La Sagrada Familia sigue creciendo

Que a Gran Uribe no le gusta nada la Sagrada Familia tal como está actualmente es un secreto a voces, como quedó patente en la entrada titulada Polémica en torno a la "mona de Pascua". Tampoco algunas de las obras de Gaudí, por cierto, aunque reconoce la gran imaginación y el trabajo sin límites de aquel visionario personaje. Pero bueno, "sobre gustos y colores no hay nada escrito" (a mucha gente entendida le entusiasma este edificio).

Tampoco le agrada nada el ambiente de piratería que rodea a ese emblemático lugar, sobre todo en las mañanas de los días laborables. Dicen que todo ese mercadeo da dinero a la ciudad, aunque no sabemos muy bien para qué fines se utiliza ya que no vemos por ninguna parte que revierta positivamente sobre el ciudadano.

Sagrada Familia (octubre de 2016)

Sagrada Familia (9 de abril de  2018)

El caso es que G.U. pasa de vez en cuando por allí, por motivos que no vienen al caso (la última vez fue hace año y medio), y así puede ver el progreso del asunto. Pues bien, sigue creciendo hacia arriba, en un extraño amasijo de formas que le resulta a este bloguero casi hasta un poco repulsivo y va adquiriendo una volumetría bastante aparatosa cuyo gálibo máximo previsto desconocemos cuál es (se aprecia en la fotografía de la izquierda, tomada por un servidor desde Montjuic el 24 de marzo).

Así que, con nuestro modesto telefonillo en una mano y agarrando bien la cartera con la otra, por si las moscas, hemos aprovechado hoy la ocasión para tirar la fotografía acreditativa correspondiente, aunque sea sin ver un pijo con el móvil a pleno sol.