Uribe se ha quedado muy pensativo, meditando sobre eso de la identidad y el entendimiento.
Hoy ha acudido nuevamente al simposio-aquelarre, invitado por Sobrequés. Le ha parecido advertir que allí reinaba una especie de contenida euforia, al tenerse ya la certeza de que
Madrit prohibirá la consulta. Piensa Uribe, no sin fundamento, que eso puede dar de comer a más de uno por el resto de sus días.
Ha vuelto a casa un poco abrumado, y hoy no hará bromitas. Cree conocer el percal y sabe que ha de
estalviar batería, porque necesitará de dosis extra de sentido del humor para capear la cansina monserga que se nos viene encima, por si no hubiéramos tenido ya bastante...
No hay comentarios:
Publicar un comentario