Buena la organizó el pobre Günter Grass cuando confesó, ya bastante mayor (a lo Jordi Pujol), sus devaneos de juventud con las SS. Todos sus méritos posteriores, como escritor y como comprometido agitador de conciencias, pasaron a un segundo término de un plumazo... ¡Qué pena! Günter Grass, lo que nadie nos quitará, es tu obra literaria. Descansa en paz... El Tapir
Pues sí, lo que son las cosas. En un minuto se va al garete una obra tan poderosa como la suya, como le pasó a Pujol con su magnánima construcción de Cataluña.
Buena la organizó el pobre Günter Grass cuando confesó, ya bastante mayor (a lo Jordi Pujol), sus devaneos de juventud con las SS. Todos sus méritos posteriores, como escritor y como comprometido agitador de conciencias, pasaron a un segundo término de un plumazo... ¡Qué pena! Günter Grass, lo que nadie nos quitará, es tu obra literaria. Descansa en paz...
ResponderEliminarEl Tapir
Pues sí, lo que son las cosas. En un minuto se va al garete una obra tan poderosa como la suya, como le pasó a Pujol con su magnánima construcción de Cataluña.
EliminarPobre tambor.
ResponderEliminarSuerte que la obra ahí queda, que no es poco.
ResponderEliminarnvts