sábado, 27 de mayo de 2023

Hoy hay trabajo: reflexionar (y descartar)

A G.U. le pilla ahora en Ibiza y se ahorra dos cargas, la de reflexionar hoy y la de mañana, pero no la pesadilla de luego (las valoraciones). No votó por correo; no le gusta mucho ese sistema, le daba infinita pereza hacerlo y estaba indeciso.
Viñeta de El Roto (24/5/2023)
Viñeta de Flavita Banana (27/5/2023)

8 comentarios:

  1. Lo que hay que agradecer hoy es el silencio, los rebuznos han cesado durante dos días. Ahora, el lunes, echémonos a temblar, se abrirá el concurso de disparates a cuenta de los resultados.

    Saludos

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    1. Las ruedas de expertos y de políticos de todo pelaje valorando los resultados. Eso durará varios días o semanas...
      Saludos

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  2. Como jovencitas, este no me gusta por la nariz. Aquel es bajito, el otro un pesado...
    Saludos

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    1. La verdad es que no he encontrado a ninguno suficientemente atractivo para mí.
      Saludos

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  3. Y además...todos son más feos que el Suarez, ese si que era guapo ¡

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    1. Y Sánchez ¿qué?, el que "está encantado de conocerse", como sueles decir...

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  4. Mi calle está en obras, la convierten en un eje verde, apenas se puede pasar entre los trastos de las obras, la maquinaria, el polvo, el acopio de materiales; todo está hecho una desgracia urbana desde hace dos años (media legislatura municipal), no podré salir a la calle y no podré ir a votar por culpa de ellos, así que se lo confiten: el voto, los ejes verdes, la pacificación de la calle, la estética del palet y todo este desbarajuste ciudadano.
    Salud

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    1. Te comprendo perfectamente. ¡Peligro con las pacificaciones! Lo raro es que Colau no las haya acabado la semana antes de las elecciones, después de dos años armando ruido, polvo y provocando todo tipo de incomodidades, que han obligado a muchos comercios a bajar la persiana. Plantan cuatro hierbajos en las jardineras amarillas, se cargan los chaflanes de Cerdà, pintan de muchos colorines el asfalto (siguiendo unos códigos abstrusos), ponen cuatro paralelepípedos de hormigón para sentarse (sin respaldo), etc. Resultado: se llena de bicis, patinadores y patinetes y el peatón al final tendrá que caminar cauteloso para no acabar descalabrado, y abriéndose paso entre terrazas de bares llenas de tipos vociferantes, lugares que irán surgiendo poco a poco, sin prisa pero sin pausa, ya que es uno de los pocos negocios que parecen viables en los locales que cerraron. Haces bien en marchar de aquí de cuando en cuando.
      Saludos.

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