Viñeta de El Roto (6/1/2015) |
Nuestros padres nos enviaban al cine esta tarde del día 5 para ir preparando "el operativo" en el salón de casa. Cáscaras de naranja simulando que los Reyes Magos se las habían zampado, cagarrutas de caballo como si fueran de camello, los cowboys perfectamente formados en torno a la caravana defendiéndose del ataque de los indios, algún libro de Salgari que aún no tuviéramos, una camiseta del Athletic de Bilbao y jueguecitos diversos. Nunca el tren eléctrico...
Luego, por la noche, hacían ruido deliberadamente, moviendo sillas, tosiendo, con ánimo de hacernos creer que esos sujetos habían llegado ya. Una puesta en escena maravillosa. Nuestros padres se esforzaban un montón, la verdad.
Luego, por la noche, hacían ruido deliberadamente, moviendo sillas, tosiendo, con ánimo de hacernos creer que esos sujetos habían llegado ya. Una puesta en escena maravillosa. Nuestros padres se esforzaban un montón, la verdad.
Pero con el tiempo los hermanos de Gran Uribe se fueron enterando de "la impostura", hasta que ya no hubo más remedio que comunicárselo a este pobre papanatas, muy delicadamente —eso sí—para evitar soponcios innecesarios.
En fin, ¡qué tiempos! Es la historia, hermanos...
En fin, ¡qué tiempos! Es la historia, hermanos...
Y ahora, para ir calentando motores, la "Sinfonía de los juguetes", de Leopold Mozart, el padre de Wolfang Amadeus.
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