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Gran Uribe se prueba el "Polo Mao" diseñado por Banderas |
Gran Uribe, harto de problemas en la casa en la que pasaba estos tres días (el sifón de la ducha roto de repente—con los clásicos malos olores correspondientes—, la wifi "
kaputt", el sistema de alarma también, y la visión de un simpático ratoncito hincando el diente al queso en la mesa donde iba a comer), ha abandonado su morada para tranquilizarse un poco. También es verdad que hoy entraban unos
guiris y no tenía más remedio que irse. Esas minucias han estado a punto de producirle un síncope, por la inminente llegada de esos sujetos, y ha decidido relajarse en la bulliciosa ciudad de Ibiza haciendo unas compras.
En efecto, sumido en profundas cavilaciones del estilo: "
si montas un circo te crecen los enanos" y otras de este calibre, tenía ganas de cambiar el chip y darse un capricho. Necesitado de renovar su fondo de armario (en el que hay diversos polos convencionales), desde hace tiempo tenía in mente el "
Polo Mao" (el de la Revolución Cultural) que ha diseñado Antonio Banderas. Al leer el artículo de Juan José Millás, se ha decidido y ha sido todo un acierto, como puede apreciarse en las imágenes superiores. Veamos cómo valora Millás este inspirado diseño de nuestro genio de Málaga.
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Juan José Millás, De donde se demuestra, Diario de Ibiza (13/8/2016) |
No sé cómo le sentará a Banderas el polo Mao, pero desde luego a Uribe le sentaba mejor la camiseta del Athletic...
ResponderEliminarEl Tapir
Esto del "polo Mao" de Banderas me recuerda el negocio, bastante fantasioso, que pretendía montar hace muchísimos años un tío del Gran Uribe -tío Gerardo- en África. Consistía en vender camisas "a los negros" -decía él- sin cuello ni puños, porque "con el calor no hacen falta". Con ello abarataba la confección de la prenda. Ganando dos o tres pesetas por camisa en un país, pongamos de cincuenta millones de habitantes, podía en poco tiempo ponerse las botas. Ni que decir tienen que tal peregrina idea no fue a más y ahí quedó, como una de tantas ocurrencias del personaje. Pues Banderas creo que ha cogido el testigo del tío Gerardo y se debe estar forrando a cuenta del polo sin cuello (!).
ResponderEliminarnvts
Creo que su socio en el negocio era un búlgaro llamado Dimitrov, pero no estoy seguro.
EliminarCreo que ese era el nombre, en efecto. También tenía otra "socia", por llamarla de algún modo -su nombre real era Clemencia Giraudier- con la que maquinaba posibles negocios a cual más peregrino. Recuerdo un invento para calentar los pies de los motoristas en invierno...Ninguno de ellos salió adelante, como es natural.
EliminarNvts
Los cuellos de las camisas, de los polos y de cualquier prenda son un incordio. Banderas ha tenido una buena idea.
ResponderEliminarDisiento. Son un incordio para el (la) que los tiene que planchar, acción que evito cuidadosamente siempre que puedo... En todo lo demás, no los veo como un incordio y, por qué no decirlo claramente, me gustan los cuellos, siempre que no tengan un diseño demasiado extremado (redondos, agudos, etc.). Y desde mi punto de vista, quedan mucho mejor que una prenda sin cuello cuando tienes que llevar algo encima (una americana, un jersey...).
EliminarEl Tapir