Gustavo Torner y el Museo de Arte Abstracto de Cuenca
Ayer falleció Gustavo Torner a los cien años de edad. DEP. Sin él, el museo del que hablaremos no existiría.
El Museo de Arte Abstracto de Cuenca nació como consecuencia del espíritu coleccionista de Fernando Zóbel (Manila, 1924-Roma, 1984), un pintor de gusto exquisito y entrenado, con vastos (que no "bastos") conocimientos artísticos. Siempre creyó que el arte abstracto español estaba a la altura de lo que se hacía en otros sitios por entonces y que merecía un buen museo para exponerlo.
Reunión preparatoria: Zóbel, Gerardo Rueda, José Guerrero, Gustavo Torner, etc. en casa de éste (1966) [Fotografía: Eric Schaal]
Tras varios escarceos y muchas reuniones, el museo que imaginaba Zóbel recaló finalmente en Cuenca en 1966, porque éste no estuvo solo en su empeño. Conoció a Gustavo Torner, que nació allí en 1926, con el que compartía similares inquietudes culturales y que tenía entonces cierto enchufe en el Ay Untamiento, al que pertenecían aquellas Casas Colgadas. [Fraga Iribarne no sabía nada del asunto].
Museo de Arte Abstracto, en las Casas Colgadas y Hoz del Huécar / [granuribe50 (19/7/1998)]
En 1965, Gustavo Torner abandonó la ingeniería forestal y se dedicó en exclusiva a las artes plásticas. Él fue quien dio forma al edificio, que nos gusta mucho y sorprende todavía por su singularidad y su belleza, que se extiende a través del abismo de los ventanales que dan a la Hoz del Huécar.
G.U. en el Museo de Arte Abstracto de Cuenca / [Doña Perpetua (19/7/1998)]
Es un museo estupendo, situado "en un marco incomparable" (como se suele decir), con preciosas vistas a la Hoz del Huécar. En él están representados todos los artistas del grupo "El Paso" (Millares, Canogar, Saura, Viola, Feito, Chirino...) y otros muchos (Zóbel, Torner, Rueda, Sempere, Guerrero, Palazuelo, Tàpies, Mompó, Oteiza, Chillida, etc.). Se lo recomendamos muy vivamente, aunque no entiendan ni jota de arte abstracto (G.U. tampoco es un experto, ni falta que hace serlo, ojo al dato).
La pequeña Cuenca (y me estoy refiriendo sólo a su casco histórico) es una de las ciudades más bonitas de España. Su ubicación singularísima y su buena conservación la hacen digna de una visita tranquila. Andar por esas calles al atardecer o al anochecer, cuando hay pocas personas por las mismas, te hace sentir bien y en paz. Al escribir esto, estoy recordando la segunda de mis visitas, hace menos de un año, y me obliga a dar un pequeño consejo: hay que ir a Cuenca. Yendo al tema de la entrada, diré que en la anterior visita, hace unos años, estuvimos en el museo de Arte Abstracto. Mi cierta vocación cultureta me empujó a verlo, pero la abstracción pura se me hace muy difícil. Puedo pasar ciertas composiciones en las que hay cierto equilibrio entre formas y colores, pero cuando se vuelven agresivas, dejan de gustarme (por ejemplo, la obra de Antonio Saura, el hermano del cineasta, aunque no sé cuál de los dos es más "importante"). No obstante, como el museo está dentro de las Casas Colgadas, que todos los de la EGB vimos en nuestros libros, salí satisfecho. Y no deja de tener gracia que una ciudad tan concreta tenga tanta relación con el arte más inconcreto. Mateo.
Conozco bastante Cuenca. He estado paseando por sus calles, en algún concierto de las Semana de Música Antigua y of course en el Muso de Arte Abstracto varias veces. De Cuenca me gusta todo menos el gazpacho manchego, que pedí una vez en un restaurante. Me desagradó por su extrema pesadez, a pesar de que me hizo entrar en calor de modo súbito (era abril). El director de orquesta Ros Marbá, que cenaba en la mesa de al lado, tambien se quedó un poco sorprendido y creo que ni lo probó. En cuanto a Antonio Saura, me gusta, pero creo que me gustaba más la Brigitte Bardot original de carne y hueso que la de Saura. [img]https://bitacoraserrantes.com/wp-content/uploads/2017/06/dsc_0128.jpg[/img] [img]https://encrypted-tbn1.gstatic.com/images?q=tbn:ANd9GcQWWfrWORtXrf9tRFWkRoQQq1fsnFdUGCmOtLxKTIrNoKm4VPG5aiKyjps-tjz2LVVr-2aH1zRJmtwGsRGgWQcCvw8Q4HoruQO7i8ZKcvE[/img]
Lo escuché en el 24H, Gran Uribe. Es un museo imprescindible, porque además es detalladísimo, cosa que a los noveles como mi caso es de gran ayuda. Allí está representado lo mejor de lo mejor, y tener obra en ese recinto es lo que desea todo gran artista. Gracias por recordarlo. Salut
Me gusta mucho ese museo, allí está de lo mejor del Abstracto español de los sesenta, por entonces muy prolífico. Además, está situado "en un marco incomparable", como se suele decir. Espero que no me lo intenten arreglar y me lo fastidien. Estoy muy escaldado y no me fío nada del contubernio entre munícipes y arquitectos cuando van "en comandita". Gente peligrosa. Saludos.
La pequeña Cuenca (y me estoy refiriendo sólo a su casco histórico) es una de las ciudades más bonitas de España. Su ubicación singularísima y su buena conservación la hacen digna de una visita tranquila. Andar por esas calles al atardecer o al anochecer, cuando hay pocas personas por las mismas, te hace sentir bien y en paz. Al escribir esto, estoy recordando la segunda de mis visitas, hace menos de un año, y me obliga a dar un pequeño consejo: hay que ir a Cuenca.
ResponderEliminarYendo al tema de la entrada, diré que en la anterior visita, hace unos años, estuvimos en el museo de Arte Abstracto. Mi cierta vocación cultureta me empujó a verlo, pero la abstracción pura se me hace muy difícil. Puedo pasar ciertas composiciones en las que hay cierto equilibrio entre formas y colores, pero cuando se vuelven agresivas, dejan de gustarme (por ejemplo, la obra de Antonio Saura, el hermano del cineasta, aunque no sé cuál de los dos es más "importante").
No obstante, como el museo está dentro de las Casas Colgadas, que todos los de la EGB vimos en nuestros libros, salí satisfecho.
Y no deja de tener gracia que una ciudad tan concreta tenga tanta relación con el arte más inconcreto.
Mateo.
Conozco bastante Cuenca. He estado paseando por sus calles, en algún concierto de las Semana de Música Antigua y of course en el Muso de Arte Abstracto varias veces. De Cuenca me gusta todo menos el gazpacho manchego, que pedí una vez en un restaurante. Me desagradó por su extrema pesadez, a pesar de que me hizo entrar en calor de modo súbito (era abril). El director de orquesta Ros Marbá, que cenaba en la mesa de al lado, tambien se quedó un poco sorprendido y creo que ni lo probó.
EliminarEn cuanto a Antonio Saura, me gusta, pero creo que me gustaba más la Brigitte Bardot original de carne y hueso que la de Saura.
[img]https://bitacoraserrantes.com/wp-content/uploads/2017/06/dsc_0128.jpg[/img]
[img]https://encrypted-tbn1.gstatic.com/images?q=tbn:ANd9GcQWWfrWORtXrf9tRFWkRoQQq1fsnFdUGCmOtLxKTIrNoKm4VPG5aiKyjps-tjz2LVVr-2aH1zRJmtwGsRGgWQcCvw8Q4HoruQO7i8ZKcvE[/img]
Ufff....es que me quedo sin letras...(palabras)
EliminarLo escuché en el 24H, Gran Uribe.
ResponderEliminarEs un museo imprescindible, porque además es detalladísimo, cosa que a los noveles como mi caso es de gran ayuda.
Allí está representado lo mejor de lo mejor, y tener obra en ese recinto es lo que desea todo gran artista.
Gracias por recordarlo.
Salut
Me gusta mucho ese museo, allí está de lo mejor del Abstracto español de los sesenta, por entonces muy prolífico. Además, está situado "en un marco incomparable", como se suele decir. Espero que no me lo intenten arreglar y me lo fastidien. Estoy muy escaldado y no me fío nada del contubernio entre munícipes y arquitectos cuando van "en comandita". Gente peligrosa.
EliminarSaludos.