martes, 27 de enero de 2015

Rajoy solo venía a darnos las gracias

La red es peligrosa y hay que ser cauteloso. Hay mucha gente —parada o no—cabreada, que sabe manejarse bien en este mundillo de las tecnologías y en seguida te sacan punta. Cómo huye la esposa, la gorrita y pizza de Rajoy, parece fácil: no.


4 comentarios:

  1. Yo también soy de las cabreadas. Me encanta el portazo. Muy gráfico.

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  2. Gran Uribe, le compadezco de todo corazón. ¿Cómo acaba uno después de escuchar media hora de discurso de la Cospedal o del mismísimo Führer? ¿Se los ha oído usted enteritos? Respecto al vídeo del portazo en la nariz, quizás le recuerde a usted algo... ¿no? Saludos,
    El Tapir

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    Respuestas
    1. Estación de tren de La Molina
      Buenas, buenas:
      Yo soy xxxxxxx xxxxxx xxxx xx xxxxx y estos son mis primos. Yo solo venía a decirle que no tenemos dinero para comprar el billete.
      ¿Tal vez eso? Por lo demás:
      El trabajo de llevar un blog al día es duro, se lo puedo asegurar. Hay que pegar muchos sellos, como decía Urdangarín. Algún discurso de esos que usted cita he escuchado, aunque no muchos. Pero "s´ha de tirar endavant". Aquí seguiremos al pie del cañón, mientras el cuerpo aguante [y esperemos que aguante].
      Saludos cordiales y una observación: Últimamente está usted un poco cauto y mucho más breve en sus comentarios. Que sepa que hay gente que sigue esto sólo por leerle a usted.

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  3. Me halaga usted, Gran Uribe, pero lo tremendo no son mis escritos, sino la realidad (esta frase me recuerda a una canción de José Larralde). Nunca hubiera creído que los políticos -a los que, en conjunto, antes admirábamos, pudieran hacer tantas payasadas y con tan poca gracia. Debemos tener cara de tontos... Por lo demás, coincido con usted en que debe ser duro encontrar cada día temas que interesen y enganchen a la gente. Lo reconozco, conmigo lo ha conseguido usted plenamente. Saludos,
    El Tapir

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