Pau Luque es nieto de andaluces, parte de su familia vive en Santa Coloma de Gramenet y nació en 1982, todo ello como la emergente estrella del independentismo, Rufián. Y ya que hablamos de puños, suele decir verdades como puños, y hoy no es una excepción cuando se refiere a ese sujeto y a los planes de ERC:
[...] «Cuando no recita de memoria el programa de ERC, no aporta ni un solo argumento, ni en los debates ni en los mítines. Repite como un mantra, como si quisiera convencerse a sí mismo y no a sus interlocutores, que el 27 de septiembre el independentismo ganó. Profiere calificaciones (“fascista”, “indigno”) a diestro y siniestro sin proporcionar más que lugares comunes para apoyarlas. Suelta discursos tan horteras que harían palidecer al Berlusconi más desatado, el que presentaba Forza Italia como el partido del amor, y dice unas cursiladas que, como señalaba recientemente Sergi Pàmies, producen vergüenza ajena. Cita episodios históricos con la ligereza de alguien que se informa exclusivamente por Wikipedia, y su cultura política, al menos la que muestra en estos debates, es de una superficialidad casi espantosa.Si la discusión política versara sobre argumentos, probablemente Rufián no sería la voz parlante de un partido con aspiraciones vencedoras.
Pero, contra las apariencias, esto no es una crítica a la persona de Rufián. Al fin y al cabo nadie está obligado a ser culto, agudo o intelectualmente sofisticado.[...] Lo que, consciente o inconscientemente, está intentando ERC es que aquellas personas que comparten perfil con Rufián, sientan empatía hacia él y se olviden de la estúpida idea según la cual en política deben contar los argumentos, no los orígenes.
[ERC] convierte hechos puramente arbitrarios (ser hijo de catalán o de andaluz, haber nacido en el extrarradio) en prácticamente las únicas virtudes políticas de un candidato. Y al elegir a alguien como Rufián lanza un mensaje. Sed bienvenidos a la independencia. Vosotros también cabéis. Eso sí, debéis saber que sois bienvenidos no necesariamente porque seáis inteligentes, no porque tengáis algo interesante que decir, ni siquiera porque seáis simpáticos. Sino, simplemente, [...] porque no nos llegan los números».
Enlace: Un argumento 'ad hominem'
Chapeau, Pau Luque. Muchos nos quedamos pasmados cuando oímos o leemos poemas (denominación de origen), frases o discursitos (pequeños) de Rufián. Sentimos y pensamos lo mismo que el señor Luque, pero no sabemos expresarlo con tanto tino. MJ
ResponderEliminarRufián suscita unanimidades. Todo, pero todo el mundo dice que es un maleta. ¿Entonces...?
ResponderEliminarRepito lo que decía un tuitero catalanista el otro día: "Amics de ERC, feu-vos-ho mirar!"
nvts
Pau Luque acierta de lleno al analizar las razones de la elección de Rufián a candidato al Congreso, sin embargo, hay que reconocerle a ERC su coherencia, ya que nos vuelven a ofrecer otra perla política del mismo calibre o superior al del añorado Hortalà.
ResponderEliminarPàmies recordaba el otro día a Heribert Barrera, a la Rahola, al Colom, a Tardà i a algún otro que demuestra una preocupación de ERC, pacientemente sostenida en el tiempo, por ofrecernos de lo bueno, lo mejor.