domingo, 12 de junio de 2016

Los amigos del "pedantuelo profesor"

Al leer estas líneas, uno comprueba que Javier Marías tampoco es muy proclive a "la ramplonería del pedantuelo profesor" Iglesias, tal como él califica el estilo de ese engreído sujeto. Eso reconforta porque lo dice alguien culto, viajado, sensato y con la cabeza bien amueblada. Pero mirado de otra manera, la verdad es que resulta un poco inquietante que el ramplón discurso, presuntamente culto, de ese altanero enredador sea capaz de seducir a cinco millones de votantes o más. Inquieta pero no sorprende, por desgracia. Un consejo te da Gran Uribe, Javier: ¡Aléjate corriendo!

[...] «Ante un partido como Podemos, dado al travestismo, el embarullamiento y la adulación del elector, dominado por una figura tan demagógica y taimada como Pablo Iglesias, sólo ayuda fijarse en quiénes son sus amigos y benefactores, y a quiénes admira, para intuir a qué atenerse y qué se puede esperar de él. 

Por supuesto, están el golpista militar Chávez y su caricatura Maduro, a quienes varios de sus líderes aconsejaron y sirvieron con apasionamiento y remuneración: es decir, un par de autócratas desastrosos para su país, que desprecian la democracia. Están Tsipras y Varufakis, de Grecia, a los que en estos momentos no conviene poner de ejemplo, aunque parecieran mucho más honestos y bienintencionados que los dirigentes de Podemos. Está a ratos Putin, y Bildu en el País Vasco, con el que han establecido alianzas. Ahora está Arnaldo Otegi, al que abrazan y juzgan “un hombre de paz”, como si nada hubiera tenido que ver con ETA en sus años más virulentos. Y desde luego está Julio Anguita –al que también abrazan–, uno de los políticos más injustificadamente presuntuosos y perdonavidas de nuestra democracia, y cuyo mayor logro (la famosa “pinza” de los noventa) fue aupar a Aznar al poder; y a Aznar, su compañero de conspiración, lo sufrimos ocho años. Iglesias se proclama “discípulo” de él (de Anguita, aunque en su megalomanía y su autoritarismo recuerde muchísimo a Aznar).
Algunos de los amigos, benefactores y gente a quien admira el "pedantuelo profesor" Iglesias / [granuribe50.blogspot.com.es]
Pero hay un elemento o guía más: la actitud de los entusiastas de Podemos, sin parangón con la de los de ningún otro partido, incluido el PP. Cuando en política aparece un fervor religioso; cuando la pertenencia a una formación se asemeja a la pertenencia a una secta, y hay un caudillo; cuando sobre sus críticos cae inmediatamente una lluvia de insultos mezclada con alguna lección adoctrinadora para que esos críticos “abran los ojos y abracen la fe”; cuando desde ese partido se habla de “regular” y “controlar” la prensa, y de pedir “adhesión” (palabra franquista donde las haya) a los jueces y a los cargos públicos; entonces, cuando todo eso se junta, sólo toca alejarse corriendo».

Enlace al blog de Javier Marías: 'Veamos a quién admiras'

El pobre Garzón, nuevo "amigo" del pedantuelo profesorcillo Iglesias, pensaba en octubre pasado lo mismo que Javier Marías

2 comentarios:

  1. Buenísimo el artículo, gran Uribe, de principio a fin. Pero, si hubiera que elegir, me quedo con el paralelismo Aznar - Iglesias, muy acertado, a mi entender, y, sobre todo, con el último párrafo. Marías ha dado en el clavo, o, al menos, en el clavo que ha despertado las alertas de esta anónima. Muy sugerente el lenguaje de Marías ahí, y el de los podemitas, o el de Iglesias, si se quiere, de lo más revelador.
    A correr toca, desde luego.

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  2. A la frase "es que yo no he sido" que acompañaba alguna trastada hecha en pandilla, mi abuela siempre me decía: "Dime con quién vas y te diré quién eres". Resulta bastante brusco decir esto hoy en día, pero lo he recordado al leer el estupendo artículo de Javier Marías. MJ

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