lunes, 20 de junio de 2016

Carta abierta a Almudena Grandes

Almudena, todavía no he tenido ocasión de leer ninguna tus novelas, pero sé de buena tinta que tienes algunas muy apreciables. Gozan de buenas críticas y de un elevado nivel de ventas, como acreditan las colas que se suelen generar en tu stand cuando firmas libros, algo poco común entre tus colegas, algunos seguramente de un nivel equiparable al tuyo.

En cuanto a tus artículos, sí que leo —desde empecé con el blog— tu columna en el diario EL PAÍS y tambien en el PAÍS SEMANAL y, por desgracia, en ese período no he sido capaz de encontrar ninguna que tuviera nivel suficiente como para ser reseñada aquí, como sí he hecho habitualmente con las de algunos de tus colegas, que suelen ser en general mejores que las tuyas, aunque quizá sus novelas no generen tanta adicción en las ferias del libro como la que tú provocas.


Almudena Grandes y Luis García Montero
Tus columnas en ese diario las encuentro blandengues, tirando a simplificadoras, impregnadas de populismo barato y demagogia de perfil bajo. Una pena, porque escribes muy bien. Pero usar tu afilada pluma, como lo haces, para demonizar (tú y también tu marido, Luis García Montero) a una persona íntegra donde las haya y coherente con sus ideas (por las que ha sufrido inconvenientes de todo tipo) como es Fernando Savater, no me parece nada bien. Sé que estás abducida por la verborrea podemita, y estás en tu derecho y no te criticaré por ello. Estás en una columna de Opinión y eso es lo que haces, dar la tuya, tan respetable como otras. Pero una cosa es eso y otra decir cosas que tú misma deberías saber que no obedecen en absoluto a la verdad.

Sin ir más lejos, en tu flojísima intervención de hoy (en la modesta valoración de G.U.), titulada El futuro, dices cosas de este tipo, más propias de un hooligan que de alguien equilibrado: "Mientras medios, partidos y candidatos cargan con una agresividad prácticamente unánime contra Iglesias, Rajoy parece un candidato de consenso".

¡Pobre Iglesias! No creo que ese sujeto necesite para nada de tu auxilio: cuando alguien del PSOE le dice algo que no le agrada, le basta y sobra con repetir (con su recién estrenada vocezuela de ovejita Norit): "Os equivocáis de enemigo", slogan que repiten como loritos todos sus disciplinados apóstoles. En fin, acabas el artículo con las típicas frases tuyas, tratando de hurgar en la fibra sensible de la gente que lo está pasando muy mal (no parece ser tu caso ni el de tu marido).

¡Caramba, Almudena! Escribes columnas pero no lees diarios y solo ves la tele si se trata de La Sexta. ¿Qué demonios te pasa? Por lo que yo sé, todos los partidos al margen del PP han expresado hasta la saciedad, y estamos muy hartos de oírlo, su oposición a que Rajoy sea presidente, un sujeto que  —por cierto— si lo sigue siendo a día de hoy es gracias a tu amigo Pablete, quien mientras tanto sigue sumando adictos (telemáticos y seguidores de La Sexta) gracias a eso.

Si estás faltando a la honestidad (espero que no), que te siente mal la cena, Almudena. Me voy a ver el fútbol, que, como sabes (porque quizá sigues este blog), es fútbol. Muchos recuerdos a tu maridito Luis. Yo, por mi parte, se los daré a Fernando, un buen tipo.

4 comentarios:

  1. Esta dama es la que una vez dijo que fusilaría a dos o tres voces de la derecha española cada mañana. Cambien la palabra "derecha" por "izquierda" y eso lo firmaría el mismísimo Franco, con la misma mano con la que firmó miles de fusilamientos. Yo no la tengo miedo pues me sigo considerando más de izquierdas que de derechas, pero ese es el nivel que da.
    Mateo M.

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  2. A Grandes se le nota demasiado eso de "arrimar el ascua a su sardina" y, claro, queda fatal. Además es tendenciosa, aunque, por lo que se ve, ella piense que es objetiva. MJ

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  3. Caramba, Gran Uribe, te has despachado a gusto... Dicho lo cual, sólo me queda añadir que también yo encuentro su columna vacua y sin interès alguno. Si yo fuera amigo suyo le recomendaría que huyera del comentario político, ya que no añade nada a otros comentarios en el mismo medio con bastante más enjudia y lo único que hace es desprestigiarse. Y, si de verdad considera como un deber moral transmitirnos sus opiniones, mi sugerencia es que lo haga con seudónimo, algo que también sugeriría a un novelist a quien admiro (y conozco como escritoratero más que a ella), Mario Vargas Llosa. Zapatero a tus zapatos...
    El Tapir

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