Ramón Gutiérrez, "Ramón". En una época en que no era fácil hacer bromitas, fue un gran humorista. Apenas lo recordamos ahora, ya que estuvo eclipsado por aquellas figuras legendarias; Forges, Chumy Chúmez, Ops (El Roto), Mingote, Summers o incluso Gila, que no solo hacía monólogos al teléfono.
"Ramón" fue un tipo que trabajó en HERMANO LOBO, mediada la década de los
setenta. Se publicaron bastantes portadas suyas. No siempre ponía tildes en los "bocadillos", pero solo era un recurso más.
Como quizá sepan, G.U. está empezando ya a estudiar el primer curso de la carrera de
"Carcamal" (tardará en acabarla, esperemos). Ahora le ha dado por recordar
revistas, como la antes citada, que hicieron una buena labor en los estertores
del franquismo. Un poco de humor para acabar el "finde".
Una semana salió una portada con un huevo de una gallina, que decía así: Este es el huevo de Colón. Nadie entendió nada.
ResponderEliminarA la otra semana la portada decía lo siguiente: Y este el otro huevo.
Detrás, siempre Álvaro de Laiglesia, caballero de la División Azul, y nadie, nadie se metía con él.
Recuerda el del basurero recogiendo curas y metiéndolos en el carro de la basura bajo el lema: Mantenga limpia España ¡
Un abrazo
Es bastante famoso el jeroglífico que publicó la Codorniz en portada, por el que secuestraron la edición. A ver si lo "decodificas", Miquel.
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Estoy espeso...
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EliminarMe he reído un buen rato, con sonrisa sana de aquellos tiempos, que éramos tan jóvenes e inocentes, no sabíamos lo que vendría después .
ResponderEliminarSaludos.
Éramos jóvenes, éramos inocentes, vivíamos mucho aquello, pensábamos que con la democracia se acabarían nuestros problemas, casi casi que comeríamos helado de postre cada día, como prometían cuarenta años después los del "procés". Pasaron los años, llegó el pujolismo, llegó el GAL, llegó Aznar, Zapatero, el tripartit, Rajoy, el "procés" y... "Su Sanchidad," que arreglará todo y nos hará convivir como buenos hermanitos.
EliminarAl margen de la política, recuerdo, por ejemplo, cuando llegaron las televisiones privadas. Llegamos a pensar que ¡al fin!, con la competencia espabilaría la televisión pública, que se haría mucho mejor, y todas las cadenas se beneficiarían y, de paso, los televidentes también. Llegó la televisión basura (las "mamachicho" fue una incursión previa muy preocupante), las cadenas emiten esa basura sin pudor alguno, están todas controladas por poderes "fácticos" y uno tiene que aferrarse a otro negociete: las televisiones de pago para escaparse de la otra.
Saludos.
Desgraciadamente no conocía a este humorista, me quedan muy alejados casi todos los que nombras, sin embargo recuerdo que mi padre estaba subscrito a la Codorniz que creo era semejante a Hermano Lobo, al que solo conozco de oídas, como otro más reciente "El jueves" que no se si existe aun. Sus narizotas me recuerdan a las de los dibujos de Forges, Mingote era más detallista, sus dibujos eran mucho más elaborados, aunque en agudeza ambos estaban a la par.. como parece lo estaba tb este Ramón tuyo.. mil gracias por dárnoslo a conocer y por la sonrisa ... que es cierto, buena falta nos hace.
ResponderEliminarOootro abrazo grande y buena semana!!
Bueno, María, es que tú eres muy joven comparada conmigo, que estoy empezando a cursar la carrera de «Carcamal», con acreditado aprovechamiento por cierto. En la época en que estaba en boga esa revista (HERMANO LOBO), en los círculos en que yo me movía (el de gente como yo a la que los padres les pagaban la carrera, con mucho esfuerzo por su parte), existía "preocupación cero" (Bolaños dixit) si las facultades estaban seis meses cerradas por decisión gubernamental a causa de los disturbios estudiantiles. Aprovechábamos ese tiempo para estudiar mucho en casa y para hacer otras cosas.
EliminarAhora nos quejamos de la indolencia de los zagales de hoy en día, pero debo reconocer que en mi entorno no era preocupación máxima entonces la de estudiar, la de sacarse los cursos adelante y la de ganarse la vida con el título obtenido con esfuerzo. Estudiábamos, no queríamos perder comba, pero lo más importante era sacarse la dictadura de encima. Se escuchaba todavía "Radio España Independiente" (que se emitía desde el telón de acero, no desde los Pirineos como pensábamos); el comunismo era el no va más, la panacea de todo; el espíritu de mayo del 68 se imponía también por aquí; se leían y veían con gran devoción los libros y las películas del neorrealismo español; se tomaban como la Biblia los editoriales de algunas revistas "progres" (ese término llegó después), como "Cambio 16" o "Triunfo"; se aclamaba a los cantautores que deslizaban alguna mínima frase un poco crítica (y críptica); se escudriñaba entre líneas las viñetas de las revistas "La Codorniz" y "Hermano Lobo" (como es la de los tres frascos y la piña que le muestro a Miquel, por la cual fue secuestrada, una viñeta que fue muy celebrada). Todo valía, todo, mientras se esperaba con cierta impaciencia la muerte del dictador, que no acababa nunca de irse al otro barrio. Lo que llegó después, cuando se fue, ya es otra historia; te hablo de entonces.
Un abrazo fuerte
¡Qué bien se vivía contra Franco! ¡Qué tiempos aquellos! Saludos.
ResponderEliminarY ¡qué razón tienes! Había una causa común que compartíamos todos, menos los franquistas (que eran muchos también, pero en regresión), aunque un poco de temor ante la incertidumbre de qué pasaría cuando muriera Franco. Por ejemplo, un tío mío aventuraba que tendrían que venir los "cascos azules" para apaciguar las cosas.
EliminarUn saludo