Rajoy y Mas reabren la puerta

Había gran expectación por ver lo que daba de sí la reunión de estos dos "hombres de Estado" mediocres, por no decir malísimos: un catalán bien peinado pero tirando a tonto y un gallegazo de manual y poco más.
Pero ¡ojo!, un hecho sin precedentes, del que ya se ha hecho mención en este blog, había cambiado de repente todo el tablero de juego.

Rajoy y Mas inician fríamente el diálogo ante los fotógrafos / Álvaro García

No empezó bien el asunto. El heredero de Pujol llevaba únicamente bajo el brazo la consulta y una carpetilla con 23 peticiones más. Y el otro, a verlas venir. Además, uno del Barça y otro del Madrit. Muy poco feeling, en resumen.
Pero la cosa empieza a animarse cuando Artur Mas, ya en la intimidad y en línea con lo que avanzó Uribe hace unas semanas (Véase: Reunión de dos hombres de Estado), sacó el botellón de dos litros de whisky (escocés, of course) que le trajo de Andorra Oriol Pujol. En ese momento, nuestro particular y ya único Molt Honorable le debió de decir a Rajoy: "Necesito un trago", y no es para menos. Merece una "inmensa misericordia" y compasión ese sujeto por el lío en que se ha metido. Claro que... nosotros también.
Pero en fin, lo cierto es que esa brillante iniciativa lubricó mucho las cosas. ¿Quizá la luz al final del túnel? Uribe tiene tendencia a ver siempre la botella medío vacía en vez de medio llena y por eso lo duda.

Rajoy y Mas, ya en la intimidad, empiezan a "empatizar" / Foto: La Moncloa y granuribe50.blogspot.com.es

Bueno, seamos "siempre positivos, nunca negativos", como dice el profesor Van Gaal. A ver cómo evoluciona el asunto. De momento, el Rei Artur ha tenido que recoger sus plumas de pavo real, a la espera de lo que le habrá de indicarle, sin duda, El Gran Timonel...

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