Aún así, uno ha decidido asistir nuevamente este año intentando combatir al aburrimiento del que hablaba ayer Milena Busquets, para lo que ha aflojado los 10 euros que vale la entrada (estaban agotadas desde hace meses pero Uribe fue previsor). La verdad es que el espectáculo es francamente desagradable desde todos los puntos de vista, aunque en el video promocional publicado por la organización queda bastante embellecido:
Enlace: La Tomatina 2015, en imágenes
No recordaba haber hecho un comentario tan duro el año pasado en relación con esta (para mí) detestable fiesta. Así que lo he releído y, como no podía ser menos, me reafirmo en lo dicho hace un año. Que les aprovechen sus tomates, pero no me verán por ahí...
ResponderEliminarEl Tapir
¡Qué grima! No creo que me vean por ahí. MJ
ResponderEliminar¡Cuídese Uribe! no se nos vaya a ahogar con tanto tomate. Le necesitamos fresco como una lechuga para los tiempos que se avecinan.
ResponderEliminarLa tomatina es una fiesta que refleja el nivel intelectual de la mayoría de la sociedad... muy por debajo de la normalidad.
ResponderEliminar