A Uribe le gusta muy especialmente el nuevo descubrimiento del Athletic de Bilbao: Mikel Rico, pero es consciente de que ejercemos el típico papel de equipo "de tipo medio": los poderosos nos "roban" jugadores y nosotros se los " robamos" a equipos más débiles (económicamente). En este caso lo hemos hecho con el Granada. Ellos están enfadados y nosotros... contentísimos.
Eduardo Rodrigálvarez traza con exquisitez su trabajosa biografía.
Os selecciono un párrafo:
[...] "Mikel Rico, de 29 años, decidió irse al Conquense B, de Tercera. El futbolista llegó a Cuenca con un sueldo de 600 euros al mes con el que tenía que hacer frente a la vivienda y a la manutención. El primer milagro tenia que ser en una ciudad encantada. Pero hubo otros. Por ejemplo cuando tuvo que sobrevivir siete meses sin cobrar en el Polideportivo Ejido, en Segunda, que además le ponía todas las trabas del mundo para fichar por el Huesca, de la misma categoría. Entre Huesca y El Ejido anduvo varios años aquel chico que lo más cerca que había estado del Athletic, el club de sus amores, fue en su época de juvenil en el Basconia (filial del rojiblanco) con el que llegó a disputar 10 minutos en Tercera de la mano de José Luis Mendilibar".
Para la "biografía" entera: El goleador encantado del Athletic
Los equipos poderosos no sólo pueden fichar a los jugadores que quieran. También pueden impedir que se les marchen, ya que pagan bien y en otro equipo difícilmente cobrarán lo mismo. No me gusta que le hayamos quitado a Mikel Rico al Granada pero... ¡es ley de vida! El pez grande se come al chico.
ResponderEliminar