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Vigas de la terraza de la cafetería del Parador de Albacete (julio 2017) / [clic para ampliar] |
Al caer la tarde, después de leer un buen rato en la habitación (Gran Uribe ha comenzado un buen libro de suspense titulado "El psicoanalista"), llega el momento mágico del
gin tonic de media tarde (Millás
dixit) en la terraza del parador de Albacete. Mientras el sol declina sobre los campos de trigo ya cosechados, G.U. tiene sobre sí el espectáculo diario de un nido de inquietas golondrinas instalado en las vigas, reaparecido milagrosamente después de que el año pasado algún desalmado camarero se lo quitara de en medio. Eso no se debe hacer nunca...
Esta es la modesta crónica del atardecer de un caluroso día de julio en Albacete, cuando el sol roza el horizonte hasta escabullirse en él. Ese es el momento en que se produce el relevo de sonidos. Desaparece poco a poco el piar de los pájaros y el canto de las cigarras para dar paso al rumor de una suave brisa con olor a heno, al canto de los grillos y de alguna que otra ave nocturna. Las ardillas, que brincaban tan contentas a esa hora, se fueron de aquí el año en que cerró el Parador durante varios meses y dejaron de tener agua y alimento. No han vuelto y G.U. aún las echa en falta.
Vaya por delante que Calpe es un pueblo que gusta mucho a Gran Uribe, quizá porque siempre lo conoció ya destrozado. Cuando uno vivió cómo era antes el lugar y asistió al proceso de deterioro duele más el resultado actual, como es lógico. Pero el caso es que el contraste del bucólico ambiente del crepúsculo albaceteño con el chirriante bullicio del dominguero mediodía de Calpe fue un descenso demasiado brusco a la realidad más primaria.
Claro que, para realidad—o ficción— primaria, aquí nos hemos reencontrado con...¡el procés!
En todo su apogeo.
ResponderEliminarLa foto del sol es impresionante.
ResponderEliminar¡Qué bien descrito el atardecer manchego...! Envidia me das, GU. Mientras esos maravillosos ocasos se suceden por las Españas, aquí seguimos inmersos en un surrealismo rampante. Para qué comentarlo, lo conoces perfectamente. La diferencia respecto a hace unos meses es que ahora empiezo a sentir verdadero miedo. No digo más
ResponderEliminarnvts
Ya lo anunciaba CocoMocho: "Damos miedo y mucho más que daremos".
EliminarVamos a necesitar ayuda psicológica urgente (los talibanes también).
Un atardecer albaceteño en imágenes preciosas.
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