Nos movemos en un mundo de frágiles cimientos y de escasas convicciones serias. Como muestra, un botón: lo importante ahora no es ya si lo que se dice es verdad o mentira, ¡qué va...! Si una cosa se repite muchas veces sin pestañear, en plan "gota malaya", pasará indefectiblemente a ser tomada como cierta, aunque no lo sea.
Y eso colma plenamente el sentimiento del que está deseando oír lo que le gusta oír. Y los sentimientos, como se sabe, son fácilmente utilizables para lo que haga falta, aquí y en la China.
Y en esas andamos...Bueno, volvamos a los orígenes, aquella época en la que lo que estaba cargado de futuro era la poesía, no la mentira. Oigamos a Paco Ibáñez cantando a Gabriel Celaya. Un gran poema y una gran canción. Dadle al botón de "play".
No hay comentarios:
Publicar un comentario