Trobada d'Oriol Junqueras i Carles Puigdemont, acompanyats d'Elisenda
Alamany i Jordi Turull [Foto: ACN, Marta Vidal] |
Aparición estelar de Puchi y Junqueras a bordo del Renault de matrícula
1-O-2017 [OKD / granuribe50] |
Puigdemont pasea solitario por los bosques de los alrededores de Waterloo [De la propaganda electoral de Junts per Catalunya (2017)] |
Aunque, ojo, Puchi aún es capaz de mantenernos en vilo con sus
chantajillos, mientras nuestro apuesto y avispado Presidente le va dando largas, porque sabe que si le concede todo de una vez, Puchi ya no lo
necesitará para nada y hasta sería capaz de dejarlo compuesto y sin novia. Lo
del PP no sabemos si le mola o no a nuestro Molt Honorable en el
exilio, aunque parece que va a ser que no mucho; entre tanto, el no menos sagaz (?) Jefe de la Oposición procede a cortejarlo, con más moral que el Alcoyano.
Aprovechándose del carajal en que estamos inmersos, Laurel y Hardy se reúnen en Waterloo al igual que los vencedores de la Segunda Guerra Mundial en la Conferencia de Postdam (símil de R. de E.), contribuyendo, con la complicidad de Sánchez, a que G.U. se quede con la impresión de que vive en un país que da una mezcla de risa y de pena, aunque más de lo segundo. Y no solo por este asunto.
Stalin, Roosvelt y Churchill al inicio de la Conferencia de Postdam (1945) [Foto: United States Army Signal Corps] |
El país no son estos dos mendas, ni Feijoo, ni mucho menos Sánchez y sus palmeros. El país es la gente que se levanta a las 6 o las 7 y se mete en el autobús, metro, tren, en su coche (si le dejan contaminar) y va a trabajar, comiendo un bocata o, si puede, un menú barato, intentando ahorrar para poder ir unos días de vacaciones. Y al día siguiente, que llueve y hace frío, vuelve a llenar los medios de transporte y las calles y carreteras, en busca de su pan. Son los de la primera frase los que se ríen de los de la segunda. Y aunque los primeros sean mucho más numerosos de lo que nunca debieron ser, los otros son la inmensa mayoría, muy inmensa y mucho inmensa que diría un antiguo amago de prócer. Un saludo.
ResponderEliminarMateo.
Risa y pena , es una tragicomedia. Y la matrícula del coche una cosa para distraer a los niñatos.
ResponderEliminarCoincido con Mateo.
Salud.
Vaya par. Un beso
ResponderEliminarLa estabilidad de Sánchez depende totalmente de ellos y Sánchez hará cualquier cosa por seguir en el poder, aunque tiene una carta marcada: a ninguno de ellos dos les interesa ni por activa ni por pasiva que gobierne el PP, así que todo es un juego de máscaras en el que todos están interesados. Poses y más poses, artimañas y trucos de prestidigitador para conseguir ser mano en el juego. Saludos.
ResponderEliminarPues yo lo que veo es que la situación se normaliza, después de todo lo que ha pasado este país. Sólo falta que fumen todos la pipa de la paz públicamente, que hablen de los intereses que cada uno representa, que vivamos en paz y sepamos perdonar.
ResponderEliminarSaludos