domingo, 17 de diciembre de 2017

Se acercan entrañables jornadas

Dice Javier Cercas, tipo leído y escribido, en  ¿Quién teme el voto del miedo?; no le falta razón (en opinión de  G.U.):

Javier Cercas
[...] «Si los independentistas catalanes no hubieran ganado las últimas elecciones catalanas, Cataluña no estaría partida por la mitad y los catalanes no hubiéramos sido colocados, gracias a la complicidad activa de Ada Colau y Pablo Iglesias, al borde del enfrentamiento civil y la ruina económica. Y debería dar que pensar el hecho de que, en todos los ejemplos que acabo de poner [III Reich, Trump, Brexit, etc.], el llamado voto del miedo fue derrotado por llamados proyectos ilusionantes que provocaron fervores colectivos extraordinarios.

Claro que estos programas tan ilusionantes se amasaron con grandes mentiras, pero nada provoca mayores entusiasmos colectivos que la mentira, ni catástrofes mayores. La verdad, en cambio, suele ser aburrida, igual que la razón, pero los resultados que provoca en política son casi siempre mucho mejores. ¿Hay algo más razonable y aburrido que la socialdemocracia?[...]


Eso no da miedo, pero sí lo dan Trump, y el Brexit, y los independentistas catalanes y sus maquiavélicos compañeros de viaje. Y el problema no es que la gente les tenga miedo, sino que, llevada por el entusiasmo y el fervor y los proyectos ilusionantes —no por la verdad y la razón—, les pierda el miedo y acabe votándoles. Ha ocurrido muchas veces, y sin duda volverá a ocurrir. En nuestras manos está que el próximo jueves no ocurra de nuevo en Cataluña».

Viñeta de Peridis (17/12/2017)
Y Manuel Vicent (otro tipo 'leído y escribido', no abundan), al hilo de lo que se comentaba ayer en este blog sobre las controversias que nos esperan en estas entrañables fiestas, dice lo siguiente en su columna titulada Cafarnaún:

[...] «Si ambos bandos divididos en dos mitades nunca podrán vencer ni convencer al contrario, tratándose de catalanes, sería lo más sensato ponerse a la tarea de convivir en paz, puesto que a esa ardua labor están condenados por el azar y la necesidad. Lejos de las pasiones políticas hoy envenenadas, gane quien gane estas elecciones, habrá que bajar al barro de la vida cotidiana, y en este sentido, la inminente Navidad se presenta como una prueba y una amenaza. 

Unos y otros tendrán que desearse bon Nadal sin que suene a escarnio, y el 26 de diciembre, fiesta de San Esteve, en la que las familias catalanas, con tíos, sobrinos, primos y cuñados, se amontonan en casa durante toda la jornada, habrá que decidir quién hace los canelones. He aquí el reto: bailar juntos la sardana, cantar juntos en el mismo orfeón, ir en pandilla juntos a buscar setas al Canigó. Creíamos que los catalanes eran moderados, prácticos y ecuánimes. Nada. Para lo que hoy sucede en Cataluña, Josep Pla tenía una expresión: esto es realmente un cafarnaún».

5 comentarios:

  1. Que harto estoy de leeer y escuchar la palabra feixiste ¡¡¡
    Ayer otra vez al tal Rufián contra Borrell.

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  2. Creo yo también que estos proyectos tan "ilusionantes" tienen "truco" y nos han llevado al desastre más absoluto. Estoy deseando no "ilusionarme" tanto y aburrirme con la política para ocuparme de otras cosas seguramente más enriquecedoras para mí.
    nvts

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    1. Yo también estoy harto de Rufián, de la palabra "feixista" y de los proyectos ilusionantes, en los que nadie habla ni de pensiones, ni de sanidad, ni de lo mal que está la educación (y va a peor, pero lo único que interesa ahora es formar jóvenes independentistas, para redondear esos números que no acaban de cuadrar, digan lo que digan). Por no hablar de la cultura, cada vez más ensimismada, servil, banal y provinciana.

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    2. Sí. Yo también G.U. Suscribo todo lo que dice. Es que lo que a mí me interesa es todo lo que usted menciona y que no figura en esos proyectos ilusionantes. MJ

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    3. Sin embargo, parece que los autores de los "proyectos ilusionantes" no han aprendido ninguna lección y siguen con el mismo discurso "ilusionante" que nos ha llevado a todos al desastre más absoluto. ¡Dios nos coja confesados! Ah, y felices navidades a todos.
      El Tapir

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