Dado que a los de JuntsxCatalunya (ex CiU) les adelantan por la derecha los de
Aliança Catalana (el partido fundado en Ripoll en 2020), han decidido desenterrar el hacha de guerra contra los andaluces, a los que —según ellos— los catalanes les pagamos todo: los vinos
finos en la taberna, el pescaíto frito y la siesta, como ya afirmaba Durán y Lérida. Ahora Tururull añade el perro y el gimnasio. Y ya se solicita que en Cataluña se retrasen una hora los relojes para diferenciarse del resto de España. "Si 200.000 catalanes nos cambiamos el horario, les acabamos obligando a distinguir entre el horario español y el catalán; hemos ganado, les hemos empezado a imponer nuestra propia forma de hacer".

Claro, los tiempos han cambiado, no conviene entrar en demasiado conflicto con
el PSOE-PSC, ya que aún le pueden sacar algo. Pero sí con el gobierno actual
andaluz del PP, que sufre un acoso similar a su derecha por parte de VOX. Nadie quiere perder a sus votantes. Y ha
surgido otro quilombo. Pero al PSOE no le interesa ese debate, en previsión de unas posibles elecciones en Andalucia. Estas frases de Tururull les
pillan con el pie cambiado y
Mariajezú se ha apreurado a negar lo que afirma ese sujeto.
Los tiempos están cambiando, cantaba Bob Dylan. Varios de los protagonistas de aquello han
chupado trullo y se les ve poco entusiasmados. Cuando uno echa
la vista atrás comprende que no desearía para nada que se reprodujera lo de
hace unos años. Hoy "celebramos" el 1-O, octavo aniversario del mítico Referéndum de Independencia de Cataluña, aquel día en que M.R. acabó de
meter la pata con el crucero Piolín en el puerto y la Policía Nacional repartiendo estopa incluso a indefensas abuelitas para intentar reprimir aquel carajal. Unas imágenes que dieron la vuelta al mundo: un gran éxito del procés.
Cuántas locuras soportamos esos años, cuántas tonterías, en bastantes casos
por parte de gente seria. G.U. lo vivió con inquietud, pero no fue el
único, aunque muchos como él digan ahora que aquello no les preocupó en
absoluto. Si fue así, tuvieron más perspicacia que este bloguero.
 |
[granuribe50] |
El
rei Artur emulaba a Charlon Heston separando las aguas, al igual que Moisés, para que el pueblo catalán pudiera alcanzar al fin la tierra prometida. El Puchi proclamó la República catalana de los ocho segundos, para acto
seguido huir en un maletero, después de citar a sus
consellers a trabajar el
lunes. Y el que le siguió, Quim Torra, dedicado sobre todo a incentivar la quema de containers y el consumo sin tasa de un
brebaje infame; con razón fue nombrado
Confrare d´Honor de la Festa de la Ratafia.
 |
[granuribe50] |
Monjas desmelenadas exhibiendo esteladas. Curitas que colgaban las susodichas de los campanarios, emitían proclamas en las hojas parroquiales y
patrocinaban con toda seriedad votaciones en la iglesia durante la misa, en unas urnas compradas a
los chinos, cuya llegada el avispado CNI no supo detectar.
Los ricos lamentándose de que en España les roban. Hijos de papá ejerciendo de okupas (eso sigue vigente). Locutores de TeVen3
gritando "
Puta Espanya!" y otros que se forran gracias a ese canal, como Toni Soler y el gandul Antonio Baños, incitando a la masa
a quemar contenedores, mientras se tomaban ufanos su
gin tonic en el
chill out de Casa
Fuster.
Ya desde 2012, la masa desfilaba disciplinada con camisetas
amarillas y rojas, en admirables puestas en escena "a lo chino". Muchos de ellos pensaban que comerían helado de postre cada día. Qué decir de los frikis
protagonizando escenas extrañísimas. Una pandilla de delirantes sujetos,
encabezados por Víctor Cucurull y José Luis Espejo, escribían una Historia alternativa en la
que Leonardo da Vinci, Cervantes y Juan Sebastián Elcano eran catalanes (Leonard de Vinçà, Joan Miquel Servent y Joan Caçinera del Canós, repectivamente) y
El Lazarillo de Tormes fue escrito originalmente en catalán.
 |
[Institut Nova Història / granuribe50] |
Un juez jubilado, apellidado Vidal, redactaba con esmero
la nueva Constitución Catalana, puntualmente asesorado por miembros de la CUP. Mientras tanto, otros tipos programaban asaltar el aeropuerto y algún iluminado ya veía a la armada china en el puerto de
Barcelona para echar una mano en el asunto. Muchos empezaron a especular con un ejército catalán que contara con veinte mil soldados.
No están esas cosas puestas por orden
cronológico, pero qué más da. Todo eso y mucho más sucedió, y de todo eso quedó constancia en este blog para
historiadores del futuro. Aquí, algunas muestras más de lo que que publicamos
entonces. Los paisanos de G.U. perdieron el
seny en aras de la
rauxa. |
[granuribe50] |
Está claro que el nacionalismo extremo vuelve a la gente idiota. La endogamia identitaria es más peligrosa que la gripe aviar: mata las neuronas. Hay que seguir leyendo y viajando, que es muy sano para poner distancia con la estupidez.
ResponderEliminarSaludos.
Me imagino que viste desde lejos la que se armó aquí durante unos años. La intoleracoia y la idiotez campaba a sus anchas. Es cierto, leer y viajar son buenos antídotos contra la estupidez. Estoy bastanrte de acuerdo con esta frase:
Eliminar[img]https://encrypted-tbn0.gstatic.com/images?q=tbn:ANd9GcQuTssMxI1YonqMK2d_EklbFU6_lFf1k7_yfg&s[/img]
Pero, ojo, aquí había gente viajaba a otros lugares de España (también a Madrit) para comparar y poder decir som els millors, som collounuts y los demás... una mierda pinchada en un palo. He conocido algunos. Claro, no pueden reconocer que Madrid les haya gustado, ya que casi sería como decir que les gustan los Borbones, el Palacio Real y reconocer que la gente es, por lo general, acogedora sin pamplinas ni resquemores.
Saludos.
Y a mas de uno le escupieron en la cara dentro del ascensor de su casa por no llevar el lazo amarillo (color que odio) en la solapa, porque esa era otra, la gente, como los judíos en Mathausen, se significaba con el lazo. Si lo llevabas estabas exento del peligro, sino corrías el riesgo de que te insultaran, como fue mi caso.
ResponderEliminarSi estos mamarrachos hubieran ganado, de seguro hubiera tenido que emigrar de Barcelona antes de lo previsto. Yo, sin problemas, hubiera aplicado un 155 a lo Julio Anguita, con todo el intervencionismo del mundo, desde el primer momento, y un toque de queda que te cagas.
Salut
Eso que explicas, por suerte no pasó en mi escalera, aunque naturalmente los que llevaban ese aditamento en la solapa en seguida tomaban nota de si no lo llevabas o si no habías colocado en tu balcón la estelada o esas proclamas ad hoc que inventaron. Pero es algo que ha pasado en familias, en grupos de amigos, en institutos, en empresas, etc., llegando a establecerse una especie de cisma entre los que estaban del lado bueno de la Historia y los que quedábamos fuera, gente sospechosa. Hizo mucho daño aquello y no nos hemos recuperado.
EliminarSaludos.
Me alegro de no haberlo visto. Un beso
ResponderEliminarDe buena te libraste. Aquí muestro una antología muy limitada de las imágenes y de estupideces que soportamos a pie firme. Bueno, no siempre: los 11 de septiembre siempre me pillaba de viaje y el 1-O lo viví en Ibiza, huyendo siempre en esos casos de aquella turbamulta. Besos.
EliminarPor cierto, un detalle, uno de los tres que no llevábamos lazo (se celebraba reunión de escalera que acabó como el rosario de la aurora porque el administrador de la finca era el tercero en no llevarlo, y yo ya baje caliente del ascensor, uno de esos tres, digo, era gay.
ResponderEliminarDesde ese momento pasó a ser maricón por parte de las siete personas que si llevaban el lazo, a decir verdad eran seis porque una se mantenía al margen al ver que las cosas se iban de madre.
El administrador en cosa de diez minutos cerró aquella reunión y lo dejó todo igual que el año anterior, pero desde entonces y hasta hace tres años que marché de allí, las cosas jamás fueron igual entre los vecinos, porque estos hijos de mala madre se encargaron de romper la convivencia pacífica de una escalera que jamás había tenido problemas, y que a partir de entonces, todo fueron recelos y malas interpretaciones, con dos bandos muy diferenciados. ¿Quién perdió? Todos, y el edificio en sí, porque se tenían que hacer reformas que no se hicieron por falta de quorum y porque la gente no se hablaba.
No dejaría impune a ninguno de ellos, y además sin paga. Eso te lo aseguro.
Salut
De esta historia de lo que pasaba en tu escalera sabía algo, pero no con tanto detalle. ¡Qué situaciones tan desagradables! Estoy de acuerdo plenamente con tu última frase.
EliminarUn abrazo.
Y te voy a poner más referencias. Tres de las personas de la reunión, de las que llevaban lazo, tenían su balcón que daba a la calle, frente plaza Mistral (Alguer). Desde hacía una pequeña temporada soñaban con poner una senyera desde el sexto piso al primero, por la parte exterior del balcón, pero para eso debían pasar por el cuarto, y ese era mi balcón, a lo que yo me negué. Ni quería banderas, ni quería trapos que me quitaran el sol, ni me quería significar con el hecho en sí. Y de ahí todo.
EliminarCada uno puso el trapo más grande que pudo, pero en su balcón, y el mio quedó limpio y con sol.
Hoy, que han pasado ocho años, no hay ni señales de aquello, y nadie tiene ya una sola insignia en ningún lado.
Canetti llevaba razón, y en su libro "Masa y Poder", significa como se puede movilizar a la masa cual borregos. Sólo hay que prometer y decir que son diferentes al resto.
Un abrazo
Yo lo pasé muy mal y recordarlo con las fotos e información en tu blog me ha sumido de nuevo en la ansiedad que sentí en aquel momento, sobre todo porque sé que puede volver a pasar si ganara Vox las elecciones con el apéndice del PP -sería así-. Tuvimos ocasión de saber en qué país vivíamos y qué tipos de gente son sus ciudadanos patriotas. Parece mentira que ahora todo parezca pacificado y tranquilo, esperando de nuevo volver a las andadas en cuanto haya ocasión.
ResponderEliminarHace dos años montaron una caravana en Cornellà para recordar la citada fecha y en su recorrido recibieron piedras y objetos lanzados contra esta, además de insultos, que achacaron ¡cómo no! a los fascistas.
Hoy no me ha gustado tu entrada porque abre recuerdos muy angustiosos.
Saludos.
Siento que no te haya gustado. Recordar esas cosas no resulta agradable, pero sucedieron, yo las padecí (tú también) y me afectaron mucho. El blog del gran Uribe echaba humo con estos asuntos, pero siempre intenté tomarlo con cierto humor, que me ayudaba a soportar lo insoportable. Yo pienso que en esto no está mal hacer un poco de memoria histórica, aunque no guste recordarlo.
EliminarConviene estar alerta porque entre los que llevaron adelante aquello, los hay de dos tipos, en mi opinión. 1º) Los que ya se conforman con lo que hay, ir muñendo la vaca y obteniendo privilegios vía chantaje. 2º) Aquellos que tienen sueños húmedos de que se repita aquello. Lo que están deseando en el fondo (no lo confesarán nunca) es que gane las elecciones generales el PP (a ser posible con ayuda de Vox) y así poder volver a armar aquel carajal, que en el fondo añoran. Para muchos (bastantes ya fallecidos) quizá fueron los años más emocionantes de sus vidas.
Saludos.
A finales del siglo dieciocho había en la Tierra veinticinco naciones, a finales del diecinueve, cien, en dosmilquince rozamos las doscientas, pero, dentro de esas naciones, hay no menos de sesenta que aspiran a independizarse.
ResponderEliminarNo se pueden poner puertas al mar....
Ni al campo, o eso dicen. Saludos
EliminarAquello fue una desgracia, ahora quieren recordar la desgracia y quieren repetir. Creo que están más solos que la una y aún así se creen que son más que los demás. Esto tiene un nombre: supremacismo.
ResponderEliminarAquello fue la fiesta de unos consentidos hijos de papá que jugaban a ver quien la decía más gorda, la televisión local insultando e instigando, unos periodistas de medio pelo instigando también; un despropósito y una falta de responsabilidad histórica.
Hicieron mucho daño.
Salud.
Sí, aquello fue una desgracia que hizo mucho daño, en todos los sentidos posibles. Sin embargo, no descarto en absoluto que intenten repetirlo si llega al poder el PP, sobre todo si es en colaboración con VOX. Sería la coartada perfecta para volver a las andadas, porque yo creo que todavía hay rescoldos encendidos, mimbres para intentar hacer todavía un cesto y bastante mala leche acumulada.
EliminarSaludos.
Rajoy hizo el ridículo por muchas razones, no voy a exponer todas, pero la principal fue bailar al son que estos sinvergüenzas tocaban. Estos hechos volverán a repetirse con la próxima crisis económica, esperemos que al mando este alguien con más inteligencia. Artur Mas tiene que salir en helicóptero por la crisis económica y empieza el baile. Esto ya ha pasado y volvera a pasar.
ResponderEliminarUn saludo.