lunes, 28 de noviembre de 2016

Savall y otros grupos de música antigua

Hemos hablado de Jordi Savall como nuevo embajador del Diplocat, un cargo en el que no sabemos qué c****** pinta. Es un buen músico (lo de Savallone es un apodo cariñoso, lo que hace es muy bueno), un sujeto que empezó de comunista progre en el mítico barrio del Putxet de los 70, y que luego supo sacar mucho partido a la viola de gamba.

En efecto: con unas dotes comerciales dignas de mejor causa, consiguió borrar del mapa a todos los demás grupos que le hacían competencia, de manera que es imposible encontrar en las tiendas especializadas grabaciones de música antigua que no sean las suyas y las de los sellos discográficos que producen sus obras (Alia Vox, Astrée y otros).

Por tanto, no busquen ustedes en el mercado discos de Voices of Music, sin ir más lejos. La pieza que publicamos aquí, una canción de amor — "Folle è ben che si crede", de Tarquinio Merula—, agrada a Gran Uribe, la verdad, y la conoció a través de una grabación del propio Savall en la inolvidable voz de su esposa Montserrat Figueras, fallecida en 2011.

Jennifer Ellis Kampani y Voices of Music interpretan Folle è ben che si crede, de Tarquinio Merula

Tarquinio Merula (1595-1665), por cierto, es uno de esos fascinantes músicos del primer barroco italiano (hay muchos), a pesar de que tenía un carácter hosco y resultaba ser un sujeto intratable. Con él sucede algo que no sería ni la primera ni la última vez que se da en la historia del arte: alguien que con un carácter total y absolutamente desagradable (le echaban de todas partes por ese motivo) refleja en sus obras, sin embargo, un altísimo grado de sensibilidad.

Loco es aquel que crea / que con dulces promesas de amor / o feroces y terribles amenazas / consiga alejarme de mi bello ídolo, / que cambie de opinión / quien espere que mi corazón prisionero / goce de libertad./ Que hable quien quiera, que hable quien sepa.

Que otros por celos,/ lancen impías llamas de su pecho / y la furia Megera vierta su veneno / para que quiebre la fe en mi amada./ Aunque la muerte me arrebate la vida / nunca será verdad que se disuelva / ese preciado lazo que me ha hecho preso. / Que hable quien quiera, que hable quien sepa.

Ya tendré momento y lugar / para desahogar mis penas de amor / y clamar, de mi amado bien / y de mi ardiente corazón, el fuego oculto./ Y entre las sombras y el misterio / de los esplendores nocturnos / mi preciado secreto se esconderá. / Que hable quien quiera, que hable quien sepa.

6 comentarios:

  1. Tocan fantásticamente. Si se piensa en su colaboración en Diplocat, es muy raro.

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  2. Desde hace años tengo en mi colección de música muchos discos y libro-discos de Jordi Savall, alguno de ellos sublime, otros magníficos, unos pocos muy buenos y alguno, pocos la verdad, que más bien parecen ediciones para salir del paso, para pagar la compra de mes en Carrefour o, simplemente, para atender los gastos salariales de jardinero y la ama de llaves.
    En fin, está claro que este señor tiene prestigio y caché, y es muy bueno en lo suyo, y me parece muy bien: cada uno explota lo que mejor sabe hacer, pero a mí, desde que le conocí y le he visto en algunas entrevistas, siempre me pareció un pelín altivo y un sobrado; y en algunas ocasiones, incluso un soberbio.
    Que ahora esté metido en Diplocat no me sorprende: tiene ese toque de altivez típica del que se cree mejor que la media de sus conciudadanos (españoles) o de los que mira por encima del hombro a los que estima que necesitan de un guía que los lleve por el buen camino hacia Ítaca…
    Seguiré disfrutando de su música enlatada, al menos de la que ya tengo a mi disposición, ¡eso lo tengo muy claro!, pero no contará con mi presencia en conciertos ni seré oyente de sus diatribas.
    Alfredo
    Posdata: desde hoy daré más pábulo a lo que me expresen de forma sonora otros grupos especializados en música antigua, como por ejemplo Voices of Music.

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    1. Comparto al cien por cien lo que dice, porque a mí me pasa igual. Me gusta mucho la música que graba ese sujeto y cómo lo hace, pero me agrada menos ese aire de displicente perdonavidas (que adopta mucha gente en todas partes, pero por aquí muy especialmente, ya que "som els millors", como usted sabe).
      Muchas gracias por su comentario.

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  3. Gracias, GranUribe,
    Le escribí porque me gusta compartir opiniones y gustos de todo tipo, sobre todo musicales. Eso es lo que hace que las personas, al menos las que son personas, puedan ver y sentir más allá de lo que es la inmediatez de los conceptos identitarios... Y se lo dice alguien que es de Galicia, una zona de España que sí fue Reyno (con "y") en el siglo IX pero que ahora, con el paso de los siglos, asumió como propio el concepto “o caso é ir indo”... Y así vamos.
    Un abrazo y enhorabuena por el blog, lo abro todos los días.
    Alfredo

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  4. Si puedes, escucha las composiciones de Carlo Gesualdo, como, por ejemplo, el de Tenebrae interpretado por The Hilliard Ensemble...

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