sábado, 20 de diciembre de 2025

G.U. les desea lo mejor para lo que se avecina

Carísimos/as seguidores/as:

El lunes 22 parte G.U. para la «ex-isla mágica» (o sea, Ibiza), «con permiso de la autoridad y si el tiempo no lo impide». Compromisos familiares reclaman su atención. Como no sabe si allí estará unplugged o no, siempre es una incógnita, aprovecha para enviarles ya hoy su mejores deseos. Lo hace desde el barrio de Les Corts, en Barcelona, donde ayer tomó esta entrañable imagen de un portal del Pasaje Planell. Allí aún queda media docena de casas por derribar. Pero durarán: son gente resiliente.

 Un abrazo a todos, todas y todes.
Barcelona, Pasaje Planell (barrio de Les Corts) / [granuribe50 (19/12/2025)]

viernes, 19 de diciembre de 2025

Sobre la Diagonal y la Ciudad Universitaria

G.U. se acaba de enterar de que el Ay Untamiento de Barcelona pretende transformar el tramo de la Diagonal a partir de Francesc Macià hacia el Oeste en un "eje de movilidad sostenible". ¡Peligro!, cuando oye esas tres palabras juntas se pone a temblar. Hay un dicho popular, basado en el sentido común, que enfatiza la sabiduría de no alterar sistemas o estrategias exitosas. A G.U. le gustaba mucho ese tramo. En esas estamos. Lo quieren "remodelar"...
Urbanizción de la Diagonal / Autor desconocido (AMDC)
Veamos un poco la historia. La que entonces se llamaba Avenida de Alfonso XIII se empezó a urbanizar a partir de la actual plaza Francesc Macià hacia 1924, con vistas a la Exposición de Barcelona de 1929. 
Barcelona, actual Francesc Macià / Fotografía: Pérez de Rozas (fecha indeterminada)
Nicolás Rubió i Tudurí fue uno de los arquitectos que trabajó en los proyectos que configuran la prolongación de la avenida Diagonal de Barcelona entre Francesc Macià y Zona Universitaria. Entre ellos, la plaza de la que hablamos, el Turó Park y los jardines del Palacio de Pedralbes.

La Avenida estableció una nueva sección asimétrica, proporcionando un paseo muy arbolado en la parte norte y un paseo para caballos en la parte sur. Esta sección ha permitido un correcto funcionamiento en la actualidad de este tramo de la Diagonal, incorporando el carril bici en el paseo norte (de deportistas que hacen footing, de ciclistas de Glovo y de patinetes, que lo convierten en bastante peligroso para el peatón, todo sea dicho) y el trazado del tranvía en el sur. Todo ello configura un eje verde muy bueno. Pues bien: ¡vamos a cambiarlo!, será que no hay otras cosas en las que gastar el dinero público.
Se urbanizó esta encrucijada como plaza, se creó el Turó Park y el ajardinamiento del Palacio de Pedralbes. Este lugar tuvo antiguamente otros nombres; la llamaron Alcalá Zamora (1932-1936), Germans Badia (1936-1939), Calvo Sotelo (1939-1979) hasta el actual Francesc Macià (1979-?).
Diagonal / años treinta [Brangulí fotógrafos / ANC]
El caso es que a partir de los años treinta, ese tramo de la Diagonal hasta el Palacio de Pedralbes se convirtiría en un paseo para muchas familias pudientes, sobre todo de Pedralbes, especialmente los días festivos. Otros llegaban hasta allí en sus coches desde otros puntos de la ciudad. No era difícil aparcar allí...Todo eso lo atestigua esta conocida imagen tomada por Brangulí.
Diagonal, entrada al Palacio de Pedralbes / Les Corts Desapareguda / [Brangulí fotógrafos / ANC]
Hay muchas fotografías de esa zona en el libro Les Corts Desapareguda, editado por Edafós y el Ay Untamiento de Barcelona. Se trata de una colección de libros de todos los barrios de Barcelona.
Plaza de Calvo Sotelo  / [Anónimo / «Terrazas en la Diagonal» (Francesc Català Roca, 1944)]
Josep Rodríguez Lloveras (1902-1984) proyectó la «Casa Ferrer Cagigal», en la plaza Francesc Maciá. Ese grupo de edificios (el que ven a la izquierda ya salía en una foto anterior) se completó un poco más tarde, delimitando la forma circular de la plaza. En los años cincuenta era un hervidero los días festivos para tomar el aperitivo, como acredita la foto de la derecha, de Francesc Català-Roca.
Plaza de Calvo Sotelo. Los padres de G.U tomando el aperitivo junto a la «Casa Ferrer Cagigal» (Navidad de 1945)
[FILM-FOTO SOLER, Travesera Vieja de las Corts, 93]
Es el marco de una de las fotos de los padres de G.U., tomando el vermut (sin percebes, el sueldo no daba, iban justitos) en un conocido bar situado en el edificio (el Sandor, que se inauguró en 1944). En agosto de 1945 había nacido la hermana de quien esto escribe, nvts (EPD). A la derecha, un sujeto con pinta de espía al acecho, pero no a nuestro padre, poco que espiarle: era bastante adicto al Régimen...
Diagonal (Avenida Generalísimo Franco) / [Fotografía: Jesús Fraiz (1951)]
Estamos en la otra punta, la entrada a Barcelona. Esta imagen está tomada en 1951, con la Diagonal ya urbanizada. A la izquierda ven el ajardinamiento del Palacio de Pedralbes y a la derecha el monumento a los Caídos (derribado en 2005) y la que sería futura Facultad de Farmacia. Todavía no estaban construidos los colegios mayores que la preceden. Al fondo, la Sagrada Familia.
Diagonal (Avenida Generalísimo Franco), Gran Premio de España de Automovilismo (28/10/1951)
[Fotografía: motosport.com]
Allí se celebraban carreras de coches, a las que acudía el padre de G.U., que era bastante aficionado; siempre nos contaba que Fangio y Ascari eran muy buenos y Francisco Godia (el de la Fundación) un verdadero maleta. En la fotografía, el Gran Premio de España de 1951. Nos lo cuentan en el enlace.
Palacio de Pedralbes y Monumento a los Caídos [Autor desconocido (AMDC]
Aquí los tienen a los dos, el Palacio y el Monumento a los caídos, a un lado y a otro de la Diagonal. En 2001, un grupo de jóvenes independentistas, pertenecientes a la autodenominada Plataforma Antifeixista de Barcelona derribó la pieza que presidía el conjunto, una escultura de Josep Clarà que representaba a dos hombres, uno sujetando a otro en su caída. La escultura fue trasladada a un almacén municipal y nunca fue restaurada ni colocada en alguna parte, que sepa este bloguero.

Estatua de Clarà, caída frente al Monumento a los Caídos (2001)
Monumento a los Caídos / Florensa y Soteras, arquitectos (1951)
En 2005, el Ay Untamiento de Barcelona desmanteló los elementos arquitectónicos restantes (la columnata y la base). El espacio se transformó en una pequeña superficie de césped. En fin, ya conocen lo que piensa de esas cosas G.U., o sea, que no nos repetiremos.
Construcción del altar para el Congreso Eucarístico / [Fotografía: Jesus Fraiz Ordóñez]
Barcelona, Altar para el Congreso Eucarístico / [Soteras / Riudor arquitectos (1952)]
Aquí se celebró la misa de clausura del Congreso Eucarístico Internacional, de 1952. La cubierta circular del altar fue una obra curiosa, que llamó mucho la atención de las revistas especializadas. A G.U. le gusta. El conjunto lo diseñó el arquitecto municipal Josep Soteras (que citaremos más adelante, cuando hablemos del Nou Camp del Barça), junto con Lluís Riudor (que fue profesor de G.U.).
Barcelona, Congreso Eucarístico [de un documental de RTVE] (1 de junio de 1952)
Ahora el lugar es la plaza de Pío XII, atravesada por la Diagonal, a la que dan la Facultad de Derecho, los colegios mayores que preceden a la Facultad de Farmacia y el hotel Princesa Sofía. Allí se juntaron cientos de miles de personas, según cuentan las crónicas. El conjunto fue desmontado al acabar el Congreso Eucarístico. A partir de entoces se comenzó a urbanizar la plaza, ya con el nombre Pío XII.
Barcelona: Diagonal. Palacio de Pedralbes. Farmacia. Colegios mayores. Derecho. Plaza Pío XII
[Fotografía: Jesús Fraiz (1958]
Y aquí tienen una vista aérea de ese lugar ocho años después. Ya  está urbanizada la plaza y están construidos los colegios mayores San Raimundo de Peñafort y Nuestra Señora de Montserrat, dos obras gemelas unidas por un pasadizo, del arquitecto Pere Benavent (1955), autor de Cómo debo construir, un libro muy consultado por los estudiantes de entonces.
Barcelona, Facultad de Derecho (1958)
Barcelona, Facultad de Derecho (1958)
También está ya acabada la Facultad de Derecho (1958). Una obra estupenda de los arquitectos Giráldez, López Íñigo y Subias. Más adelante proyectarían la Facultad de Económicas, el Plan Parcial de Montbau, la Universidad Autónoma de Bellaterra y el Hospital Oncológico, en la autovía de Castelldefels, entre tantas otras.
Barcelona, Camp Nou, Maternidad  y cementerio de Les Corts / [Helicóptero TAF, 1958  (ANC)]
Y este es el Camp Nou, el campo del Barça, que fue inaugurado en 1958, después del pelotazo del de Les Corts. Los arquitectos fueron Soteras (que fue arquitecto municipal con Porcioles), Mitjans y García Barbón (que fuera jefe del cuñado de G.U. cuando éste estudiaba la carrera).
En aquella zona todo eran campos, salvo los edificios de La Maternitat, el cementerio de Les Corts y alguna masía. Un poblado de barracas situado a la izquierda fue desmantelado. La Diagonal queda arriba a la derecha y un poco más allá están los cuarteles del Bruch.
Escuelas de Aparejadores, de Arquitectura (ETSAB), de Ingenieros (1961) y de Altos Estudios Mercantiles
[Helicóptero TAF (ANC)]
Había interés por situar las zonas de conflicto, como la Universidad, fuera del centro de la ciudad, un lugar donde fueran fácilmente controlables. Por otra parte, también interesaba situar a la entrada de Barcelona un conjunto monumental que tuviera buena presencia. Lo primero fue la Facultad de Farmacia, que situaron en un edificio preexistente, después la Facultad de Derecho, ya comentada y más tarde las escuelas técnicas. Ahí tienen la Escuela de Aparejadores, terminada, la Escuela de Arquitectura (ETSAB, donde estudió G.U.) casi acabada y la Escuela de Ingenieros, en construcción.
Escuelas de Aparejadores, de Arquitectura (ETSAB) yde Ingenieros (1962) / [Helicóptero TAF (ANC)]
Y aquí ya tenemos la Escuela de Arquitectura plenamente operativa. Se inauguró en 1962, aunque G.U. no la pisaría por primera vez hasta finales de 1967. Uno de los primeros "pobladores" fue el inolvidable arquitecto, poeta y profesor Joan Margarit. En BARCELONA AMOR FINAL nos recordaba aquello, entre otras muchas cosas de la ciudad de sus amores. Es un libro precioso, muy recomendable (en catalán, castellano e inglés), de quien fuera estupendo profesor de Estructuras de G.U. 
Diagonal, Escuela de Arquitectura (ETSAB), Escuela de Ingenieros (detrás) y Colegios Mayores
[Fotografía: Xavier Miserachs (1964)]
G.U. recuerda muchas cosas de aquella época. Fueron años difíciles, las postrimerías del franquismo. Huelgas, entrada de los grises en las facultades, cierre por meses de éstas. En el 69 y 72 hubo pequeñas revoluciones, los alumnos consiguieron echar a profesores por "franquistas" y eso supuso la llegada en su sustitución de jóvenes recién licenciados, en general poco competentes. G.U. aún se acuerda, para mal, de que en la asignatura "Resistencia de materiales" se sometió el aprobado de su examen final a la votación asamblearia de la clase, ya que tenía un 4,8. Fue suspendido por "el pueblo" (pero al año siguiente recobró su cátedra el titular, Bordoy, y se le aprobó). Corrían tiempos convulsos.
Vista de la Diagonal, Parque de Cervantes, Ciudad Universitaria y Camp Nou
Por entonces, casi todos los profesores llegaban tarde, especialmente los de Proyectos: la clase duraba tres horas pero solían aterrizar por allí de forma un punto indolente una hora tarde. Ese tiempo lo dedicábamos a contemplar la Diagonal desde los ventanales del tercer piso, ir al bar a tomar un bocata de "país con tomate" y esas cosas. Desde allí se veía toda a Diagonal y toda Barcelona hasta el mar, como recordaba Margarit. Todo aquella panorámica ha cambiado mucho desde entonces, como se ve.

sábado, 13 de diciembre de 2025

Elena Francis ('influencer' del franquismo) era un hombre

En efecto, durante catorce años, de 1966 a 1984, Juan Soto Viñolo fue uno de los autores de las respuestas de un programa dedicado exclusivamente al público femenino y que, primero, desde Radio Barcelona y, después, desde Radio Peninsular y Radio Intercontinental se convirtió en todo un fenómeno sociológico en la España del franquismo. El programa se había iniciado en 1947. 

Sonaba cada tarde en casa. Pues sí, la sintonía de Elena Francis fue la música de fondo de las tardes de muchos hogares españoles. Mujeres de toda edad y condición escuchaban durante treinta minutos los consejos sentimentales, domésticos y de belleza que, atendiendo a las cartas de las oyentes, redactaba Juan Soto Viñolo (antes de él hubo otros) y leía con voz aterciopelada la locutora Maruja Fernández. Cuando el programa desapareció del dial, en enero del 84, el periodista catalán escribió el libro Querida Elena Francis, en el que relataba casos curiosos de sus 14 años al frente de la redacción.

Maruja Fernández / Portada del libro de Juan Soto Viñolo

Durante años las oyentes creyeron que 'Elena Francis' era una doctora barcelonesa, y que era la que contestaba sus cartas. En realidad, se trataba de un personaje ficticio cuyo nombre hacía referencia a Francisca Elena Bes Calvet. 'Elena Francis' fue una productiva campaña de marketing ideada por Josep Fradera y su esposa —la susodicha Francisca Bes—, propietarios del Instituto de Belleza Francis; así promocionaban sus productos. Ella firmaba las respuestas, pero nunca redactó ninguna.

Los Fradera contrataron a un grupo de guionistas para que contestaran por correo las miles de cartas que les llegaban y que no se podían emitir, por la censura o por falta de tiempo, en general escritas con torpeza y llenas de faltas de ortografía. «¿Te gusta escribir?», preguntaban los anuncios para reclutar escribientes. Para ser ‘contestador Francis’ había que tener máquina de escribir propia y no cometer faltas de ortografía. Por supuesto, se exigía discreción: la identidad de Elena Francis era secreta. 

En 2007 se encontraron alrededor de setenta mil cartas de aquellas en una antigua masía que entonces era propiedad de los Fradera en Cornellá —Can Tirel—, dentro de unas cajas. Se conservan en el archivo comarcal del Baix Llobregat y diez mil están digitalizadas. Todo un testimonio de la época. 

Veamos el contenido de una de ellas y, tras la música, la respuesta de la señora Francis:

Navas del Abad, 7 de marzo de 1956 

«Querida señora Francis: 

Me dirijo a su consultorio angustiada por una duda que corroe mi alma: el verano pasado vino, con los veraneantes que cada año vienen al pueblo, un muchacho de diciesiete años, muy guapo que me presentó una prima mía en la fiesta de San Isidro y estuvimos bailando y me dijo que estudiaba para abogado. Luego, cuando se volvió a Madrid, nos escribimos muchas cartas y me pidió relaciones y una foto. Yo me enamoré de él y me dijo que vendría en Navidad.

Nos vimos y él enseguida se quiso propasar con sus caricias porque estaba muy enamorado y me dijo que eso es normal entre novios. Ahora quiere volver y temo que no se conforme con lo que le di la otra vez, porque se pone muy pesado y dice que le dan palpitaciones si no se alivia. Yo tengo dieciocho años y no sé nada de hombres, pero temo que me pida lo que no puedo darle, pues quiero casarme de blanco y como Dios manda».

ANGUSTIADA

La sintonía del fondo sube el volumen durante instantes. Reproduce de nuevo la sintonía del programa, una versión sui géneris del Indian Summer: An American Idyll, de Victor Herbert (1919):


Después baja el volumen y otra voz femenina, en este caso de Maruja Fernández, lee reposadamente:

Respuesta a Angustiada

«Querida amiga:

Veo que eres una muchacha en la edad más delicada y que te has enamorado de veras de ese chico y eso quizá te ofusque los sentidos. En el amor no valen ofuscaciones: hay que mantener la cabeza despejada, pues de lo que hagas ahora dependerá la felicidad o la infelicidad por el resto de tu vida. Si ese muchacho verdaderamente te quiere sabrá contenerse y respetarte.

La relación entre dos novios debe estar presidida por la pureza y la sinceridad de intención. ¿Conoce este novio a tus padres? ¿Te ha presentado a los suyos? Una relación firme debe comenzar por ahí y la única muestra de afecto permisible es pasear de la mano, siempre por lugares concurridos o bajo la vigilancia de personas de respeto y acaso algún beso en la mejilla. Guarda los besos apasionados y las caricias para el matrimonio y entonces te sabrán mejor. Si él verdaderamente te quiere sabrá esperar y respetarte. Bajo ningún concepto debes entregarle tu virtud por muy enamorada que estés y por muy buen porvenir que él te ofrezca. No olvides que muchos hombres cuando consiguen la satisfacción corporal que anhelan en la mujer se olvidan rápidamente de ella y hasta la desprecian. No te pongas en ese peligro.

Recibe un cariñoso saludo de tu amiga...»

ELENA FRANCIS

jueves, 11 de diciembre de 2025

Peligro: un solitario joven ¡leyendo un libro!

M.C. publica hoy una entrada con un reloj de sol que está en las cercanías de la plaza Trilla, en el barrio de Gracia, de Barcelona. Adjuntaba un enlace a Google Maps en el que se ve la susodicha plaza, que antiguamente "era el campo de trillar, de aventar, de la masía que había al lado, y de ahí su nombre".
El urbanismo posterior no le hizo mucho favor a ese lugar. Pero, ¡ojo!, allí hay una preciosa fuente de cuatro caños y cuatro farolas, que nos recuerda algo, entre otras, a la de la plaza de la Concordia (en el barrio de G.U.), con algunas diferencias, tales como que ésta sólo dispone de dos caños y tres farolas.
Barcelona, plaza de la Concordia (11/12/2025) / [Fotografía: doña Perpetua]
Pues bien, hará cosa de un par de horas, doña Perpetua ha visto en la susodicha plaza de la Concordia a un joven ¡leyendo un libro a la luz de las tres farolas! En tiempos de Baroja, el camarero de un hotel de lo que se sorprendía era de ver a un viejo "a su edad y teniendo que leer todavía todavía" (sic).

Pío Baroja, Los caprichos de la suerte, Ed. Austral (2016), pág. 170
Nos suele sorprender lo contrario; ¿qué hace ese solitario joven con su capuchita leyendo un libro en relente, pudiendo estar tomando unas cervezas a gollete en un bar de la plaza? Quién sabe, pero es un mal —o buen— augurio: un joven leyendo, quizá ampliando campo de visión; mal —o buen— asunto.

lunes, 8 de diciembre de 2025

Inmaculada, Salamanca, plateresco, barroco y Ribera

Para meternos en el asunto, viajamos virtualmente a Salamanca ya que hoy no podemos hacerlo físicamente, qué más quisiéramos. Evidentemente, hay que ir a la Plaza Mayor (nº 1), a la Universidad (nº 15, 16, 17) y a la Catedral, un poco más abajo. Pero no está de más echarle un ojo al Convento e Iglesia de las Agustinas de Monterrey (nº 18), donde está la Inmaculada de José de Ribera, y al Palacio de Monterrey (nº 19). Plateresco en éste y ya barroco en aquél. No hay pérdida posible: están el uno junto al otro. Ça vaut le voyage!, diría Monsieur Michelin. ¡Fantástico!
Salamanca, palacio de Monterrey
Salamanca, Iglesia de las Agustinas
Esto de la Inmaculada es un tema que no a todo el mundo agrada. Lo hacemos hoy —porque nos gusta y nos da la gana— con estas pinturas dedicadas a la Inmaculada, muchas de las cuales forman parte de la crónica visual de la infancia de G.U. ¿Por qué? Porque solían figurar (muy especialmente las que pintó Murillo), en muchas estampitas de esas que se ponían en aquellos misales que usábamos en los oficios religiosos y que se regalaban a modo de recordatorio del día de la primera comunión.

Los comentarios anticatólicos y antibarrocos los damos por supuestos. No nos interesan. Aclaremos que quien esto escribe estudió en un colegio de curas de los de antes, como saben los seguidores más fieles. Bien, aquí tienen el retablo del convento de las Agustinas, con la Inmaculada de José de Ribera.
Salamanca, Iglesia de las Agustinas, Retablo con la Inmaculada de Ribera
El dogma de la Inmaculada Concepción establece que la Virgen María fue concebida sin la mancha del pecado original desde el primer instante de su existencia, por una gracia especial de Dios en previsión de los méritos de Jesucristo, su futuro hijo. Este dogma fue proclamado oficialmente por el Papa Pío IX en 1854, mediante la bula "Ineffabilis Deus", confirmando una creencia que se desarrolló en la tradición cristiana. Significa que María fue redimida de forma anticipada para poder ser la Madre de Dios, sin tener pecado alguno desde su concepción. Algo muy adecuado para los más adictos. 
1) Murillo (El Prado); 2) Velázquez (El Prado); 3) Ribera (Agustinas, Salamanca); 4)  Zurbarán (El Prado)
1) Rubens (El Prado); 2) Valdés Real (El Prado); 3) El Greco (Thyssen-Bornemisza); 4) Goya (El Prado)
Aquí, en España, fue un motivo iconográfico recurrente a lo largo de los siglos y muy especialmente durante el barroco, en el siglo XVII. Sin duda debía de tratarse de un encargo muy habitual también para los pintores más conocidos, porque todo Dios, empezando por los reyes, continuando por los prebostes de la Iglesia —que eran los que cortaban el bacalao y pagaban el asunto— hasta acabar por el último pelafustán con pasta, estaba abducido por este mito.

domingo, 7 de diciembre de 2025

Hoy estamos de aniversario

Dado que Samsung y Google nos recuerdan este evento, vamos a aprovechar que el Pisuerga pasa por Valladolid para hacer esta manera de hacer el corderito de un libro que nos han regalado. Hay paletilla,  hay ajos, tenemos vino blanco, tenemos pimentón, tenemos agua, tenemos horno y hay tiempo.

Entonces... ¿a qué esperamos?



ADENDA

La idea del pimentón, el ajo y el vino blanco (en este caso, verdejo de Rueda) es buena. Pero no se fíen para nada de los tiempos de la receta, son claramente exiguos, les falta en total lo menos un cuarto de hora (para doña Perpetua, más, no soporta carnes algo rojizas y mucho menos... sanguinolentas).

sábado, 6 de diciembre de 2025

Adiós de G.U. a Frank Gehry

Frank Gehry, frente al Museo Guggenheim recién acabado; Bilbao, abril de 1997 / [Gorka Lejarcegi]
Ha fallecido Frank Gehry. G.U. se remite a unas palabras, siempre sabias, de F.C. comentando una entrada de este bloguero de finales de octubre del año pasado sobre el museo Guggenheim:

«Cuando vi las primeras fotos del Guggenheim no me gustó nada, luego cuando lo vi al natural me gustó un poco más, he vuelto a ver el museo otras veces y siempre me ha parecido una cosa extraña que satisfacía a los visitantes y a la mayoría de los bilbaínos, ahora me va gustando la cosa extraña y creo que esta construcción placas de titanio ha sido positiva para la ciudad.

Otra cosa es el aspecto constructivo y la irracionalidad estructural. Sé, por información directa, cómo la pasaron de "canutas" los calculistas y los arquitectos que tuvieron que resolver aquel artefacto arquitectónico. Concluyo que Frank Gehry ha proyectado edificios que han complicado la vida a unos constructores y han dado felicidad a unos espectadores. He dicho espectadores porque aquellos edificios son una arquitectura-espectáculo de campanillas».
Frank Gehry, museo Guggenheim (Bilbao) en la actualidad / [Gonzalo Azumendi (Getty Images)]
En efecto. La apertura, en 1997, del Guggenheim Bilbao, le convirtió en "arquitecto-estrella" ya con 68 tacos, y al edificio en una avanzadilla de lo que vendría en el siglo XXI. Lo espectacular de la carcasa, con su estructura de titanio, cambió por completo el aspecto de la ría del Nervión y de toda la ciudad de Bilbao, que estaba muy descuidada y sin apenas visitantes (lo de ETA no ayudaba). Y, en unos años, convertida en polo de atracción cultural, turística y gastronómica. Su impacto fue tal que se lo llegó a llamar efecto Guggenheim. Vean la diferencia entre esta imagen actual con la que se hizo del propio Frank Gehry el año de la inauguración, en 1997. En cuanto al contenido del museo, ese es otro cantar.
Bilbao, Museo Guggenheim / [granuribe50 (26/3/2002)]
G.U. tuvo sus dudas y las sigue teniendo, pero ahora el Guggenheim le gusta más que entonces. Además, él nunca hubiera sido capaz de imaginar ni de realizar algo así, por falta evidente de condiciones y porque no entiende que eso no sea otra cosa que "arquitectura-espectáculo".
[Frank Gehry aparece en los Simpsons en 2005 en el capítulo The Seven-Beer Stretch y en 2009 en Maggie Roark]
G.U. es más de la vieja escuela. Sin embargo, no tiene nada contra el arquitecto Frank Gehry, a quien admira. Ya quisiera él haber tenido su imaginación, sus encargos y su despacho (arquitectos recién licenciados escogidos entre lo mejorcito de cada universidad, becarios selectos, expertos arrugadores de unos papeles que devienen maquetas, calculistas, ingenieros diversos, economistas, etc.).
Frank Gehry, hotel en las bodegas Marqués de Riscal, Elciego (Álava)
Frank Gehry, Hotel Marqués de Riscal, Elciego / [Fotografía: Adrian Tyler]
De hecho, además de a Bilbao, ha ido a la Rioja bastantes veces (le encanta todo aquello) y casi siempre aprovecha para pasarse por las Bodegas Marqués Riscal, en Elciego, obra del susodicho (el hotel), como es fácil adivinar. Su estilo es inconfundible. incluso en el "Pez Olímpico" de Barcelona. 
DEP, Frank Gehry.
Barcelona, Frank Gehry, el Pez Olímpico (1992)