Y ahora, un cuento maravilloso de Tolstói sobre la ambición humana, "Cuánta tierra necesita un hombre", recogido en la antología Lev Tolstói Relatos, ed. Debolsillo (2010) He aquí un fragmento:
"Un día Pahom estaba sentado en su casa cuando un viajero se detuvo ante su casa. Pahom le preguntó de dónde venía, y el forastero respondió que venía de allende el Volga, donde había estado trabajando. Una palabra llevó a la otra, y el hombre comentó que había muchas tierras en venta por allá, y que muchos estaban viajando para comprarlas. Las tierras eran tan fértiles, aseguró, que el centeno era alto como un caballo, y tan tupido que cinco cortes de guadaña formaban una gavilla. Comentó que un campesino había trabajado sólo con sus manos, y ahora tenía seis caballos y dos vacas".
Pahom viaja a la tierra de los bashkirios, donde le había indicado el comerciante y allí contacta con el jefe de la tribu.
[...] "El jefe escuchó un rato, pidió silencio con un gesto y le dijo a Pahom:
-De acuerdo. Escoge la tierra que te plazca. Tenemos tierras en abundancia.
-¿Y cuál será el precio? -preguntó Pahom.
-Nuestro precio es siempre el mismo: mil rublos por día.
Pahom no comprendió.
-¿Un día? ¿Qué medida es ésa? ¿Cuántas hectáreas son?
-No sabemos calcularlo -dijo el jefe-. La vendemos por día. Todo lo que puedas recorrer a pie en un día es tuyo, y el precio es mil rublos por día. Pahom quedó sorprendido.
-Pero en un día se puede recorrer una vasta extensión de tierra -dijo.
El jefe se echó a reír.
-¡Será toda tuya! Pero con una condición. Si no regresas el mismo día al lugar donde comenzaste, pierdes el dinero". [...]
Aplaudo tu idea de recordarnos hoy a Tolstoi, gran Uribe. Un hermoso homenaje para un grande entre los grandes.
ResponderEliminarSus novelas y sus cuentos, además de hacernos pensar, saben llegar directamente al corazón.