Buena gente, buena carne, buen vino, buenas verduras, buenas manzanas de Igea, excelentes tomates, preciosos paisajes, cielos limpios llenos de estrellas, arriesgados encierros, las huellas de nuestros nobles predecesores (los dinosaurios). Todo esto a tiro de piedra de Barcelona, aunque quién sabe si dentro de poco haya que renovarse el pasaporte para ir por allí.
Hablando de tomates, ya de vuelta encontramos este llamativo reportaje sobre la producción del tomate en Almería. Uribe, después de verlo, se ha zampado con gran placer uno de los que se ha traído de su excursión por la Rioja. ¡Vaya tomates!
!Existen! Los tomates de verdad, con olor, color y sabor de tomate. No me lo puedo crer. Hay que ir a La Rioja, Y sin tardanza. Entre otras cosas, a comer tomates.
ResponderEliminarEfectivamente, sin tardanza. Uribe pasará lista.
Eliminar¡Saludos, oh Gran Uribe!
ResponderEliminarDebo reconocer que su huida a las riojanas tierras en fechas tan señaladas me ha provocado cierta sensación de desamparo.
Dicho esto paso a comentarle el objeto de mi comentario que no es otro que el felicitarle por el video que ha colgado acerca del cultivo del tomate. Las imágenes del mar de plástico son realmente espectaculares y la foto de satélite final impacta y da justa medida de la importancia del sector para la economía española. Sin embargo quería hacerle una pequeña observación, tanto mi formación agrícola como mi experiencia en el cultivo del tomate, así como el estudio organoléptico de variedades locales y comerciales, me han llevado a concluir que el factor principal en la expresividad aromática del tomate es el momento de recolección. Las exigencias de los distribuidores y comerciantes de tomates en cuanto a su presentación y durabilidad provocan su recolección temprana, con lo que los precursores aromáticos no están del todo maduros y de ello resultan productos insípidos.
No se trata tanto de una cuestión de variedades o de métodos de cultivo (exterior, interior, ecológico o convencional, en tierra o hidropónico...) como de momento de recolección, por lo que le recomiendo que si quiere encontrar en Barcelona tomates tan sabrosos como los que ha tenido la suerte de probar deberá usted encontrar productos del llamado quilómetro 0, es decir, aquellos que se cultivan cerca de Barcelona, cuya cadena de distribución y venta sea menor.
Habiendo disfrutado de su blog tanto por las noticias de actualidad política como por las literarias, cinematográficas, arquitectónicas y demás, me complace sobremanera poder hacerle esta pequeña observación sobre un mundo, más diría, un universo tan apasionante como el del tomate.
Reciba usted un afectuoso saludo desde la menor del baleárico archipiélago.
Vicehereu
Amigo Vicehereu, agradezco mucho su aportación tan constructiva acerca del misterioso mundo del tomate con olor y sabor a tomate. Uno pensaba que esa "cosa" que comemos es solamente por culpa de los invernaderos pero ya veo que el asunto es más complejo. En cuanto al vídeo, me parece excelente, como a usted.
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