miércoles, 22 de mayo de 2024

Recuerdos de infancia: la playa de Castelldefels

Ejercemos hoy de abuelo Cebolleta. A mediados de los años sesenta, más o menos por estas fechas, y siempre después de la lúgubre Semana Santa de entonces, empezaba una temporada de domingos luminosos en la playa de Castelldefels, que duraba hasta mediados de junio. Hoy no era domingo, pero lucía la misma luz que G.U. recordaba de entonces. Era un buen día para rememorar un poco aquello, que ya hemos evocado alguna vez en este blog.
Playa de Castelldefels (21/5/2024) / [granuribe50]
A bordo de un flamante Dauphine de color coral, nos encaminábamos hacia allí, convenientemente pertrechados con toallas, flotadores, crema Nivea y ... una neverita milagrosa preparada con esmero por nuestra madre, 'Patiña'. Después de la semana en las sombrías aulas del colegio, aquello era gloria.
Playa de Castelldefels (21/5/2024) / [granuribe50]
Había poca gente esta mañana y pocos bañistas, a diferencia de aquellos domingos de nuestra infancia.
Playa de Castelldefels (21/5/2024) / [granuribe50]
¡Uf, sí, qué diferencia! Sigamos. Acabado el baño, ese rato en que nuestro padre —'Tirano'— disfrutaba como un enano, hecho un gamberrete, lanzando balonazos a lo que llamaba "cachalotes", íbamos a comer a un chiringuito, hoy desaparecido. Allí nos proporcionaban mesa, bebidas y la infraestructura necesaria (platos, vasos, "forquillas", etc.). Era entonces cuando aparecía en escena la mágica nevera conteniendo una maravillosa ensaladilla rusa con atún "El Asalmonado" y filetes empanados. Quizá de entonces le viene a G.U. su afición por las susodichas ensaladillas. Le gustan todas, incluso las malas.
Playa de Castelldefels (21/5/2024) / [granuribe50]
Esos chiringuitos ya no existen, pero, aún así, G.U. tenía ganas de tomarse una cervecita teniendo como fondo el horizonte azul de la playa de Castelldefels. Como ya han puesto en pie estas estructuras desmontables preparadas para la temporada estival, allí encontramos una que parecía adecuada.
Playa de Castelldefels (21/5/2024) / [granuribe50]
¡Ah! ¡Qué bien se estaba esta mañana! Con las mismas nubes de siempre sobre el Garraf, la brisa, esa temperatura suave y la misma luz de entonces, sesenta años después... Una ojeadita de cuando en cuando hacia el horizonte marino, sin olvidar la cerveza, las patatitas y las aceitunas...
Playa de Castelldefels (21/5/2024) / [granuribe50]
La verdad es que había ganas de esto, después de varios meses que están siendo un tanto oscuros, sin entrar en detalles que no vienen al caso. El caso, valga la redundancia, es que a este bloguero le sigue encantando esta especie de locus amoenus al que acude en cuanto puede (menos de lo que quisiera).
Playa de Castelldefels (21/5/2024) / [granuribe50]
Ya de vuelta a casa, un último vistazo al horizonte y al cielo, salpicado de esas cometas multicolores de los flysurfistas; hacía algo de brisa y esa gente la aprovecha. Nos gusta ver esas cometas surcando el cielo, aunque aquello no existiera entonces...

12 comentarios:

  1. Es la misma de El Prat. La veo casi cada día, pues me llego hacia allí en una caminata de siete kilómetros.
    El agua está limpia, es de agradecer, y ahora ya vienen las tortugas a anidar.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, es la misma. Mide tropeientos kilómetros de largo.
      Un abrazo.

      Eliminar
  2. Qué suerte tener cerca esa playa. Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Conste, Susana, que no lo he hecho para hacerte los dientes largos. Besos.

      Eliminar
  3. Tiene buen aspecto,alquile para un año un apartamento en el apeadero, a finales de los sesenta,la cantidad de coquinas que cogía con el rastrillo, para la paella.Debe estar prohibido ahora.
    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Nosotros también nos panteamos en alguna ocasión hace años alquilar algo por allí, pero se nos pasó el arroz con coquinas.
      Saludos.

      Eliminar
  4. Madrid es bastante cargante para vivir, pero me gusta. Hay gente de todas partes y nadie menosprecia a nadie por el lugar de donde viene. La ciudad tiene buena vida cultural, buenos museos y tiene el Retiro. Es animada. Hace frío pero es seco. Ahora bien, esos que tenéis vosotros, el mar a tiro de piedra, no lo tenemos y eso lo echo en falta muchísimo. Me dan cierta envidia esas fotografías, con esa línea del mar tan azul.
    Muchas gracias.
    F.G.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me gusta mucho Madrid, eso es un secreto a voces. Pero, salvo cuando he tenido que ir por algún evento familiar negativo, siempre he estado de turismo y, claro, se ve todo de otra manera. En cuanto a las fotos, no las he puesto con ánimo de darte envidia, sino que lo he hecho para fijar recuerdos antiguos y para que esas imágenes estén en alguna parte visible y no solo en una carpeta del ordenador.
      Muachas gracias a ti.

      Eliminar
  5. De pequeño había ido muy pocas veces a Castelldefels, para mí era un lugar casi desconocido, ahora voy algunas veces, paseo y me gusta mucho, naturalmente protegiendo mi extraordinaria cabellera de color calvicie.
    Salud.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo desde pequeño. Íbamos durante un par de meses toda la familia a la playa, como explico en el texto. Entonces el sol me daba igual. Pensaba que me protegía la Nivea, pero se ha demostrado que no era así. Dicen que "la piel tiene memoria" y ahora padezco las consecuencias. Como tengo un problema capilar similar al tuyo y ya es tarde para acudir a la clínica de un futbolista llamado Cristiano Ronaldo (que imagino que no sabes quién es), siempre voy con gafa oscura y gorro.
      Saludos.

      Eliminar
  6. Soy fan de la playa de Castelldefels, a donde he ido unos cuantos veranos en los últimos dieciocho años (en estancias de entre siete y catorce días de duración) y alternando con otros destinos. Me gusta más el turismo cultural, pero unos días de descanso allí me saben siempre muy bien. Además de los días de playa, me ha servido para hacer salidas a Barcelona, Sitges, la Colonia Güell, Sant Joan Despí, Carmona, Montserrat y alguna más que me dejo. Su paseo marítimo es parte de mi vida, adulta en este caso. Y aunque ir a Cataluña significa tener que ver a algún que otro plasta de la estelada, no es Castefa el peor sitio en este aspecto precisamente.
    Mateo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mira, Mateo, me gusta Castelldefels, y esas playas que viví ya desde pequeño y adolescente, que no han cambiado mucho desde entonces, aunque desaparecieron los chiringuitos que frecuentábamos. Pero mantiene un cierto aire "de época", como anticuado, y eso me encanta. Tanto es así que siempre he pensado tomar una semanita o así e irme a un hotel y así estar desde la mañana a la noche; a todas horas me gusta aquello, pero siempre hay que mirar el reloj y volver a casa. Pero no encuentro hotel ni apartamento adecuado. Soy muy torpe en eso.
      Saludos.
      https://granuribe50.blogspot.com/2016/04/recuerdos-del-bar-marin-en-castelldefels.html

      Eliminar