jueves, 5 de noviembre de 2015

La República Bananera de Catalunya

Hoja de ruta hacia la República Bananera

Propuesta de bandera para la "República bananera de Catalunya"
[Diseño: granuribe50.blogspot.com.es]
Mireia Esteva, según afirma, no quiere menospreciar en su artículo a ningún país cuyo principal producto de exportación sean los plátanos, ni tampoco al sistema de gobierno republicano, del que es muy partidaria (como buena vocal de Federalistes d´Esquerres que es). Sin embargo, cuando escuchó a la señora Forcadell acabar su discurso como recién elegida Presidenta del Parlamento de Cataluña, gritando “Viva la República Catalana”, no tuvo más remedio que asociarla a una república bananera, en el sentido simbólico más negativo del término. Nos lo explica en su artículo, pormenorizado y contundente como todos los suyos.

La tieta Forcadell proclama ¡Viva la República catalana![...] «Declarar que vamos hacia una República Catalana, desde un parlamento elegido en unas elecciones autonómicas, donde más de la mitad de los votantes están representados por partidos que no desean separarse de España, al menos sin mediar referéndum o un intento de negociación para buscar un nuevo modelo organizativo de estado, es fraudulento. Este intento de secuestrar el Parlamento, elegido por los ciudadanos para fines relacionados con sus propias competencias, no sólo es nulo de pleno derecho en aplicación de las leyes de un estado democrático, si no también nulo e injustificable desde una óptica de legitimación ética. Si en esto se asientan las bases en las que hay que fundamentar la construcción de esta hipotética “República Catalana” tenemos la situación idónea para montar una república bananera.
El servilismo hacia intereses alejados de los ciudadanos, mediante sobornos, no parece muy alejado de lo que hemos vivido durante los gobiernos de Convergencia en los últimos treinta años, como todas las evidencias de momento nos indican: sobornos mediante porcentajes en obra pública, capitalismo de amiguetes con la privatización del agua, la sanidad y la educación, apertura de embajadas a la par que se utiliza la valija diplomática para movimientos hacia paraísos fiscales de dinero obtenido ilícitamente por políticos y empresarios y saqueo de instituciones tradicionalmente emblemáticas para Cataluña, como el Palau de la Música. Ya solo nos faltaba blanquear dinero con la compra masiva de diamantes. ¿Están relacionados con los diamantes ensangrentados de Botsuana?

Si, como parece, en todo esto hay mucha verdad, estaríamos hablando de una administración pública que se organiza para la consecución de objetivos fraudulentos, ajenos a su misma naturaleza. ¿Eso quieren? ¿Una república liderada por el partido que ha liderado, potenciado y establecido esta red clientelar y que ni siquiera ha sido capaz de reconocerlo? Da lo mismo que Mas sea presidente o no, porque cualquiera de los que lo están tapando, seguirían haciéndolo en el seno de una República bananera.

La primera premisa para una regeneración democrática es el reconocimiento, cosa que todavía no hemos visto. Las explicaciones siempre se dan en tono chulesco y prepotente, y nunca desde planteamientos de autocrítica y arrepentimiento. Tampoco a los amigos y compañeros de viaje parece importarles excesivamente la corrupción que ha impregnado las actuaciones de CDC y lo único que oímos es un refuerzo de las tesis victimistas de “pelotas fuera”. Y que si la policía nos encausa, significa que el “prusés” va bien. ¡Bien por la República!


Mireia Esteva
No esperemos, con estas condiciones ninguna regeneración democrática por parte de los interesados en el botín. Una vez la posible desconexión se hubiera realizado, la red de corruptos y amiguetes y el servilismo de la administración sería muy difícil de romper. ¿Quién controlaría a quien solo considera válida su propia ley? ¿Quién controlaría a quien se cree portador de la verdad y menosprecia a quienes no piensan igual? ¿Quién controlaría a quien menosprecia a más del 50% de los ciudadanos? ¿Quién controlaría una república bananera fuera de los organismos internacionales? ¿Quién controlaría a las mafias y pandilleros de guante blanco, que con tanta maestría han utilizado los mecanismos psicológicos, la crisis económica, el clientelismo para ponerlo los bienes públicos al servicio de intereses personales y de partido y para el enriquecimiento de familias enteras?» [...]



3 comentarios:

  1. ¡Bien por Mireia! Me ha encantado su artículo, en especial el párrafo de los interrogantes. Las intenciones de esta gente han quedado bien manifiestas; basta con mirar a quién han escogido como presidenta del Parlamento: una persona ecuánime, templada, equilibrada, discreta, que atiende por igual a todos, sea cual sea su ideología... A partir de su ¡Viva la República catalana! del primer día, te puedes esperar cualquier cosa. Señores(as) de Junts pel si y de la CUP, que la disfrutéis.
    El Tapir

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    1. El nou país promete... Esperemos, al menos, poder tomar helado de postre cada día o, al menos, que no nos dé una úlcera a las primeras de cambio. Yo ya estoy empezando a notar síntomas inquietantes.

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  2. Un artículo genial. Es que, como dice Mireia Esteva, están llevando a cabo algo con lo que más de la mitad de los electores no está de acuerdo y siguen a pesar de lo fraudulento, antidemocrático e injustificable que resulta el proceso. Sin voluntad de ninguna clase de negociación, ni acuerdo, ni concesión hacia otra cosa que no tenga como fin la proclamación inmediata de la "República Catalana" con Mas al frente. Demencial. Puro fanatismo. Cada vez con menos simpatías en todas partes. Con menos apoyos dentro y fuera. MJ

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