en el siguiente artículo: Las claves del escándalo de "los Romanones"