Por lo demás, una ceremonia sencilla —en la que uno no conocía ya a casi nadie— y sin espontáneos haciendo retóricos parlamentos, ni tocando en un pianito alguna melodía de las que se supone que gustaban a la interfecta. Un buen detalle.
Desde el umbral de un sueño me llamaron...
Era la buena voz, la voz querida.
—Dime: ¿vendrás conmigo a ver el alma?....
Llegó a mi corazón una caricia.
—Contigo siempre....Y avancé en mi sueño
por una larga, escueta galería,
sintiendo el roce de la veste pura
y el palpitar suave de la mano amiga.
Antonio Machado
(Soledades, galerías y otros poemas, 1907)
A las seis menos veinte, en Sitges (2/3/2016) / [granuribe50.blogspot.com.es] |
Luego, con la hermana de Gran Uribe, un paseo por el entorno de ese hermosísimo lugar (la iglesia, el Palau Maricel, el Cau Ferrat,...), para acabar en un bar tomando una cervecita y mirando fotos antiguas; qué poco valor les dábamos entonces y de qué manera las apreciamos ahora. Algo habrá que hacer con ellas...
"A las seis menos veinte, en Sitges", hermosas fotos para acompañar al texto sencillo y conmovedor. Además, los versos de Machado.
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