"Los Hijos del Pujolismo somos un poco blanditos, de mel y sucre. Rosa Sensat y la Escola Activa dejan secuelas.
El elefante de Hortalà, la bandera catalana en el Everest, Sant Jordi gloriós, La Crida..., son tantos y tan entrañables los recuerdos que llevamos en la mochila muchos niños de los 80 que siempre resultará difícil alinearse con el facha.
- Els teus pares que voten, fatxes o catalans? - Siendo catalans votar a Pujol, claro. Eso era pregunta habitual de los chulillos de las clases en todas las elecciones de aquella época.
Fue un despertar prematuro a la conciencia política en clave nacionalista catalana.
Los castellano - parlantes un poco sensibles lo teníamos un poco peludo, nos debatíamos interiormente en un mar de dudas. Muchos ya cayeron entonces. Recuerdo entre gomet y gomet a un Carlos Muñoz, más castellano que Machado, defendiendo acaloradamente la independencia. Yo mismo, llegué a desear la realización del sueño. Esas cuatro barras nos traían loquitos.
Los que desde entonces no se hayan movido de Cataluña han crecido con el axioma catalán, y dado la rapidez con que se ha montado este sidral, es hasta cierto punto normal que tarden en reaccionar.
Les ruego que traten de no ser excesivamente duros con esta generación que se llevará a la tumba las gafitas nacionalistas, así como ustedes (Gran Uribe, Ludita, El Tapir...) se llevarán las religiosas.
Quiero agradecer al Gran Uribe el ofrecer este espacio de reflexión que nos va tan bien para canalizar "el neguit" de no ser devoto de Sant Procés".
Mr. Pujolson
Comprendo perfectamente las sensaciones que se describen en el escrito de Mr Pujolson, como también comprendo que le resulte difícil "alinearse con el facha", cosa que comparto íntegramente, pese a no haber disfrutado de esa educación tan patriótica y sentimental que, al parecer, gozaron los niños de los años 80. Desde luego, los que nacimos en los años cuarenta no teníamos ni idea (al menos yo, que no he tenido hijos) de lo que se estaba cociendo a fuego lento en los fogones del nacionalismo pujolista. Ahora, a toro pasado, se ve mucho más claro. Lo de ahora se gestó en los colegios (sobre todo privados) de la quinta y siguientes de Mr Pujolson. Yo, desde luego, he caído de la higuera muy recientemente y sigo sorprendiéndome del alto voltaje de lo que se fraguaba... En fin, ya veremos en qué acaba todo esto. Saludos cordiales,
ResponderEliminarEl Tapir
Creo conocer de primera mano a Mr. Pujolson ("reconozco el estilo", que diría un tío mío) y doy fe que lo que dice es ciertísimo. Pertenece a lo que algunos han llamado "la generación de la plastilina", de la "escola activa", de los "gomets"...Cómo íbamos a pensar que las cosas irían cuidadosamente dirigidas en la dirección que ahora vemos clarísima. Tenemos que pedir disculpas por el exceso de celo en procurar que nuestros hijos abandonaran los dogmas de la escuela franquista en la que mal o bien nos habían educado.
ResponderEliminarEstimados lectores y apreciado señor Gran Uribe, volver a ver las imágenes que ilustran esta entrada me ha hecho mucha ilusión y me siento muy halagado con la buena acogida que mi pequeña contribución ha suscitado.
ResponderEliminarAprovecho para enviarles un cordial saludo.
Que Pilarín Ballés i Tomeu Peña su profeta les acompañen.
Mr. Pujolson