Noviembre no ha sido un buen mes en esta casa. A lo de Barcelona, ya referido
en entradas anteriores, se añaden unas largas sesiones en el hospital de "Can
Misses", en Ibiza, por un tema familiar que no explicitaremos. Muchas horas y
malas experiencias en él, organizativas y de todo tipo, que tampoco
detallaremos. Desde allí tomamos dos imágenes con el "celular"; una por la
mañana y otra al atardecer.
|
Ibiza desde el hospital de "Can Misses" (25 de noviembre de 2024) /
[granuribe50]
|
La una, desde una de las ventanas de la 4ª planta del edificio "G", en la que se
puede ver
Dalt Vila a la derecha y a la izquierda un hermoso crucero, más
grande que la isleta que tiene al lado. Esos bichos son los que dan de comer a
la isla fuera de temporada, así que pocas bromas con ellos...
|
Ibiza. Hospital de "Can Misses" (23 de noviembre de 2024) /
[granuribe50]
|
Y la otra, desde la amplísima explanada de acceso, donde no han sido capaces de
poner ni un puñetero banco para sentarse. Por cierto, es un artilugio bastante
necesario cuando las esperas son largas y el ambiente interior no acompaña en
absoluto. Por suerte, hay dos jardineras que suplantan esa función.
Ahora estamos ya en la casa familiar, con el ancla echada. La salud no nos
acompaña tampoco ni a doña Perpetua ni a un servidor de ustedes. Es fácil
coger virus en ciertos ambientes hospitalarios. La idea, sin embargo es volver
a Barça, con pruebas médicas pendientes, y en Navidad otra vez para aquí. En
fin, ya se irá viendo, porque todo está pendiente de un hilo.
Pero ayer hubo un momento en que pudimos salir a ventilar un poco los pulmones
y la mente, y nada mejor en estos casos que ver un horizonte despejado en la
zona de las salinas. El mar azul, sobre todo cuando está tranquilo, siempre
nos serena, más que el azul del hospital, je, je. Allí, un poco más acá de su
famosa playa, se encuentran los restos de una antigua cantera de
marés, una arenisca formada por litificación de las dunas, muy abundantes; es una
piedra muy utilizada en construcción por estos lares.
|
Ibiza. La antigua cantera de marés y, al fondo, la playa de las
salinas (30 de noviembre de 2024) / [granuribe50]
|
Es un lugar estupendo, sobre todo cuando no hay nadie, como es el caso. Bueno,
digo mal: alguien sí había; una señora en
topless paseando por el
agua, que debe de estar ya bastante fría, superado el calentamiento veraniego.
Si miran la imagen con atención, en plan
¿dónde está Wally?, la
descubrirán. Pero, como G.U. intuye que no será así, la gente no se suele fijar, se les acerca un poco; ahora sí.
|
Ibiza. La antigua cantera de marés y, al fondo, la playa de las salinas (30 de noviembre de 2024) / [granuribe50] |
|
Ibiza. La antigua cantera de marés y, al fondo, la
playa de las salinas (30 de noviembre de 2024) / [granuribe50]
|
Y también andaba por ahí una parejita paseando al perro. Pero nadie más....
|
Ibiza. Al fondo, la Illa dels penjats y Formentera (30 de
noviembre de 2024) / [granuribe50]
|
Solo espero que
ResponderEliminarno sea nada .
¡Gracias! Espero que así sea, es decir: nada.
EliminarRespecto a lo último, existe un chisme llamado teleobjetivo...
ResponderEliminarBuen chisme que utilizo con mi réflex, pero no con mi modesto telefoillo.
EliminarSiento q después de lo de tu hermana, aún sigas en hospitales y para remate con virus de okupas dentro...yo creo q diciembre de va a portar bien con vosotros, para compensar todo lo malo q fue noviembre y aún desde un hospital ! qué bonita es Ibiza! y qué color tan bonito tiene ese mar...a Wally/chica se la divisa fácil y eso q no lleva camiseta a rayas ; ) muchas gracias por este paseo entre tus recuerdos buenos y malos...lo dicho, este mes sólo admitimos q te ocurran cosas buenas, un abrazo muy fuerte !
ResponderEliminarMuchas gracias, María!
EliminarYo creo que sí, soy optimista en el sentido de que es difícil, pero no imposible, que diciembre sea peor que noviembre. Los virus o bacterias nos han invadido últimamente a todos por aquí y espero que vayan abandonando "el barco" paulatinamente. Ya sabes que mi interpretación es siempre positifa, nunca negatifa, la frase inversa a una que pronunciaba un sujeto llamado Van Gaal, antiguo entrenador del Barça.
[video]https://youtu.be/1i_1zKtDMBc?si=-Sg_tHLHHvRyC75M[/video]
Ibiza es bonita, sobre todo en invierno, pero en esta época aquí no hay absolutamente nada abierto, ni bares, ni tiendas ni na de na (Mercadona, Eroski y el hospital de Can Misses, sí). Como se hace de noche muy pronto (antes que en Tuy, estamos más al este y el sol sale y se pone antes) esto es un rollo turco. Se quejaba no sin razón Mike Oldfield, un músico que me gustaba mucho. Se compró muy contento una casa aquí, hasta que le salieron grietas (era en un acantilado inestable) y, además empezó a darse cuenta de que <"En Ibiza también hay invierno". Corolario: se fue y ya no volvió nunca más.
[img]https://ibizafilmoffice.com/wp-content/uploads/2018/03/Capturadepantalla2017-08-21alas20.18.59-300x300.png[/img]
En fin, María, un abrazo fuerte, me gustan siempre tus comentarios (y "El saco de los pensamientos" también, of course).
Hay ocasiones que llueve sobre mojado, y por lo que veo esta es una de ellas.
ResponderEliminarMe alegro de leerte, ahora bien, no en estas circunstancias.
Esperemos que todo vuelva a la normalidad, aunque a decir verdad la "normalidad" que aceptamos es lo que no se aceptaba por normal anteriormente.
Gracias por el video que me mandaste, el del arquitecto, muy bueno por cierto.
Cuidate, haz el favor.
Salut y gracias por estar
¡Gracias! Sí, llueve sobre mojado, pero siempre escampa. Espero desde Barça poder aportar algo más, pero me esmero lo que puedo en los comentarios a vuestras entradas.
EliminarEncontré ese vídeo a raíz de que publicaras el dibujo del aeropuerto que hizo tan ilusionado Antoni Puig Gairalt. Por lo que se ve en él, el hombre se deprimió mucho cuando no le encargaron el proyecto, hasta el punto de que se especula de que eso anticipó su muerte.
Un abrazote.
Espero que os mejores todos. Un beso
ResponderEliminar¡Gracias, Susana! Agradezco mucho tus buenos deseos, tus visitas y comentarios. Besos.
EliminarAmigo Gran Uribe, deseo de todo corazón que vayáis superando la normalidad, que te recuperes y dejes los hospitales bien lejos. Que puedas volver a Ibiza con tranquilidad y calma o pasear por las calles de Barcelona contemplando la diversidad y la torpeza de sus paseantes.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Esto último espero hacer en breve, aunque actualmente detesto las iluminaciones navideñas, sean más modelnas o menos.
EliminarMi salud está un poco resentida, pero por fortuna sigo apreciando una buena comida, y no me falta tampoco aquí. En eso, me confieso un materialista de tomo y lomo. Ya sabes a qué me refiero...
Un fuerte abrazo.
La comida catalana, como la mayoría de las que hay en España, puede ser un gran revulsivo por aportar placeres gustativos, visuales y aromáticos, sobre todo, pero incluso táctiles (apretar una barra de pan lo es para mí) o sonoros (como cuando algo cruje entre los dientes). Si hay que entregarse unos días a ella, y, si es posible, en compañía, se hace y seguro que un montón de endorfinas acaban corriendo por nuestro organismo. Así pues, dejamos las enfermedades para otra lejana ocasión y nos vamos a cenar, que me ha entrado hambre. Un saludo y a encarar el fin del 2024 con ánimo.
ResponderEliminarMateo.
De los problemas de salud que he padecido y padezco, no muchos por suerte, los que peor he asimilado son los que están relacionados en el aparato digestivo, el cáncer de colon sin ir más lejos. Para mí es uno de los mejores momentos del día: la hora de la comida y de la cena. Es fácil que me levanten el espíritu, ya desde minutos antes. Un buen texto el tuyo, Mateo. Estoy muy de acuerdo.
EliminarGracias por los ánimos y saludos.