jueves, 4 de abril de 2024

Los vencejos ya llegaron. La nevera sigue aquí

Que por estos lares familiares barceloneses no estamos pasando buenos tiempos es un secreto a media voz. Por tanto, no hay ánimo ni para salir y solo nos consuela que hoy han llegado los vencejos, unas aves volatineras y pundonorosas que nos gustan. Llegan al cielo del patio a primeros de abril y se van a finales de agosto. Hace un rato lo sobrevolaban ufanos; parecen contentos de haber llegado, al fin. 


El caso es que como, a mayor abundamiento, tampoco andamos nada bien de los "piños", ahora las comidas consisten solo en alimentos triturados y cremas frías. Eso no nos impide frecuentar la cocina. Como G.U. andaba un poco aburridillo con la elaboración de estos suculentos menús, se ha dedicado a retratar el frontal de la nevera. Sí, ya sabemos. Dicen algunos arregladores de frigoríficos que cuantos más imanes le pongamos, más perjuicio para el motor del aparato. Más se cansa y peor trabaja.
 
¡Ostras! Si fuera así, nuestra nevera durará "dos telediarios". Ya lleva 20 años "plenamente operativa" (espero que dure otros 20, y nosotros que lo veamos), con imanes, aunque quizá no tantos como ahora: cada vez que viene alguien de Nueva York o de Londres, tenemos otro "Edificio Chrysler" o las cabinas de teléfono, más los que nos regalan de otros lugares y los que compramos en las tiendas de los museos. Algunos bibelots los hubiéramos quitado ya, pero no hay manera de desengancharlos.

Entre los que no queremos suprimir, están los de pintores conocidos, como Fantin Latour, Velázquez, De Chirico, Juan Gris, Kandinsky, Escher, Warhol o Antonio López. Y otros que lo son bastante menos, tales como Sofonisba Anguissola, Valentín de Zubiaurre, Torné Esquius, etc. A Gaudí ni está ni se le espera, no porque no nos gusten muchas de sus obras; nos empalaga un poco la parafernalia alusiva, en forma de trencadís, dragoncitos y chimeneas, que invade las tiendas de souvenirs en Barcelona.

13 comentarios:

  1. En mi tierra ,
    llamamos
    aguilillas a
    los vencejos,
    la nevera muy
    de calidad ,
    y artistica .

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    1. No conocía esa denominación.Yo algunos pins los quitaría, pero no se puede; salta solo la imagen y el imán se queda enganchado y queda muy cutre.

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  2. No tengo de esos imanes,mis nietos han salido artistas como su abuela y me regalan dibujos, acuarelas y trabajos manuales.
    Saludos

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    1. A mí me alegran la cocina, aunque supongo que Francesc Cornadó se llevaría las manos a la cabeza y se le pondrían los pelos como escarpias.
      Saludos.

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  3. El mejor de todos ellos....el de la parte central inferior del portal de la nevera...por cierto..lleva una camiseta del Atletic ¡¡¡ o Atlético de Bilbao, que diría Simeone.
    Un abrazo

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    1. Mañana contra el Mallorca "nos jugamos el ser o no ser", por aplicar terminología de periodistilla deportivo.
      Un abrazo.

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  4. Las neveras de antes duran para siempre incluso con imanes. Un beso

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    1. Sí, pero desde que inventaron lo de la "obsolescencia programada" se acabó... POr ejemplo, las impresoras:, ya he tenido que cambiarlas varias veces. Besos.

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  5. ¿Y cómo se llamará a este fenómeno de los imanes artísticos? ¿Arte frigorífico? El otro día me compré dos imanes de Marc Chagall en una exposición en Barcelona en el Palau Martorell.

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  6. [img]https://arthive.com/res/media/img/oy800/work/40a/271819@2x.jpg[/img]

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    1. No estaba enterado de esa exposición. "Au dessus de la Ville", un hermoso cuadro. Y buen imán para el frigorífico o cualquier sitio metálico.

      «Di que querías ser caballo esbelto, nombre
      de algún caballo mítico,
      o acaso nombre de tristán, y oscuro.
      Dilo, caballo griego, que querías ser estatua desde hace diez mil años,
      di sur, y di paloma adelfa blanca,
      que habrías querido ser en tales cosas,
      morirte en su substancia, ser columna.

      Di que demasiadas veces
      astrolabios, estrellas, el nervio de los ángeles,
      vinieron a hacer música para Rilke el poeta,
      no para tus rodillas o tu alma de muro.

      Mientras la marihuana destila mares verdes,
      habla en las recepciones con sus lágrimas verdes,
      o le roba a la luz su luz más verde,
      te desconoces, te desconoces».

      [Blanca Andreu; De una niña de provincias que se vino a vivir en un Chagall, poema que abre el libro].

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  7. El de Chirico me ha recordado inevitablemente al Arengario milanés del que hablábamos el otro día. Arquitectura a derecha e izquierda y fuga al fondo por el centro.
    Un saludo futbolístico, aunque por tierras de Bilbao se está al borde del éxtasis, que puede explosionar mañana. Cuatro décadas de ganas contenidas sin un trofeo digno de tal nombre hacen que se haya perdido un poco el norte (aquí, en el norte).
    Mateo.

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  8. Sí, recuerda a lo que comentabas el otro día, un lugar más que solo conozco por foto..
    [img]https://citynews-milanotoday.stgy.ovh/~media/horizontal-mid/47216484297058/museo-del-novecento-2.jpg[/img]
    Muy chulitos andan por el norte, ya lo sé, ya. Yo... no tanto. "FÚTBOL ES FÚTBOL", como decía con acierto un sujeto llamado Vujadin Boskov. Creo que estoy preparado para lo peor.

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