jueves, 22 de octubre de 2015

El misterioso juez del caso 3%

La Guardia Civil permaneció el pasado 28 de agosto cinco horas en el despacho del tesorero de Convergència, Andreu Viloca, en el primer registro realizado a la sede del partido.
La detención de ayer de ese sujeto tiene su origen en aquel registro. Los investigadores encontraron en su despacho elementos relevantes. Muchos correos electrónicos (dicen que ocho mil) en el ordenador, carpetas azules, apuntes a mano en copias de contratos y hasta una agenda con los tipos a los que reclamar la derrama, la mordida, el hachazo del 3% que después retornaba a muchas empresas bajo el concepto de sobrecoste respecto al proyecto inicial; pero quizá lo más llamativo era una modesta trituradora Njoy TECH. Allí descubrieron, entre la maraña de tiras de papel, el emblema verde de la empresa Teyco con anotaciones del 3%. En las últimas semanas, los expertos de la Guardia Civil han trabajado como chinos para reconstruir casi todos esos papeles. Y por el hilo se empieza a sacar el ovillo.

Lo malo es que... la cosa no viene de Madrit, sino que ha partido de un oscuro juez de Vendrell, Josep Bosch Mitjavila, a instancias de una denuncia de la persona que por entonces era concejala de ERC en Torredembarra (Montserrat Gasull), que fue abandonada vilmente en su lucha contra la corrupción por el partido al que pertenecía. En efecto, ERC no quiso saber absolutamente nada del asunto. Muy edificante y significativo de cara al nou país que nos prometen.

1) La Generalitat ha rescindido el contrato con la empresa del USB NjoyTech (corta las tiras muy anchas) 
2) El juez Josep Bosch Michavila, encargado del caso 3%, en las proximidades del juzgado de El Vendrell


Según nos explica El Periódico de Catalunya, «el juez, que lleva mucho tiempo dejándose las pestañas en el caso, es catalán de pura cepa, nacido en Barcelona en 1985, y busca ser cualquier cosa menos un juez estrella. De hecho, según comentan las fuentes consultadas, le sentó mal que la clase política afectada insistiera al principio en que los registros formaban parte de maniobras a gran escala procedentes de no se sabe qué instancias de Madrid. Para él era parte de su labor ordinaria. “Lo que ha hecho es trabajar muy duro en una denuncia que fue presentada por una concejal de Esquerra Republicana y ha llevado con exquisita profesionalidad la investigación”, arguye la fuente citada. [...]

Los dirigentes de Convergència Democràtica de Catalunya pusieron el grito en el cielo. Pero todos sabían, o debían saber, que las órdenes de registro no iban firmadas por ningún juez de Madrid ni de la Audiencia Nacional y ni siquiera del Tribunal Superior catalán o de una audiencia provincial. Era la firma de un juez de primera instancia [...] y provenía del municipio tarraconense de El Vendrell».
El enlace al artículo de El Periódico de Catalunya es el siguiente:


2 comentarios:

  1. Cuando veo que van proliferando cada vez más los casos del 3%, me pregunto a mí mismo por enésima vez en qué estaban pensando todos esos políticos tan patriotas y tan valientes que tenemos cuando Maragall hizo esa observación en el Parlamento catalán ("el seu problema es diu tres per cent"). ¿Por qué no se hizo nada? Al darle vueltas al caso me viene a la memoria una vieja y magnífica película de John Sturges, "Conspiración de silencio", con un impagable Spencer Tracy como héroe solitario frente al silencio cómplice de todo el pueblo. La diferencia está en que aquí no apareció ningún Spencer Tracy para desenredar la trama...
    El Tapir

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  2. En primavera me compré el libro "Clave K" de Margarita Rivière. Escrita HACE MÁS DE QUINCE AÑOS, la novela no pudo publicarse en su momento y se ha editado ahora sin actualizaciones ni correcciones. Es un thriller que descubre tramas políticas, corrupción urbanística, peculiaridades del poder en la nación kaika y las artes de su carismático presidente K y su mujer Marka. Vale la pena leerla. En ella queda reflejado que todos esos chanchullos (por llamarlos de alguna manera) relacionados con el partido en el poder lo sabían muchos. MJ

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