EL "EFECTO JOAN PLANAS" SE EXPANDE
Artur Mas vuelve a saludar con los cinco dedos de su manita
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| Mas, Mr. Proper, Casals, Guardiola, Junqueras, Forcadell y la monja Caram tomando pescaíto frito, cerveza y "Aromas de Montserrat" [granuribe50.blogspot.com.es] |
Ya lo comentábamos ayer. Un sujeto llamado Joan Planas abandonó el independentismo viajando por España, visitando los bares y hablando con la gente. Parece que el efecto puede extenderse, porque Artur Mas durante ese suculento tentempié (en un bar no identificado) vuelve a saludar con los cinco dedos de su mano en vez de aquellos cuatro a que nos tenía acostumbrados (la última vez en el palco del Camp Nou al lado de Felipe VI). Veremos a ver si cunde el asunto.
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| La manita de Mas con los cuatro deditos (¡ojo!, sin la sangre del conde Wilfred el Pilós) representando la senyera |
A lo mejor le parecer mentira, Gran Uribe, pero yo no sé qué quiere decir lo de los 4 o 5 deditos. MJ
ResponderEliminarLamento su desconocimiento, que me obliga a añadir una imagen suplementaria en la página.
ResponderEliminarLos cuatro deditos de Mas representan la senyera.
[...] «Y el emperador, viendo que havía sido en aquella batalla tan valeroso que, con muchas llagas que recibiera, hiziera maravillas en armas, llegóse a él, y mojóse la mano derecha de la sangre que le salía al conde, y passó los quatro dedos ansí ensangrentados encima del escudo dorado, de alto a baxo, haziendo quatro rayas de sangre, y dixo: "Éstas serán vuestras armas, conde." Y de allí tomó las quatro rayas, o bandas, de sangre en el campo dorado, que son las armas de Cathaluña, que agora dezimos de Aragón».
Bien, Uribe, magnífica explicación histórico-simbólica.
ResponderEliminarnvts
Gracias, Gran Uribe por la pronta y estupenda aclaración ¡No tenía ni idea! Pero es que si uno no lo sabe, tiene que fijarse mucho para captar una memez semejante. MJ
ResponderEliminarSe acabó la poética patriótica. Por mí, ese gran farsante se podría meter los cinco o los cuatro deditos en el culito.
ResponderEliminarEl Tapir
Sin que nos oiga el señor Riudecols i Garrofeta: por mí también. Estoy de la poética patriótica hasta los mismos cataplines.
EliminarAh, se me olvidaba. Una pregunta para Gran Uribe: el camarero de la foto, ¿no es el de "Amar en tiempos revueltos"? Gracias.
ResponderEliminarEl Tapir
¡Caray, ahora entiendo la tripa cervecera de nuestro nº 5! En cuanto a esa botella de Aromas del Montserrat, parece que ni siquiera ha llamado la atención de la monja, que se decanta también por la cerveza. No hubiera estado de más alguna botella de "fino" (Montilla o Jerez) bien fresco, ideal para acompañar el "pescaíto" y que eleva mucho el ánimo.
ResponderEliminarSí, sí la monja prefiere un buen "tanque" de cerveza a rebosar a los Aromas de Montserrat. Por cierto, no me extraña...
EliminarEl Tapir
De esa gente no veremos foto más festiva que ésta, ni siquiera en el balcón de la Plaza de Sant Jaume (allí menos, seguro, en presencia del heredero del mítico general Batet).
ResponderEliminarUna buena imagen costumbrista, aunque no parece que ese tipo de visitas a los bares a tomar pescaíto forme parte de las costumbres de esa gente. ¡Enhorabuena, Gran Uribe! ¡No desconecte usted!