Que por estos lares familiares barceloneses no estamos pasando buenos tiempos es un secreto a media voz. Por tanto, no hay ánimo ni para salir y solo nos consuela que hoy han llegado los vencejos, unas aves volatineras y pundonorosas que nos gustan. Llegan al cielo del patio a primeros de abril y se van a finales de agosto. Hace un rato lo sobrevolaban ufanos; parecen contentos de haber llegado, al fin.
El caso es que como, a mayor abundamiento, tampoco andamos nada bien de los
"piños", ahora las comidas consisten solo en alimentos triturados y cremas
frías. Eso no nos impide frecuentar la cocina. Como G.U. andaba un poco
aburridillo con la elaboración de estos suculentos menús, se ha dedicado a
retratar el frontal de la nevera. Sí, ya sabemos. Dicen algunos arregladores
de frigoríficos que cuantos más imanes le pongamos, más perjuicio para el
motor del aparato. Más se cansa y peor trabaja.
¡Ostras! Si fuera así, nuestra nevera durará "dos telediarios". Ya lleva 20
años "plenamente operativa" (espero que dure otros 20, y nosotros que lo
veamos), con imanes, aunque quizá no tantos como ahora: cada vez que viene
alguien de Nueva York o de Londres, tenemos otro "Edificio Chrysler" o las
cabinas de teléfono, más los que nos regalan de otros lugares y los que
compramos en las tiendas de los museos. Algunos bibelots los hubiéramos
quitado ya, pero no hay manera de desengancharlos.
Entre los que no queremos suprimir, están los de pintores conocidos, como
Fantin Latour, Velázquez, De Chirico, Juan Gris, Kandinsky, Escher, Warhol o
Antonio López. Y otros que lo son bastante menos, tales como Sofonisba
Anguissola, Valentín de Zubiaurre, Torné Esquius, etc. A Gaudí ni está ni se
le espera, no porque no nos gusten muchas de sus obras; nos empalaga un poco
la parafernalia alusiva, en forma de trencadís, dragoncitos y chimeneas, que
invade las tiendas de souvenirs en Barcelona.
En mi tierra ,
ResponderEliminarllamamos
aguilillas a
los vencejos,
la nevera muy
de calidad ,
y artistica .
No conocía esa denominación.Yo algunos pins los quitaría, pero no se puede; salta solo la imagen y el imán se queda enganchado y queda muy cutre.
EliminarNo tengo de esos imanes,mis nietos han salido artistas como su abuela y me regalan dibujos, acuarelas y trabajos manuales.
ResponderEliminarSaludos
A mí me alegran la cocina, aunque supongo que Francesc Cornadó se llevaría las manos a la cabeza y se le pondrían los pelos como escarpias.
EliminarSaludos.
El mejor de todos ellos....el de la parte central inferior del portal de la nevera...por cierto..lleva una camiseta del Atletic ¡¡¡ o Atlético de Bilbao, que diría Simeone.
ResponderEliminarUn abrazo
Mañana contra el Mallorca "nos jugamos el ser o no ser", por aplicar terminología de periodistilla deportivo.
EliminarUn abrazo.
Las neveras de antes duran para siempre incluso con imanes. Un beso
ResponderEliminarSí, pero desde que inventaron lo de la "obsolescencia programada" se acabó... POr ejemplo, las impresoras:, ya he tenido que cambiarlas varias veces. Besos.
Eliminar¿Y cómo se llamará a este fenómeno de los imanes artísticos? ¿Arte frigorífico? El otro día me compré dos imanes de Marc Chagall en una exposición en Barcelona en el Palau Martorell.
ResponderEliminar[img]https://arthive.com/res/media/img/oy800/work/40a/271819@2x.jpg[/img]
ResponderEliminarNo estaba enterado de esa exposición. "Au dessus de la Ville", un hermoso cuadro. Y buen imán para el frigorífico o cualquier sitio metálico.
Eliminar«Di que querías ser caballo esbelto, nombre
de algún caballo mítico,
o acaso nombre de tristán, y oscuro.
Dilo, caballo griego, que querías ser estatua desde hace diez mil años,
di sur, y di paloma adelfa blanca,
que habrías querido ser en tales cosas,
morirte en su substancia, ser columna.
Di que demasiadas veces
astrolabios, estrellas, el nervio de los ángeles,
vinieron a hacer música para Rilke el poeta,
no para tus rodillas o tu alma de muro.
Mientras la marihuana destila mares verdes,
habla en las recepciones con sus lágrimas verdes,
o le roba a la luz su luz más verde,
te desconoces, te desconoces».
[Blanca Andreu; De una niña de provincias que se vino a vivir en un Chagall, poema que abre el libro].
El de Chirico me ha recordado inevitablemente al Arengario milanés del que hablábamos el otro día. Arquitectura a derecha e izquierda y fuga al fondo por el centro.
ResponderEliminarUn saludo futbolístico, aunque por tierras de Bilbao se está al borde del éxtasis, que puede explosionar mañana. Cuatro décadas de ganas contenidas sin un trofeo digno de tal nombre hacen que se haya perdido un poco el norte (aquí, en el norte).
Mateo.
Sí, recuerda a lo que comentabas el otro día, un lugar más que solo conozco por foto..
ResponderEliminar[img]https://citynews-milanotoday.stgy.ovh/~media/horizontal-mid/47216484297058/museo-del-novecento-2.jpg[/img]
Muy chulitos andan por el norte, ya lo sé, ya. Yo... no tanto. "FÚTBOL ES FÚTBOL", como decía con acierto un sujeto llamado Vujadin Boskov. Creo que estoy preparado para lo peor.