Iglesia de Es Cubells (Ibiza) / (25/12/2016) [granuribe50.blogspot.com.es] |
El día era jubiloso, no hacía viento y el sol lucía como suele hacerlo aquí después de lluvias como las de la semana pasada. La iglesia, bien (aunque G.U. no entró en ella), el entorno, peor (los inspirados 'arquitectillos' puestos a diseñar plazas ¡peligro!) y el campanario... arrojando su sombra justo a los pies de donde Gran Uribe estaba tomando fuerzas "con su cervecita y unas aceitunitas" (¡con permiso de Javier Marías!) de cara a la comida familiar que le esperaba; de manera que uno no tuvo que levantarse para tomar testimonio gráfico de ese momento.
De la comida, poco que decir aquí (ya que pertenece a la esfera privada), aunque... ¡no inquietarse!, hubo relativa paz y estuvo dentro de los cánones y protocolos propios del género, por suerte amenizados esta vez por la presencia de un nuevo elemento en la familia: G.U. es desde hace tres meses tío abuelo ('político)' de Olivia, y es ella la que centró todas las atenciones. Y aquí me quedo, como diría Graciano Palomo.
Pues felicidades por Olivia ¡
ResponderEliminarsalut
Se nota que el tiempo ahí acompaña. La plaza, según dice usted, puede que no sea muy bonita, pero en esa estupenda foto queda totalmente eclipsada por la sombra del campanario.
ResponderEliminarEs curioso, G.U., que un sitio que usted frecuenta tanto como Ibiza, sea el escenario de las peores vacaciones que he hecho desde que estoy casado (veintidós años). Las fechas fueron en septiembre, por lo que tampoco pensé yo que iba a estar al pilpil, pero la cantidad de tontería que vi por metro cuadrado no la he vuelto a ver nunca (no frecuento mítines políticos, obviamente). Supongo que estar fuera de temporada da otra visión, pero lamentablemente no le voy a dar una segunda oportunidad, pues los otros veintiún años hemos hecho buenísimas vacaciones, tanto de simple descanso como de interés cultural (si me permite la pedantería). Lo que sí me encantó fue poder estar en el puerto viendo las operaciones de los barcos en pleno paseo, pues mi mujer se hubiera negado a ir a un paisaje más industrial.
ResponderEliminarMateo M.
Tontería³ por metro²:
EliminarEso es lo que encontraría por aquí si volviera de vacaciones en temporada alta.
G.U. lo hace por motivos familiares, si no... de qué.
En cuanto a esta época, hace mucho sol y el paisaje está precioso, pero parece como si uno hubiera aterrizado en un planeta desconocido en una película de ciencia ficción. No te puedes tomar una cervecita en ninguna parte: todo está cerrado a cal y canto, con una imagen que evoca a la de un lugar abandonado a causa de una una emergencia nuclear.
Y por la noche, el relente y la humedad extrema disuaden de emprender cualquier aventura.
Pero el paisaje es hermoso, el costero y el de interior, aunque a usted le costaría ahora ver las operaciones portuarias, ya que la tierra y los pantalanes pronto llegarán a la vecina isla de Mallorca. Las únicas operaciones marítimas que verá serán las del yate de algún jeque y de los cruceros modelo torre Trump acostada. Barcos de pesca, ni están ni se los espera, aunque los hubo (antes de que toda la isla se dedicara a los guiris).
Bueno, al menos tuvo usted la fiesta en paz, gran Uribe, que ya es mucho, y el paisaje, claro, que también ayuda. Los cruceros modelo torre Trump deben de ser horrorosos. Como para espantar a cualquiera, vaya.
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