sábado, 17 de marzo de 2018

Los pensionistas de marzo de 2018

Un momento de la manifestación de pensionistas en Barcelona / Plaza de Cataluña (17/3/2018)
La manifestación de Barcelona ha sido menos masiva de lo que cabía esperar, pero es que aquí hay muchos/as (entre los que no se incluye Gran Uribe) a los que les han vendido que con La Republiqueta catalana cobrarán más.

Pero el caso es que, séase como fuere, medio siglo después (en 2018) han llegado a la edad de jubilación los jóvenes del 68, y ya no son los pensionistas de generaciones anteriores, a quienes la clase política lidiaba sabiendo que no se rebelarían. Las pensiones siguen siendo una birria y no mejoran, pero esta gente de ahora no claudicará así como así, ojo al dato. Los tiempos han cambiado mucho y estamos hablando de un segmento electoral cada vez más voluminoso al que algo habrá que ofrecer...

Unai Sordo es el actual mandamás en CCOO, una central sindical a la que ya nos referimos hace poco aquí, en relación con las novedades que quieren aplicar para "feminizar la enseñanza", ideas que El Tapir rechazó de plano, no sin fundamento. Esa central, como otras, suele intentar subirse a la chepa de las protestas cuando ya están en marcha, pocas veces antes. Esta de hoy no ha sido una excepción.


Viñeta de Peridis (15/3/2018)
Viene al caso porque ese sujeto —Unai Sordo—ha tenido una brillante idea, que no será fácil de instrumentar: solicita ¡un acuerdo para subir pensiones y salarios! Visto el panorama del pleno del Congreso no será tarea fácil. Mucho populismo, muchos lugares comunes y pocas ideas para que se vuelva a llenar la hucha. Da la impresión de que en esa torre de Babel poco se acordará que tenga cara y ojos. 

Rajoy, a lo suyo: todo depende de que siga aumentando el empleo (!) y de que se aprueben sus presupuestos. 

Aunque, con salarios como el que ofertaba el INEM de Ibiza, de 100 euros brutos al mes (nos alertaba Tot Barcelona), por trabajar de vigilante en el puerto seis horas a la semana, la mitad de ellas de las tres a las cuatro de la madrugada y las otras, de seis a siete de la mañana, poca hucha haremos.


Tuit de Javier Pérez Andújar (15/3/2018) incorporando la viñeta de Francisco Ibáñez
A la larga, la única solución viable para el sistema parece ser la de conseguir ligar lo más posible la edad de jubilación con la del óbito, o que se aproxime mucho a ella: por ejemplo, fijarla a los 90 años, como sugería el gran Francisco Ibáñez en su viñeta (celebrábamos anteayer su 82 "cumple").

Es cierto que con los abuelos currando se crearían menos empleos, pero no es menos cierto que habría que conceder muy pocas pensiones, solo al alcance de "los más fuertes, los más preparados", como decía Rodríguez de la Fuente, o de aquellos que siguieron con absoluto rigor la dieta mediterránea. Un sistema sostenible, al fin y a la postre.

5 comentarios:

  1. Creo que el problema es que la cuestión va de personalismos y no de programa de partido.
    Me explico: No hay en ningún partido político un programa concreto para ponerse de acuerdo con los demás partidos para un Pacto (estilo Toledo). Solo hay especulaciones de sus directivos políticos en sus discursos, y lo que es peor, No dicen nada de lo que pretenden hacer (simplemente porque no saben como hacerlo), sino que se dedican a tirar piedras contra lo que proponen (que es lo mínimo) los demás.
    Falta hechura política. Se carece de vistas al futuro, se adolece de cortoplacismo.
    Se gobierna para unos (los que se creen que les votan), mientras que no se hace para todos.
    Se juega con los sentimientos; se propaga el miedo; se prometen imposibles; se calumnia lo indecible.
    No sobran gobiernos, ya los tenemos (17 más dos comunidades, más el central, mas la casa real), lo que si sobran son las jubilaciones políticas, sus prebendas, sus visas y sus coches y sus ventajas fiscales. Si empezáramos por adelgazar la nómina y los coches oficiales de tanto ex senador , ex diputado, ex presidente, ex secretario, ex vicepresidente y ex ministro de todos y cada uno de los gobiernos a los que me he referido, de seguro tendríamos otra parte ganada para el engorde de la hucha.
    Y ya va siendo hora.
    Salut

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    1. Uribeeeee...¿que te han plantao un Lasu-groc?

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    2. ¡Caramba! me ha descubierto usted rápidamente. Lo he hecho para dar una nota de color y por si había por allí algún vecino jubilado (en mi portal somos muchos) de los que llevan habitualmente ese distintivo (hay varios).

      El caso es que de esos (los del lacito) he visto pocos por allí, aunque la mayoría de la gente que lo lleva peinan canas desde hace tiempo. Quizá esperan que desde Waterloo les solucionen el futuro.

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    3. Tiene usted más razón que un santo, Tot, como tantas otras veces. Pero, ¿quién le pone el cascabel al gato? (entendiendo por "el gato" a "las clases oligárquicas y sus lacayos", como se decía en los años 70). Es más fácil decirlo que hacerlo, por desgracia.

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    4. Claro que sí, eliminar prebendas, que además no se las han ganado. MJ

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