lunes, 4 de junio de 2018

Sandrine Morel, Borrell y "el procés"

Leemos en la prensa algo que nos llama la atención, aunque ya intuíamos que se producía. Una manera de divulgar el procés en Europa parece ser que es la compra de páginas para publicidad en los periódicos con los dineros del Pepet i la Maria, como manera de captar la voluntad de la empresa y, por ende, de sus redactores. Se trata de algo que muchos pensamos que se hace con los diarios catalanes desde hace tiempo, pero Sandrine Morel deja caer, como quien no quiere la cosa, que también con los de fuera.

También afirma que la Generalitat tenía un hilo de whatsapp con todos los corresponsales extranjeros en Cataluña donde compartía todas las fake news (hubo muchas) y las informaciones favorables al separatismo. Y mientras tanto, Rajoy y Dastis fumando un puro y leyendo el MARCA de punta a rabo.

Confiemos en que el señor Borrell haga algo más que esos dos sujetos que acabamos de citar para contrarrestar un poco las mentiras que se han ido difundiendo con dinero de todos. Tendrá como opositor en esa función al locuelo Maragall... No sabemos cómo actuará el susodicho Borrell, pero el hecho de que el huido Fuigdemont y el indocumentado Rufián estén tan cabreados es un buen síntoma a priori. De momento, aquello de que vivimos en una dictadura franquista y que los jueces hacen lo que manda el gobierno ha quedado un poco desmontado con todo lo que ha sucedido en los últimos días, aunque ya inventarán otras triquiñuelas, en eso son maestros.
Pero veamos lo que explica El Periódico:


Sandrine Morel y "En el huracán catalán"
«El PDECat ofreció al diario francés 'Le Monde' poner publicidad en sus páginas a cambio de que hablara bien del proceso independentista. Así lo revela la corresponsal de 'Le Monde' en España, Sandrine Morel, en el libro 'En el huracán catalán' (editorial Planeta), en el que la periodista ha intentado reflejar "la visión de una persona que, sin ser española, ni catalana, ha asistido con tristeza y temor al crecimiento del odio dentro de una sociedad que hoy en día se encuentra terriblemente fracturada por un conflicto cuyas consecuencias aún resultan difíciles de valorar".

Sandrine explica la conversación que mantuvo en el bar de un hotel en Barcelona con un director de comunicación del PDECat en junio del 2017. "Hablamos en un tono informal, acerca del referéndum del próximo 1 de octubre. Le expongo mis dudas sobre su legitimidad, sobre las garantías que pueden ofrecerse en el caso de una consulta organizada unilateralmente, sobre las consecuencias que entrañará retar a Madrid", relata Sorel. Y prosigue: "Él se siente molesto ante mi escepticismo. Considera que que estoy siendo demasiado crítica con el independentismo.

Y me suelta una frase que me deja helada: 'Si compramos dos páginas de publicidad en 'Le Monde', escribirás lo que tus jefes te digan'.... Al ver mi indignación, me responde avergonzado: 'Bueno, así funcionan las cosas aquí'.


4 comentarios:

  1. La respuesta está dada:

    Bueno, así funcionan las cosas aquí...

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  2. No sé, la palabra "aquí" de la última línea me deja descolocado. ¿Se refiere a Cataluña? ¿Se refiere a España? La sorpresa e indignación de Sandrine parecen sugerir que en Francia las cosas no funcionan así, o bien, que, de funcionar así, ella no lo sabía. Yo debo de ser tan ingenuo como Sandrine y confieso que no se me había ocurrido esa posibilidad, y menos que un periódico tenido por serio como "Le Monde", pueda imponer a sus periodistas una línea de opinión basada en criterios exclusivamente mercantilistas.
    El Tapir

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  3. Antes decían que lo que no se podía soportar es que estuviera Rajoy. Que todo era por su culpa. Ahora resulta que no era solo eso. Que todos, excepto ellos, han contribuido a una escalada de odio en Cataluña. ¿Pero no decían que aquí la convivencia era fantástica?
    En cuanto a la publicidad en medios extranjeros, creo que hay que ser muy burro para no darse cuenta de que en el extranjero ya pasan de la cuestión catalana. Con la cantidad de problemas que hay. Yo veo cada día el telediario ("Tageschau") alemán y solo dicen lo indispensable, que muchas veces es nada. MJ

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    1. Y eso que tienen a Fuigdemón en Berlín.

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