sábado, 2 de agosto de 2014

Yolanda Álvarez y el embajador de Israel

Israel acusa a la corresponsal de TVE en Gaza de ser portavoz de Hamás

Bueno, ya tenemos de nuevo al embajador de Israel que, sea quien sea el que ocupe ese cargo, parece ser que tenga como principal misión en España la de buscar hasta de debajo de las piedras a presuntos militantes de Hamás o a antisemitas diversos. Ahora la ha tomado con la corresponsal de TVE, Yolanda Álvarez, hasta —se supone— conseguir que la sustituyan por alguien menos objetivo, cosa que no tardará en suceder.
No en vano son "los putos amos", como diría Guardiola...

La corresponsal de TVE en Gaza, Yolanda Álvarez, con chalequito antibalas / Imagen tomada de la televisión
Un valiente artículo (y no es fácil serlo en este tema) de Joan Cañete Bayle en El Periódico nos lo explica de esta manera:

Joan Cañete Bayle«Ahora resulta que TVE, a través de su extraordinaria corresponsal en Jerusalén, Yolanda Álvarez, es Hamás, más concretamente “correa de transmisión de los mensajes, cifras, imágenes y datos de Hamás", en palabras de una portavoz de la embajada de Israel en España.
[...] La embajada de Israel en España acusa a Yolanda Álvarez, por ejemplo, de no haber informado del uso de la población civil palestina como escudos humanos. Ni ella, ni nadie de los que está o ha estado en Gaza, no solo de la prensa española, sino de la prensa internacional, ha sido testigo de esa acusación. La información que surge de Gaza es la misma, se quejan amargamente los portavoces israelís y sus colaboradores: el drama de los palestinos allí masacrados y atrapados. Los corresponsales cometen el delito de no enmarcar dentro del ”derecho a la defensa de Israel” las imágenes de los niños asesinados mientras dormían en una escuela-refugio de la ONU. No se preguntan por qué a todos los periodistas (seres que por definición buscamos desmarcarnos de nuestros congéneres para contar algo diferente) les da por tejer juntos una gran conspiración para contar lo mismo: el bombardeo brutal de uno de los ejércitos más poderosos del mundo sobre casi dos millones de personas hacinadas en 360 kilómetros cuadrados. “La situación en Gaza es un desastre humanitario sin precedentes en el siglo XXI”, ha dicho el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo (otro antisemita, supongo). Un desastre que no se ha producido por un terremoto o un tsunami. Contar ese desastre, al parecer, es ser correa transmisora de Hamás.
"El activismo político no es, desde luego, periodismo, y transmitir propaganda no es informar", dice la nota de la embajada en la que carga contra Yolanda Álvarez. No puedo estar más de acuerdo. Por eso, entre la embajada propagandista y la periodista, entre los propagandistas disfrazados de periodistas y los periodistas, siempre estoy con la periodista que cuenta lo que sucede delante de sus ojos. Porque esa, ver y explicar lo que tu opinión pública no ve, lo que tu opinión pública no sabe, es la función del periodista. En Gaza y en cualquier otro lugar».



2 comentarios:

  1. Mientras sólo sea la embajada la que se haya "fijado" en nuestra corresponsal...; lo peor que puede pasar es que nos pleguemos a las peticiones israelíes y la destituyan. Pero no quiero ni pensar lo que podría ocurrir si esa "sospecha" se la "transmiten" a los soldados israelíes que andan por allí operando. Basta recordar el caso de José Couso y otros periodistas en el hotel Palestina... En fin, esperemos que todo sea una pataleta del embajador, que debe andar un poco nervioso, y la cosa no pase de ahí. Saludos,
    El Tapir

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  2. Menos mal que los periodistas informan y los hechos hablan por sí mismos. No siempre se puede ocultar, o disfrazar, el horror y la barbarie con dinero, propio o ajeno, o con la ayuda, o la pasividad, de las grandes potencias occidentales.
    Vemos y juzgamos. El pensamiento es libre. Les guste o no. Y tiene alas. Se extiende, por más que se emperren en cortarlas.

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