La escapada se acabó

Un gallinero de piedra de mediados del S.XV, situado en el crucero de la catedral, alberga un gallo y una gallina vivos, en conmemoración del peregrino del que hablábamos el otro día, acusado de robar una copa. Los van renovando.

Este asunto del gallo ha sido objeto de representación en múltiples bibelots que se venden en la catedral de Santo Domingo de la Calzada (los mercaderes del templo, como decía J.C.). En el resto de la ciudad, no tanto, porque no se han dedicado a explotar masivamente todo esto del camino como han hecho en otros lugares. Especial atención ha suscitado en Gran Uribe el gallo que va vestidito de futbolista del Athletic de Bilbao, naturalmente. El del Barça, menos.

El gallo y la gallina en la catedral de Santo Domingo de la Calzada / Merchandising en la tienda de la catedral, con predominio del gallo
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Folleto turístico de Santo Domingo de la Calzada

Pues bien, esto se acabó. Abandonamos con cierta nostalgia este agradable lugar del Camino, en la que uno se ha sentido como un obispo, la verdad. Y ahora, a cuidar la creciente tripa. Una última imagen de recuerdo, tomada desde la cuneta...

Alrededores de Santo Domingo de la Calzada / [granuribe50.blogspot.com.es / (14/9/2016)]