sábado, 24 de junio de 2023

LA "NOCHE MÁGICA" Y EL FUEGO PURIFICADOR

«PAISAJES DESPUÉS DE LA BATALLA»


Fotografía: Zowy Voeten
Ojo al dato: limpiar una playa no es como limpiar un callejón o una plaza: además de los envases, de las bolsas de plástico y de los "residuos" fisiológicos humanos, están el mar y la arena, que no se arreglan con un simple manguerazo

20 comentarios:

  1. La única solución responsable y cívica, ante la falta de contenedores, sería difundir que cada uno se llevara lo suyo encima, pero para esto hace falta educación ciudadana que no se imparte en las escuelas porque parece que educar para esto o para ceder el espacio en transportes a personas necesitadas, es anacrónico.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, llevarse lo de cada uno encima está bien, aunque difícil de conseguir. Pero entre tanto y aún así, dada la elevada temperatura del agua de mar y el alcohol ingerido, la manera más sencilla de vaciar la vejiga y el intestino grueso durante la fiesta es la de zambullirse en las tranquilas aguas mediterráneas y celebrar el solsticio de verano vaciando los colmados órganos de excreción en el mar. No uno ni dos individuos: ochenta mil en las playas de Barcelona.

      Eliminar
  2. Es curioso, le decía ayer a mi mujer(sentado en la terraza cenando),que cada vez hay menos cohetes la noche de San Juan. Ayer, sobre la una de la madrugada, apenas ya se sentían , así que nos fuimos a descansar. Creo que la culpa la tienen las fotos tan buenas que nos enseñas, la juventud ya no quiere verbenas, ni fiestas familiares, busca la playa y las flamas de Zacarias .Qué le vamos hacer.
    Cuando joven(en los sesenta),ya pasé varios sanjuanes durmiendo en la paya, pero sin fuego, bebiendo y disfrutando del agua del mar (que tiene otro sabor, de noche),eso que eran tiempos de dictadura. Desde luego, no dejábamos la playa en ese lamentable aspecto, claro que entonces no había tanto plástico ni papel a disposición. Pero por lo que sé, los servicios de limpieza, con sus medios técnicos, no tardan mucho en dejarla limpia.
    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Una cosa, ese tipo de foto tan horizontal y pegada al suelo, es engañosa en cuanto a la cantidad de basura no recogida, pero lo ideal es que hubiera suficiente contendores y nada en el suelo, pero eso sería el sueño de una noche de verano y más cuando es la de San Juan.

      Eliminar
    2. Ya hace tiempo que me llama la atención la escasez de petardos y cohetes durante la noche y en los días previos. Y es que los jóvenes parecen haberse decidido en masa por la moda de celebrar la verbena en la playa; ni terrazas, ni plazas ni leches.
      Es cierto que a la altura de la vista se ven superpuestas todas las bolsas de basura, botellas y envases varios, y puede que así parezcan muchas, pero haberlas, haylas. Quizá con un dron se verían más dispersas, no lo sé, pero la misión del periodista es hacer las fotografías allí donde está la gente, no desde el aire.
      Saludos.

      Eliminar
  3. Esto es una auténtica guarrada. Una sociedad capaz de ensuciar de esta forma da vergüenza. Y luego que hablen de respeto al medio ambiente, que hablen de civismo y que hablen de lo que les dé la gana, el caso es que esta suciedad es el reflejo de la mala educación. ¿Qué se enseña en las escuelas?, ¿qué mensajes de civismo transmiten los medios de comunicación?
    Salud

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mí también me da vergüenza, Francesc. Y esto va in crescendo.
      En la imágenes hay de todo: además de las montañas de basura ardiendo con su fuego purificador, tenemos entrañables tertulias entre vecinos, tiernas y románticas escenas de amor al amanecer, gentes solitarias paseando o durmiendo la mona, pero con el factor común de estar rodeados de mierda y no parecer importarles. Entre tanto, las sufridas brigadas de limpieza se esfuerzan para que al mediodía esté todo retirado y puedan llegar las hordas domingueriles a tomar el sol en la playa y un estimulante baño en las concurridas y cristalinas aguas, al más puro modo "Delta del Ganges".
      Saludos.

      Eliminar
  4. Somos lo que demostramos. Una mierda.
    Salut

    ResponderEliminar
  5. La noche igual es mágica, pero la mañana és una mierda. Cierto lo que dice Carlos, se tiran muchos menos petardos. Al lado de casa hay una tienda que vende petardos y hace unos años un mes antes de la verbena ya vendía petardos uy se oían cada día y el día de la verbena era el caos, el acabose, el desiderátum. Anteayer se empezaron a escuchar los primeros petardos, y ayer por la noche cuando me fui al sobre, a eso de las diez y media, apenas se oían ya. Supongo que el precio de los petardos hace desistir a mucha gente, o hay mucha gente que tiene perros. - Saludos.


    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tal como lo dices en tu primera frase. Y en lo de lo petardos, ya hace tiempo que lo observo. Pensé hace un par de años que era consecuencia de la crisis, la pandemia, todo eso. Ahora ya veo que el precio de los petardos y cohetes se debe de haber "disparado" y que quizá a muchos jóvenes ya no les entretiene ese modelo de fiesta familiar con iaios, padres, hermanos, vecinos de la escalera, etc, y prefieren irse a "disfrutar" de la noche y el amanecer en la playa.
      Saludos.

      Eliminar
  6. Uribe, ¿esas fotos las has hecho tú? Espero que no, porque imagino que, a no ser que seas muy madrugador, no has pasado la noche con el relente y rodeado de porquería. La verdad es que ver eso me deprime bastante. Me estimula más lo del "Estornino de Mozart" o "El vino del Estío".
    Muchas gracias.
    F.G.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No, no, Dios me libre de acercarme por allí. Están tomadas por fotoperiodistas de diferentes lugares, que encontré en twitter y en diarios digitales. Un punto deprimente, sí es, que le vamos a hacer...
      Muchas gracias a ti.

      Eliminar
  7. Creo que todos los comentarios anteriores expresan muy bien lo que pienso del asunto.
    El otro día le solté la bronca a un energúmeno que pretendía sacudir las alfombras del coche delante de mi portería. Aquel tipo me miró como si yo fuese marciano, me replicó como no podía ser menos, pero desistió de su idea.

    Durante la pandemia, se me llevaban los demonios al ver las aceras alfombradas de mascarillas usadas, cuando en mi barrio tenemos papeleras instaladas cada cincuenta metros.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En el suelo de nuestro patio cae de todo y hay que barrerlo continuamente. Lo tira la gente sin rubor alguno. Un vez que una vecina estaba sacudiendo su alfombra desde el piso de más arriba, nos contestó altanera: «¿Por qué os creéis que me compré el 2º piso y no el 1º?».
      Sí, lo de las mascarillas en mi barrio también pasa. De hecho, aún me las encuentro, aunque cada vez menos.
      Un abrazo.

      Eliminar
  8. Maaadre mía! ¡vaya desastre ha dejado en las playas de este país la noche mágica de San Juan! pero ..¡cómo podemos ser tan rematadamente cochinos! y luego ¡nos quejamos del desastre medioambiental planetario! que si los gobiernos no toman las medidas necesarias, que si el recalentamiento global es por la contaminación atmosférica de fábricas y vehículos .. pueees nooo, todo eso sucede porque ¡somos unos guarros! jajaja es absolutamente imperdonable que a estas alturas de la película la gente sea tan incivilizada.. que no es más limpio el que más limpia, si no el que menos ensucia… te juro que yo levantaba a todos los que están durmiendo la mona y a recoger toda la basura.. uno por uno y en fila india ; ) que encima pobres hombres de la limpieza!! como si tuvieran que recoger un vertedero y lo que tu dices ¡ pobre mar! En fin…este planeta tiene los días contados y será exclusivamente por nuestra culpa. .. de cada uno de nosotros y muy particularmente de todos estos que no saben para que son los contenedores y las papeleras : (

    Abrazo grande y cabizbajo ¡vaya desastre!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, María, ya lo dices, ¡pobres hombres de la limpieza!, que han de recoger penosamente y a toda leche lo que ensucian otros en una noche de desfase, mientras ellos curran en condiciones difíciles para que al día siguiente puedan seguir llegando a pasar el día y seguir ensuciando, aunque de manera más controlada.
      [img]https://pbs.twimg.com/media/FzYHfiBXoAYLPYG?format=jpg&name=large[/img]
      En cuanto al mar, nadie habla de eso, pero sé que hace unos días tuvieron que cerrar una playa de Barcelona porque estaba supercontaminada. Con que no sé cómo estará ahora. «Y luego ¡nos quejamos del desastre medioambiental planetario!». Pues eso.
      (Abrazo grande y cabizbajo).

      Eliminar
  9. La Noche de San Juan se ha convertido en una vulgar excusa para hacer macro botellón en las playas, y además hacerlo con “permiso oficial”.
    Leo que esta estampa de basura se ha repetido en buena parte del litoral español; en playas de Vigo, Cantabria (como la bonita playa de El Sardinero), en Cataluña, en el Levante, en Huelva, en Málaga, etc, etc.

    El tener contentos a los fiesteros de San Juan en las las playas y costas (ecosistemas frágiles), no puede sustentarse a cualquier precio… y este me parece demasiado caro. Los ayuntamientos tendrían que reflexionar sobre qué es más importante; si una noche de borrachera playera sin fin, o la salud de un ecosistema tan importante como la costa y la playa, tendrían que considerar cambiar el entorno de borrachera, o la forma de celebrarlo en la playa. Se ha visto a grupos de gente meterse en la playa con vasos de plástico y otros enseres, muchos de los cuales acaban engrosando la contaminación marina, y como bien apuntáis ahí vacían el vientre, vomitan y orinan.
    A día siguiente irán a faenar los pescadores de bajura, y nos comeremos unos “suculentos pescados marinados la mar de bien”, porque se han alimentado con una dieta de lo más "variopinta"... En algunos lugares comer “pescado fresco” se está convirtiendo en algo arriesgado para la salud.

    Buen verano, estimado G.U.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, Paco. Te deseo lo mismo. Ojalá sea así. Y comparto tus reflexiones al cien por cien.
      Las imágenes están tomadas en sitios muy diversos.
      [img]https://publicacionesdelsur.b-cdn.net/articulos/articulos-1020371.jpg[/img]
      No es ya ni Valencia ni Cataluña, donde lo de las hogueras y verbenas de San Juan estaban más arraigadas. Y no es ya solo el Mediterráneo. En el norte el agua está más fresca y la gente se zambulle a hacer sus necesidades sin problema alguno, ya que el alcohol ha de salir por alguna parte tras un "party" de ocho o diez horas. A mí esta deriva me inquieta mucho, porque no veo que sea fácil de revertir, ya que los ayuntamientos no quieren problemas ni motines. Como no sea que pase de moda y la gente se harte de pasar la fiesta entre la mierda, no le veo salida, pero me da a mí que no se hartará fácilmente.
      Buen verano, me gusta leerte (por cierto, los pájaros en el alambre de Miquel —"Birds on the wire", parafraseando a Leonard Cohen— seguro que son aviones comunes, has dado en el clavo...).

      Eliminar
  10. A ver, para que nos quedemos tranquilos, que el asunto está controlado y permitido por el Ayuntamiento, se trata de una noche al año, que al día siguiente entran poderosas máquinas, que remueven toda la arena(eliminando la posibilidad de restos de comida, enterrados) ,la arena queda limpia y saneada. Al día siguiente y los sucesivos la gente se baña y se tiende en la arena en perfectas condiciones sanitarias, periódicamente se hacen análisis de arena y agua.
    Pasa lo mismo en otras fiestas de España,fallas en Valencia,Semana Santa de Andalucia,San Fermín en Pamplona....
    Saludos.

    ResponderEliminar